Capitulo 5

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Narra Damian

-UBP quiere decir Underground Blood Pact y es el grupo al cual perteneció el hijo de puta que te hizo tanto daño -suspiro y aparto la mirada. -Y al que pertenecí yo hace 4 años.

Luego del impacto de todo lo sucedido decidí no llamar a la policía hasta que sepamos mas del asunto. Javier se altero de nuevo al recordar el pasado, así que lo lleve a la habitación para que pudiera descansar.

Llame a alguien para cambiar la cerradura, pasaron las horas y finalmente se hizo de noche.

Ahora estaba en la habitación con Javier. Él recostado en la cama, yo en un sillón cerca. Hace unos pocos minutos que había despertado

-¿Porque dice Rules? ¿Que quiere decir? -pregunta.

-Es como me hacia llamar en el grupo -respondo.

-Que irónico -ríe Javier pero la risa le salio demasiado nerviosa y deformada para ser llamada así. -¿Que vamos a hacer?

Miro hacia las sabanas que lo cubren. Sinceramente no lo se, todo se ha vuelto demasiado complicado en cuestión de horas.

-¿Porque no intentas dormir un poco mas? Te prepare algo de comer -estoy poniéndome de pie cuando siento que Javier me sujeta, justo como la noche anterior.

Narra Javier

La electricidad que siento a su lado es tan normal y anormal a la vez. Es como si mi mente se preguntara: "¿como no estarlo tan cerca de él?". Pero la potencia de esa electricidad, la sensación de tenerlo todo y a la vez nada, eso lo hace tan anormal.

Ahora estoy asustado, no puedo negarlo, estoy tan asustado de que ese pasado vuelva, ahora no solo el mio sino también el de Damian. Y siento, que si me separo de él, aunque sea un poco, todo lo bueno que queda podría desaparecer.

-Quédate -susurro. -Quédate conmigo.

Cuando miro a sus ojos me doy cuenta, ya no es un "te necesito" es un "nos necesitamos" y me hace sentir que esta bien, que esta bien sentir esta electricidad en mi cada vez que esta cerca, que esta bien desearlo de formas que no creí posible, que esta bien pensar en esos sentimientos y no ignorarlos.

Veo el sonrojo de Damian por la luz de la lampara en la mesita de noche. Me hago un lado justo como la noche pasada para hacerle lugar, vacila un poco pero finalmente se recuesta a mi lado.

-¿Estas bien? -pregunta.

Asiento con la cabeza, tal vez este asustado, pero si lo tengo cerca de alguno modo se que pese a eso las cosas estarán bien.

Damian busca mi mano bajo las sabanas y la toma.

-Eres hermoso -susurra. -No creo haber visto a nadie mas hermoso que tu.

Sus palabras... sus palabras finalmente son suaves, tiernas. No hay ceño fruncido, ni labios disgustados, ni frente arrugada por molestia, no hay nada de eso... en cambio hay ternura en su voz y verdad... si, hay verdad en ella. Así que pese a no creerlo antes, pese a no haber escuchado nunca nadie decirme de esta forma tan nueva y tierna para mi, le creo, en ese momento le creo.

-¿Me besarías? -pregunto mirando hacia cualquier otro lado menos a él.

La vergüenza apenas me dejaba respirar, pero ya no podía ignorarlo, quería que me besara de nuevo desde que me robo ese aquel beso el primer día que entre a este departamento. El silencio siguió, y creí que lo había ofendido, después de todo yo lo rechace, no se como se me ocurre...

Toma mi barbilla con su mano libre, con la otra sujetaba mi mano, y me obliga a mirarlo.

-Lo haría, pero no se si podre detenerme una vez empiece -sonríe un poco pero de alguna forma pude captar sus nervios, aunque los controla bien.

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