No me dejes amiga

CAPÍTULO 4

AL FIN PASARON COSAS BUENAS

En la mañana siguiente, Enero 16, mi mamá estaba tan cansada que le fui a buscar un café a Starbucks, como amo los cafés que hacen ahí, ahí fue cuando en la vuelta del camino me lo crucé. Era perfecto, tenía ojos marrón avellana, luminosos y profundos, ese cabello marrón claro que brillaban con la luz del sol y vestido como típico chico adolescente, como amo eso,amo muchas cosas, remera blanca y una camisa celeste con un chupín rojo y unas Vans. Hermoso!!!! Pero que idiota, me tenía que chocar con él.

-Perdón-le dije.

-Está bien-me dijo despreocupado.- ¿Queres que te ayude? Te veo muy cargada.-

-Está bien, pero, tengo que ir al hospital.-agarro mis manos y me saco los cafés, que suaves manos.

-¿Que te paso?-dijo mientras que caminábamos.

-A mi nada, a mi hermana si, tiene neumonía y le estaba llevando un café a mi mamá que la acabo de conocer. Larga historia.-le dije sin ninguna explicación especifica.

-Contame, dale.-dijo curioso

-Mi hermana y yo somos mejores amigas desde que ella tiene 16 y yo 14, ahora tengo 16 y ella 18, convivimos desde que mi papá se suicidó porque no nos quería y él hecho de casa a mi mamá porque no quería ella tuviera hijos y cuando se enteró que mi hermana tenia neumonía se vino al hospital me conto porque se había ido y listo, eso. La verdad no era tan larga la historia. Ah y esto no está relacionado pero mi novio me dejo.-le dije que mi novio me había dejado para ver que decía.

-Bueno, espero que tu hermana se ponga mejor y que encuentres un nuevo novio, estoy segura de que alguien se va a enamorar de vos, sos hermosa. Soy Dàniel.-dijo estirando la mano.

-Yo Angie.-le dije agarrándosela.

Cuando llegamos al hospital me acompaño hasta la habitación y saludo a mi madre, que caballero, le dio el café a mi madre y uno a mí, y después me pregunto si podía quedarse un rato para conocerme mejor, nos fuimos a hablar afuera hasta que me pidió mi numero!!! Cuando se estaba por ir me saludo con un beso en el cachete y salió por la puerta mirando para atrás. Cuando entre a la habitación mi mamá dijo que era re lindo y educado, supuse que le encantaba y no me equivoque.

Desde las 7 de la mañana hasta las 4 de la tarde el día fue totalmente normal y tranquilo, pero, a las cinco vinieron dos vecinos de casa que tenían un papel en la mano y su cara no era muy tranquila. Nos habían embargado la casa, otra vez me hago la misma pregunta ¿Por qué? Todo lo que me paso no alcanza para una vida, no entiendo porque todo lo malo me tiene que pasar a mí, específica y claramente a mí.

-¿Que voy a hacer mamá?-dije llorando.

-Lo primero es tranquilizarte, lo segundo es quedarte acá mientras yo arreglo esto.-dijo confiada de sí misma. Ni la conocía pero confiaba en ella.

-Está bien ¿Que vas a hacer?-

-Tengo varios jueces amigos y muchos abogados que te pueden ayudar, tengo varios contactos que te pueden ayudar.-sé que el hecho de que gracias a ella no embargaran mi casa haría que yo la perdonara pero por lo menos estaba intentando ser una buena madre y lo estaba haciendo bastante bien.

-Gracias.-dije secándome las lágrimas.

-Está bien, pero si no vuelvo mañana no me busques, significa que estoy afuera de la ciudad buscando ayuda, no significa que me voy a ir otra vez, no te preocupes.

-Está bien, te esperamos.-confiaba en ella.

Volvió a los dos días, dijo que ya estaba todo bien y que no iban hacer nada. Por un momento creí que se iba a ir para siempre otra vez. Volvió con algunas cosas: libros para que leyéramos, un poco de ropa y comida que no tenían en el comedor del hospital.

Abrí un libro que trajo mamá y que mi papá me había regalado cuando tenía 14, hush hush, estaba tan aburrida que me dormí leyendo, eso es muy raro en mí, 3 horas nada más y en esas tres horas algo bueno había pasado en mi vida. Cuando me desperté mi mamá estaba en otra habitación con mi hermana. La vi muy feliz así que salí corriendo.

-¿Que paso? ¿Carly se despertó?-

-No, pero la trasladaron a otra habitación. No sé porque.-

-¿Y porque estas tan feliz?-

-Porque vamos a tener una nueva familia, estoy embarazada.-dijo mi mamá feliz.

No lo podía creer, iba tener un hermanito. Al fin algo bueno paso este mes. Abrase a mi mamá y no veía la hora de que Carly se despertara para poder contarle la noticia, pero no se despertó en todo el día. Hora tras hora esperando, hasta las 3 de la mañana no pasó nada. Mi mamá ya se había dormido entonces me quede leyendo hasta que se despertó a eso de las cinco de la mañana. No desperté a mamá porque tenía que descansar y entonces le conté todo: nuestra casa casi que fue embargada, termine con Brad y conocí a Dàniel, mamá estaba embarazada. Se puso re feliz y contenta, se la veía deslumbrante. Esta vez sí duro hasta las 3 de la tarde y después se durmió de vuelta. En todo ese tiempo se puso a conocer a mamá y nos pusimos a hablar de algunas cosas. Cuando se durmió, otra vez, el medico nos llevó afuera y nos dijo que había que hacer una operación, que ya habían investigado bien lo que tenía y que duraba cuatro meses la recuperación después de la operación, el medico nos advirtió que en esos cuatro meses podía pasar cualquier cosa que lastimaran a su cuerpo y hasta incluso podían matarla. Fue cuando todos trataron de ayudar, la operación costaba 30.000 pesos, ayudaron: mi mamá, Dàniel que era prácticamente rico, yo con algunos ahorros y algunos familiares del exterior.

A la semana siguiente ya estaba de novia con Dàniel y la operación iba a empezar 1 semana después. Yo era feliz con él y su quedaba todo el tiempo en el hospital con migo, hasta cuido a Carly mientras yo comía o me bañaba en varias ocasiones. Es tan tierno!!!!

Llego el día de la operacióny yo estaba sudando como un chancho, no paraba de buscar a los médicos y organizarme bien para que la operación saliera perfecta, estaba muy nerviosa.