Acosada Por Mi Vecino (Jimin&Tú) [lemon]

CAPÍTULO 10

A la mañana siguiente, comencé abriendo mis ojos lentamente, estirando mi cuerpo debido a lo de la noche anterior. Una sonrisa se apoderó de mis labios, recordando lo sucedido.
¿Pero qué?. Recién había caído en cuenta, de lo ocurrido anoche. Definitivamente había perdido la cabeza. Con todo lo que pasó ayer, no pude evitar lo inevitable. Y es que Jimin es tan, tan... No sé realmente cómo decirlo. Pero ya todas podéis entender. 
Estoy totalmente confundida. Jungkook aparece de la nada, y Jimin... Yo... Dios, no sé qué pensar ahora mismo.

¡Lo besé!.
¿Debido a qué fue?. Ni idea. No lograba recordar el motivo, por el cual le había besado. Es como si todo lo sucedido antes del momento, se hubiese esfumado, dando mayor importancia a lo que tuvimos. Y bueno, tampoco es como si quisiese darle muchas vueltas al asunto. Simplemente se borró de mi cabeza, por arte de magia. Lo único que sabía, es que había sido por un impulso mío. ¿Desde cuándo, es que me comportaba así?.

-____.- Oí una voz grave, nombrarme desde la planta de abajo.

Esperen... ¿Suga?.

-¿_____?.- Ahora se escuchaba un poco más de cerca. Seguramente estaba subiendo las escaleras, por los sonidos de las pisadas que daba.

Oh dios. Esto no podía ser mejor. Aún me encontraba bajo las sabanas vestida con una camiseta. Momento... ¿Estaba vestida?. Me levanté más que rápido de la cama, tomando ropa limpia de los primeros cajones.
No me permitiría que Suga entrara, y además se diera cuenta de lo que había hecho. No es como si me fuese a regañar o algo por el estilo, solo que no quería que él supiera. 

-Ya... Ya salgo. No entres, me cambiaré de ropa.- Logre decir, lanzándome a la puerta para poner el seguro.

- Está bien, estaré abajo.- Dicho esto, oí como se iba alejando.

Me quedé con la oreja pegada a la puerta, para asegurarme de que se alejaba. Menos mal no insistió en entrar, para comenzar a contarme unos de sus últimos chismes. Y es que no es nada nuevo, ya que siempre sale con que tiene algo para contarme. Por muy tontas que fuesen sus preguntas, no se guardaba ninguna. Eso es una de las cosas que más me gustan en él, ya que en constante ocasiones me saca sonrisas. Esa es una de las razones más importantes, por las cuales somos amigo. Le quería demasiado. Más que un amigo, era como un hermano mayor para mí... O también se comportaba como si fuese mi padre. 

(...)

Ya cambiada de ropa y haber ordenado toda la habitación, me volví al baño para ir a tirar la basura. Recordé que ahí fue donde jimin había votado el envoltorio. Por suerte no había señales de eso. Quizás lo habría votado en otro lado.
Miré que no me faltara, pero la presencia de una prenda roja bajo la cama había captado por completo mi atención. Al cogerla, me había dado cuenta que era la ropa interior de Jimin. Me sonrojé de inmediato, al darme cuenta que era su bóxer lo que se le había quedado. Seguramente se le olvidó, ya que con el desorden que quedó, le fue difícil encontrarla. Me giré de nuevo a mi cama, guardándolo debajo de la cabecera. Se lo devolvería cuando lo viera. Ya que todo estaba limpio y no me faltaba nada, me decidí por salir de mi habitación.

- ¿Suga?.- pregunté bajando las escaleras, de camino a la puerta principal.

- Aquí.- respondió asomando una mano desde la cocina.

Claro. Cómo no lo había supuesto. Suga siempre se dirige a la cocina, cada vez que viene.

- Te pondrás como una vaca, si sigues comiendo así. - Le molesté bromeando. A Suga le molesta cuando le hago ese tipo de comentarios, debido a que últimamente ha subido unos kilitos demás.

Sin esperar un comentario por parte de él, salí más que rápido de casa. Al momento en que ya había tirado todo, sentía que alguien me estaba observando sin darme cuenta. Un escalofrío recorrió toda mi espina dorsal, provocándome una sensación rara. Dirigí mi vista disimuladamente, para saber de qué se trataba. Cosa que fue inútil.