Extincion humana

Andressa

Abro los ojos, me pesan mucho, tanto que solo los quiero mantener cerrados y quedarme aquí.
Tumbado en el suelo húmedo.
¿Porque estaba aquí?
Haz memoria...
Veo la cascada, el agua cae como de unos siete metros de altura.
Lo recuerdo...
Me miro la pierna, veo que esta roja, bastante inflamada y tengo una herida muy fea en el pie.
Me arrastro hasta un árbol y subo lentamente.
La vista se me nubla al momento, me apoyo fuertemente al robusto árbol.
Me miro el cuerpo, la camisa rajada a la mitad, a partir de la entrepierna derecha del pantalón no hay tela que me cubra la piel, mi brazo derecho tengo una linea con sangre seca.
Prácticamente estoy medio muerto.
Tengo el carcaj a la espalda, los dos cuchillos en la funda y mi mochila.
Lo que no tengo es el arco...
El arco...¡EL ARCO!
Mis ojos se mueven por todas partes buscando la mejor arma que controlo.
Una chica esta detrás de un arbusto apuntándome con MI arco y una de MIS flechas.

-Es mio pedazo de...

Suelta la cuerda, me agacho al momento, la flecha se queda clavada a un centímetro de mi cabeza.
Me tropiezo y caigo de bruces al suelo, agarro uno de los cuchillos y me cubro detrás del árbol.

-Sal de hay.

Su voz es aguda pero firme, escucho sus pisadas, el sigilo no se le da muy bien, apretó mi puño alrededor del cuchillo, preparándome para apuñalarla.

El arco y el carcaj pasan volando a mi lado, aterrizan a un par de metros...

-¿Podemos hablar? Perdón por haberte lanzado la flecha...

Salgo del árbol todavía con el cuchillo en la mano, podría empujarme y literalmente acabar con migo.

Su pelo es marrón, lo tiene recojido en una trenza que le cae en el hombro derecho, su color de ojos son tambien marrone , tiene unos labios finos y sus orejas son pequeñas.

Su ropa esta rota, mucho más que la mía, su camiseta negra no tiene mangas y sus vaqueros tiene un rajazo a lo largo de toda la pierna.

-¿Que quieres?- le pregunto serio.

-Vivir...Podrías acompañarme, hacerme compañía, estoy buscando a mi hermana pequeña Anna, estábamos en el centro de Brooklyn llendo hacia un refugio que tenían preparados los militares, al llegar una horda de caminantes fue directo hacia allí y perdí de vista a mi hermana...

Desde mi punto de vista no le hecho más de unos diecisiete o dieciocho años.

-Bueno...¿Estas bien? Te encentro tirado en la tierra y lo unico que se me ocurrió fue cojer el arco por si te convirtias en una de esas cosas.

No tiene ni un arma, ni un solo cuchillo para defenderse...No se si confiar en ella, esta buscando a su hermana y yo estoy buscando a Dani...Los dos solos.

Agarro uno de los cuchillos, camino hacia ella lentamente, se lo ofrezco.

-¿De verdad? ¿Confías en mi?

-Si, ¿Por que no?- la miro fijamente a sus ojos azules.

-Gracias- agarra el cuchillo y lo mira detenidamente.

-Como me intentes hacer algo, no pienses ni un solo segundo en que te matare.

-Eres...misterioso, seguro de tu mismo, ¿no tienes miedo?

Lo pienso un momento...¿Tengo miedo?

-¿Miedo a que?

-A esos "monstruos"- entre cierra los ojos al decir "monstruos"

-No, no se porque no les tengo miedo, porque podrían matarme en un puñetero segundo pero...Puedo luchar contra ellos así que no.Pero tu si, ¿verdad?