Más de lo que llegue amarte

1.El pasado siempre vuelve. parte1.

Me levanto a las 6 de mañana como todos los días, preparo la ropa, el desayuno y voy a despertar a mis bebés.

Cuando entro en la habitación cada uno se encuentra en su cunita, Megan ya esta despierta sentadita, jugando con su osito.

-Mi princesa ¿ya despertaste?- me acerco hasta la cuna y enseguida me echa los brazos, Marcos aun duerme, por lo que tomo a Megan y la bajo a desayunar, dejándola sentada en su trona.

Mientras voy a por Marcos, le tomó en brazos, alza los ojitos para mirarme, volviendo a cerrarlos automáticamente, sonrió besando su coronilla, es tán perezoso.

-Amor despierta, vamos a desayunar, mama tiene que ir a trabajar- bajamos a la cocina con Marcos apoyado sobre mi pecho, Megan casi a terminado su biberón, mientras siento a Marcos en su trona y le doy su biberón que toma de mala gana.

Tomo un cafe en lo que suena el timbre es la señora Smith una vecina de unos 50 años que vive sola y cuida de mis bebés cuando estoy trabajando, y para mi es como una mamá, cuando llegue a esta ciudad sola sin dinero y embarazada, fue la única que me ayudó.

-Hola sra Smith- le doy un beso en su mejilla y se adentra en casa cerrando la puerta.

-Hola mi niña ¿has desayunado?- caminamos hasta la cocina.

-Sí e desayunado ya - entramos a la cocina y Marcos se a quedado dormido en su trona sobre sus bracitos apoyando la cabeza hacia adelante.

-Niña, tu sube arreglarte ya me ocupo yo de estos dos- la sonrió y camino hacia ella fundiendonos en un abrazo.

-Qué haría sin usted, muchas gracias- me suelto de su abrazo y subo las escaleras.

Cuando bajo los tiene a los niños metidos en el parque mientras ella recoge el desayuno.

-Sra Smith, me marcho, adiós pequeños- les doy un beso a cada uno mientras que los dos me echan los brazos para que los coja, se me parte el corazón -mama vendrá en seguida- la sra Smith entra en la sala con la ropita de mis bebés.

-Emily marchate ya, o llegarás tarde- tomo el portafolios y mi bolso, acercándome a la sra Smith para darla un beso que corresponde.

Salgo por la puerta y me quedo paralizada, enfrente de mi casa hay una limusina, como las que usa el estúpido de mi marido, es un barrio bastante humilde por lo que encontrar una limusina es motivo suficiente para ponerme nerviosa, camino hasta la calle donde se encuentra  mi coche e intento no mirar hacia la limusina, mis manos sudan y el corazón parece querer salir de mi pecho, abro la puerta, monto y al cerrar la puerta algo me lo impide, veo unos zapatos que el individuo llevaba y se ven carisimos y relucientes. Alzó  la vista encontrándome ala última persona que deseo ver.

-Marcos ¿que quieres?- me miraba con asco como si no le agradará mi aspecto lo más mínimo, tenia que pensar con la cabeza y evitar por todos los medios que se entere de que es papa, el me desprecio.

-Quiero el divorcio y ya que e tardado 2 años y medio en encontrarte no me ire sin el- vuelvo a intentar cerrar la puerta pero me lo impide de nuevo -vamos Emily, podrás ser libre y divertirte con tus amigos- él y su familia siempre me acusaron de que le era infiel y que sólo estaba con él por su dinero, -pon la cifra que quieras y te la dare- esto ya es el colmo, me levanto del asiento dispuesta abofetearlo pero cuando alzo la mano, me toma por la muñeca para impedirmelo.

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Hay va una foto del papa de los bebés, darme un vótito si os gusta lo que vais leyendo. podéis dejar comentarios con vuestra opinión..