Secreto.

Preguntas

Ya ha pasado 3 semanas desde que Greis conoció a heliot, desde ese dia, ella no a dejado de ir, desde muy temprano a la biblioteca, y Heliot siempre la observaba mientras ella leía, ella y Heliot se hicieron muy bueno amigos, aunque Greis nunca le contaba su pasado pero tenian una buena relación ya que Heliot tampoco hablaba sobre su pasado.

Heliot siempre fue amante de los libros, prefería leer antes que otra cosa, pero por alguna razon encontraba un raro deleite, en ver a Greis leer, con cada visita de Greis, le surgía una nueva pregunta sobre ella.

esa mañana Greis fue a la biblioteca, y como de costumbre, tomó un libro y se sentó a leer , heliot que se encontraba leyendo muy cómodamente sentado en una silla mientras posaba sus pies sobre un banco, bajo lentamente el libro y puso su mirada, sobre Greis.

-heliot,¿sabes?

-¿que?

-es incomodo, que me mires todo el tiempo.-dijo ella mientras dejaba de leer, y le miraba, con una leve sonrisa que delataba su intención de incomodarle.

-es imposible no hacerlo- dijo él después de poner sus pies en el piso y clavar su mirada sobre Greis.

-¿porque?no creo ser tan interesante.

-en estos últimos días, no dejo de preguntarme muchas cosas sobre ti, y esperaba que al observar atentamente, pudiera encontrar alguna respuesta.

-y, ¿has podido encontrar respuesta alguna?- preguntó ella, un poco preocupada de que Heliot no se hubiese podido descubrir el pasado de Greis, a través de su lenguaje corporal.

-no, solo me han nacido más preguntas- dijo él cruzando los brazos-sin duda tu eres un misterio.

-no te esfuerces mucho en descifrar misterio donde en realidad no los hay, yo no soy realmente nada interesante y mucho menos, misteriosa.

-¿de donde vienes? ¿y porque estas aquí? ¿porque eres una persona diferente a la impresión que das a primera vista? ¿porque aunque te ríes, tus ojos reflejan tristeza?¿porque siento que algún día te vas a esfumar en el aire? esas son algunas preguntas que me vienen a la mente cuando estás aquí.

-esas son preguntas, las cuales no tendrás respuesta tan solo con mirarme.

-entonces ¿tu me darás la respuesta, acaso?

-no, y no ganaras nada viéndome, así que puedes dejar de hacerlo- dijo ella, regresando la mirada al libro.

-así no tenga la respuestas a las preguntas, hay algo que sin duda me deleita cuando te veo leer, por eso no dejaré de hacerlo.-dijo el después de mas o menos 1 minuto de silencio.

-es eso, o ¿solo quieres fastidias? -dijo ella sin quitar la vista del libro, nunca pensó que la pequeña broma que le quería jugar a heliot, se viniera contra ella.

-¿quién sabe?-dijo el mientras tomaba otra vez la cómoda posición que tenia al principio, para así seguir mirándola, pero esta vez más con la intención de molestarla.

Greis siguió leyendo tranquilamente, y ignorar a Heliot, pero a este no le gusto ser ignorado, así que se sentó en el asiento que estaba justo al lado de ella y empezó a verla mientras apoyaba su barbilla sobre su mano.

Greis hizo el libro a un lado y haciéndose hacia donde heliot, lo agarró por los hombros, el reflejo que tuvo Heliot, fue deja la posición que tenía y echar para atrás, haciendo que las manos de Greis se deslizaron por su torso y cayeran en sus caderas, esta enseguida empezó a hacerle cosquillas haciendo que Heliot entrará en frenesí de risa.

-¿vas a dejar el fastidio?-dijo mientras aun le hacía cosquillas.

-¡PARA!, NO.. NO NO NO, -dijo Heliot entre risas.

Heliot llegó a un punto en el que no pudo soportar más y tomó a Greis como pudo por la cadera, y la alzó, como si fuera una pluma.

-ya, no más cosquillas, por favor.

-¿de donde saca tanta fuerza un bibliotecario?.

-sigo siendo un hombre- dijo el poniéndola en el suelo.

cuando se disponía a quitar la mano de las caderas de Greis, una persona entró a la biblioteca.