UNO MAS
Una extraña sombra brinco de la puerta de la nave sobre la cabeza de Tahan. Este comenzó a gritar y a moverse como loco, Frank habia desaparecido, y yo me encontraba perplejo. Pensé que era una emboscada. Estaba preparado para contratacar sabía que debíamos defendernos.
Una risa detuvo el alboroto. -No le caes bien. Dijo Iroan.
Frank apareció a mi lado. ¿No le caemos bien a quien, porque te ríes? ¿Qué es esa cosa?
Tahan seguía corriendo para todos lados, y golpeando su cabeza tratando de quitárselo.
-Es mi nueva amiga. Dijo Iroan.
-¿Amiga? ¿De dónde las sacaste? Piensas que esto es un juego no puedes andar recogiendo todo lo que vez por ahí sin saber si es bueno o malo. Respondí molesto por lo que había sucedido.
-Cálmate chico parece inofensivo. No ha hecho más que jalarle el cabello a nuestro nuevo amigo.
-Además no la recogí Jaack ella fue quien me despertó, salió de un viejo matero que estaba partido en la nave.
La doctora Amrivix. Vino a mi mente.
¿Sera posible? De que se trata todo esto. Pensé
-A ver chiquita ven, deja al grandulón en paz.
Tahan se encontraba en el piso llorando por no poder quitarse de la cara a el extraño ser. Cuando lo soltó, este salto a los brazos de Iroan.
Cuando la vimos era la cosa más tierna que jamás habíamos visto, sus ojos eran grandes y negros su cabeza redonda y pequeña, su pelo abundante y sin peinar, su color de piel era un tono de verde, y tenía una mirada pura y resplandeciente.
-Quítame ese demonio de encima que no se me acerque más. Dijo Tahan irritado por lo sucedido.
-Calma Tahan solo es un pequeño e indefenso Farell. (Una especie de flor mutante)
De un momento a otro brinco sobre mí y se aferró de mi espalda y hombros. Sacándole la lengua a Tahan.
Ahora si estamos completos pensé.
-¿Cómo se llama? Le pregunte a Iroan.
-Yo la llame flofi. Respondió
-Flofi es nombre de perro. Dijo Tahan - Deberían llamarla Siniestra cosa extraña come gente.
-¡Cállate!. Le reclamo Iroan. –¿Quien trajo a este sujeto?
- Iroan Tahan, Tahan Iroan. El ultimo guerrero que reclutaremos. Respondió Frank.
-La llamaremos Jhuli. Dije en voz alta.
Una explosión espantosa nos desestabilizo a todos. Mis oídos estaban completamente aturdidos, me comencé a levantar como pude. Jhuli se encontraba inconsciente, la sujete en mis brazos y la cubrí con mi chaqueta.
Nos atacan Jaack, nos están atacando, escuchaba sin poder ver nada.
Camine hacia la nave como pude, y deje a Jhuli en el asiento principal.
Ya comenzaba a ver mejor y a escuchar todo el ruido a mí alrededor. Pero no fue nada agradable lo que vi.
Un ejército de saibor nos estaba atacando, no sabíamos quienes eran ni que querían solo nos disparaban y atacaban sin discreción.
Tahan se encontraba frente a la nave, inclinado pisando fuerte con gesto de esfuerzo máximo en su cara, había materializado una barricada de talem que no permitía que los ataques dieran directo a la nave, Frank e Iroan se encontraban en pleno combate directo delante de la barricada, Frank aparecía y desaparecía a cada instante golpeando y atravesando saibors, Iroan resplandecía y con sus propias manos, los destrozaba.
Sube a la nave Jaack sácanos de aquí. Grito Tahan, los saibors eran incontables, estaba paralizado.
-¡Corre!. Escuche un grito aterrador. Y otra explosión nos lanzo de nuevo al piso.
Rápido me levanté como pude. Un silencio aterrador inundo el lugar. Los cuatro nos encontrábamos levantándonos frente a un robot inmenso y aterrador hecho con diferentes metales y con siete u ocho metros de altura.
-¡ENTREGUEN EL MAPA!. Escuchamos una voz aturdidora que salía de la máquina.
Todos me miraron esperando mi reacción.
- ¡ENTREGUEN EL MAPA!. Esta vez la voz fue a un más fuerte, Iroan y Frank taparon sus oídos.
-¿Que es lo que quieren grito Tahan? Acaso no saben que con los ojos cerrados la mano derecha a mi espalda y utilizando un solo pie puedo derrotarlos a todos.
Recordé todas las veces que había tratado de ser el valiente y lo mal que había salido. Así que saque el Cicrew de mi chaqueta y lo levante.
-¡Aquí esta!. Grite – Esto es lo que quieren.
-Guarda eso chico, lo necesitamos para encontrar a la oscuridad. Dijo Frank.
-Creo que la oscuridad nos encontró a nosotros. Respondí. Mirándolo a los ojos.
-No lo hagas Jaack. Repuso Iroan con una voz suave.
-Podemos luchar y salir de esto. Les dije. Pero no lucharemos por separados, sino como un equipo.
Una atmosfera de energía comenzó a sentirse dentro de nosotros.
-¡Corran!. ¡Corran por sus vidas!. Grite. Tirando el Cicrew a las extrañas maquinas asesinas y corriendo desesperadamente a la nave. ¡Corran!. ¡Corran!.
Frak sujeto a iroan y apareció dentro de la nave,
-¡Enciende los motores!. Frank. Grite.
El Cicrew dio un par de brincos en el piso y callo en los pies del gigantesco robot.
Este transformo su puño, en un rayo láser apunto al cicrew y disparo.
Un destello rojo salió del aparato haciéndonos entre cerrar los ojos, Tahan entro a la nave. Y arrancamos a la velocidad de la luz.
Iroan me estaba golpeando. –Cobarde ahora ya no sabremos a donde ir, porque hiciste eso podíamos haber luchado.
Vaya que has mejorado tus habilidades -Dijo Frank.
-El talem muchas veces no lo es todo, a veces el esfuerzo y la práctica superan nuestro límite.
Creo que fue la frase más corta que Tahan había dicho en toda su vida.
-De que están hablando. Gruño Iroan, -Perdimos el mapa.
-Calma Iroan – Aquí está sano y salvo.
-Pero ¿cómo? Yo vi cuando el sibor lo destruyo. Vi como exploto y un destello rojo salió de él.
-La energía del Cicrew pertenece a los guardianes, solo tal energía es de color azul. Jaack. Me había hecho señas, para hacer una jugada de cambio. Ellos querían la original, y no aceptarían una copia Jaack les dio lo que querían, y me dio tiempo de ver la forma y detallar el aparato, en el momento justo antes de que el láser saliera del cañón, hice el cambio. Pero requirió más talem de lo que creía, la velocidad el cambio, y la materialización me dejaron agotado, al momento del impacto, no pude proteger mi cuerpo y me quedaron estas quemaduras y creo que algunos huesos rotos. Pero sigo siendo el mejor. Dijo en todo arrogante. Me recuperare lo antes posible no se preocupen por mí. Esta vez, la velocidad le gano a la fuerza, he Iroan.
Un golpe en el estómago, tendió a Tahan en el piso de la nave. Iroan lo había golpeado en la barriga.
-Eso es por no haberme dicho nada. Dijo Iroan
-¿Que nadie aprecia aquí lo que uno hace? Gruño Tahan, casi llorando en el piso por el dolor.
-No seas niña Paliducho, que te golpeo fue una mujer. Respondió Frank.
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el regreso de los heroes
Science Fiction¡Por favor! ¡Por favor! No lo hagan; es mi hijo, no pueden quitármelo. Gritaba la pobre mujer mientras la golpeaban y tiraban al piso. Es mi hijo; gritaba desenfrenadamente desgarrando su garganta. El extraño ser miraba fijamente al niño con los rar...