Hay Carlota,
Me gustaba mirarte y seguirte en silencio.
No era normal.
Pero tu tampoco lo eras.
Y yo tampoco lo era.
Pero tu pretendías ser alguien que no eras.
Y eso me lastimaba mas que los golpes de tus ¨amigos¨.
Solías mirar el vació durante largos lapsos de tiempo, me gustaba la idea de saber en que pensabas, y deseaba con todo lo que tenía que ese pensamiento vagamente fuese sobre mi, pero, tu no sabías de mi existencia y nadie mas lo sabia.