Me senté y el empezó a hablar.
-Estoy muy agradecido por que todos ustedes estan aquí en este momento tan especial para mi. Les soy sincero hace 3 años murió mi mamá y ese fue el motor para que yo pudiera salir adelante y además me llego una persona don Pedro un aplauso para el. Se volvió un gran apoyo. Este gimnasio es para que todos estemos enfocados en otra cosa y no irnos por el camino fácil como lo hacemos muchos. Gracias y las puertas estan abiertas para todos ustedes. Dijo.
En ese momento todos se pararon para darle muchos aplausos y yo no me quedé sentada y también me paré para aplaudirlo.
Cuando terminaron de felicitarlo yo me acerqué a él.
- Muchas felicidades. De todo corazón te deseo lo mejor y que te vaya muy bien en tu negocio y mi más sentido pésame por lo de tu mamá no lo sabía. Dije.
- No te preocupes hay muchas cosas de las cuales no estas enterada. Dije.
- Es hora de que me digas que es lo que paso con mi abuelo. Dije.
- Hace 2 años le diagnosticaron Alzheimer y poco a poco ha ido olvidando todo en especial a las personas que no ve hace años por eso no te recuerda. Dijo.
- Pero no me pudo haber olvidado a mi a su única nieta. Dije.
- Te juro que le he hablado de ti y tu tía pero siempre me cambia de tema. Dijo.
- Y como no te olvido a ti. Dije.
- Después de que murió mi mamá no sabía donde ir y el me pidió que me fuera a vivir con el, por eso hemos estado juntos durante todos estos años. Dijo.
- Te agradezco un millón que lo estes cuidando pero quisiera que se acordará de mi. Dije llorando.
- No llores cree que haría cualquier cosa para que se acordara de ti. Dijo y me abrazó.
Sentí que ese abrazo era lo mejor que me estaba pasando pero en el fondo sabía que estaba mal.
- Gracias. Dije apartandome de él.
- De nada Marina. Dijo.
- Bueno despideme de él trataré de ir todos los días para estar a su lado. Dije y me fui.
Ver a Alejandro me movió todo mi mundo y después de sabet todo lo que había hecho por mi abuelo hacía que ese amor que sentía por el volviera a resurgir.
Llegué al hotel y cuando estaba a punto de entrar a mi habitación Humberto me tocó el hombro.
- Como te fue. Dijo.
- Mal. Dije.
- Porque que paso con tu abuelo. Dijo.
- Padece de Alzheimer y se ha olvidado de mi y mi tía. Dije llorando.
- No llores mi amor veras que todo va a pasar. Dijo abrazandome.
- No porque esa enfermedad no tiene cura y ya se olvidó para siempre de mi. Dije soltandome.
- Y como te enteraste. Dijo.
- Porque donde estabamos me encontré a Alejandro. Dije.
- Y que hacía el allí. Dijo.
- El se ha hecho cargo de mi abuelo durante estos 2 años. Dije.
- Ahhh y donde estaban. Dijo.
- Estabamos en la inauguración de su gimnasio mi abuelo iba a ir para allá y me fui con él pero no quiero hablar de eso mejor mañana. Dije.
- Está bien. Dijo y me dio un beso en la mejilla y se fue.
Entre a mi habitación y me puse a pensar en todo lo que había pasado este día estuvo fatal me enteré de tantas cosas que no podía asimilar.

ESTÁS LEYENDO
QUÉDATE
RomansaEs la historia de amor entre Marina y Alejandro que pasaran muchos obstáculos para que puedan estar juntos y así quedarse siempre uno al lado del otro.