Depression

☹ Cinco ☹

- ¿Y qué se supone qué hagamos? -gritó Ryan en dirección a David.

- ¡Hablen! -nos gritó de vuelta. Aunque no sabía por qué gritaban, estabámos en la misma sala, esquinas contrarias.

Todos estábamos sentados en el suelo, Hayley se encontraba a mi derecha, Hannah a mi izquierda, Sam a la izquierda de Hannah, y Ryan a la izquierda de Sam.

Ryan volteó a vernos.

- Bien, ya escucharon, tenemos que hablar -dijo Hayley rodando los ojos.Se formó un pequeño silencio, pero al poco rato empezamos a hablar fluidamente.

Me era un tanto díficil entablar conversación con alguien, pero lo estaba intentando.

Con quien más hablaba era con Hayley y Hannah, se habían vuelto algo así como mis amigas, no sabía todo acerca de ellas, pero podía seguir la platica que me hacían un poco más rápido. Con Sam y Ryan aún no podía hablar de muchas cosas, puesto que no los conocía muy bien aún.

- ¿Cuando es su cumpleaños? -preguntó Hannah de repente.

- ¿Qué? -preguntamos todos al mismo tiempo. Raro.
- Si, cuando es su cumpleaños -Hannah rió- Ya saben, es algo que las personas dicen cuando se están conociendo -entrecerró los ojos- creo.

- Diescisiete de septiembre -dijo Sam con una sonrisa.

- Ya pasó -Sam asintió- ¡Feliz cumpleaños! -dijo Hannah sonriente.

- Hannah, fue hace como dos meses -Hayley y Ryan rieron, yo sólo sonreí.

- Más vale tarde que nunca -guiño un ojo- ¿Cuando es el tuyo Hayley?

- Seis de Julio -dijo aún con una pequeña risa.

- Espero salgas de aquí antes de eso -dije en un murmuro. Ella me miró y sonrió.

- Me gusta estar aquí, es mejor que mi casa -dijo sin importancia.

- Bueno, bueno -interrumpió Hannah- ¿el tuyo Jared? -todos me miraron.

- Tres de marzo -dije y sonreí. Los demás asintieron.

- ¿Ryan?

- Veintisiete de mayo -contestó. Todos asentimos, y el silencio se formó de nuevo.

Suspiré y abrí la boca.

- ¿Cuando es el tuyo, Hannah? -no me gustaba iniciar conversación, pero tampoco iba a dejarla fuera.

- No lo sé -se encogió de hombros. La miré confundida-sólo sé el año, mil novecientos noventa y siete.

- ¿Cómo que no sabes el día? Debes de saber -dijo Hayley mirandola de la misma manera.

- No, en serio no lo sé -dijo tímida, sus mejillas se pusieron rojas.

- ¿Tu madre nunca te lo dijo? ¿Tu familia?

Hannah empezó a rascarse el lomo de la mano, dónde se encontraba una herida reciente.

- No, nunca me lo dijo -murmuró.

- Bueno, ¿cuál es tu número favorito? -pregunté, intentando que no se sintiera más incómoda con tantas preguntas.

- Veintitres -le brillaron los ojos de nuevo- Siempre ha sido mi número favorito.

- ¿Cuál es tu estación favorita del año, Hannah? -volví a preguntar, los demás me miraban un poco raro.

- ¿Qué estás haciendo? -preguntó Hayley en mi oído.

- Sólo espera un poco -contesté.

- ¡Otoño! -gritó Hannah después de pensarlo por varios minutos- Me gusta el frío, pero no tanto cómo el que hace en invierno -todos reímos.