El Efecto Mariposa]Ziall&Larry

||Epílogo||

En estos 15 años de relación con Niall, las cosas habían salido perfectamente bien. Nuestras fans y las demás personas habian aceptado nuestra relación, los únicos que se oponían eran nuestros managers pero a nosotros eso no nos importaba.

Luego de unos cuantos meses de que nuestra relación se hiciera oficial, Louis dijo que el y Harry también estaban juntos. No se imaginan como se pusieron las Directioners. Sus dos "bromances" favoritos se hicieron realidad.

Definitivamente, esas épocas habían sido las mejores. Los mejores años de la banda, era un adolescente que estaba viviendo su sueño junto a sus cuatro mejores amigos, un chico enamorado que vivía los mejores momentos junto a su pareja. . Sin duda, mi adolescencia fue la mejor.

Me encontraba echado en mi cama, observando el techo de mi cuarto. Pensando en las buenas cosas que nos habían pasado a Niall y a mi. Hace 5 años, cuando Niall y yo teníamos 28, habíamos tomado la decisión de comprar una casa, de formar un hogar. Habíamos conversado con los chicos para comprar casas juntos, ellos gustosamente aceptaron nuestra propuesta.

Harry y Louis, al igual que nosotros, habían comprado una casa para vivir juntos. Liam llevaba una relación con Danielle pero todavía no formalizaban nada, por ende, solo compro una casa pequeña.

Cuando ya tuvimos nuestra casa arreglada, decidimos dar el segundo paso. Por varios meses, el único tema de conversación que tenia con Niall estaba relacionado con la adopción. Los dos queríamos adoptar a un niño, queríamos tener un bebe. Sabíamos que no seria fruto de nuestro amor pero lo trataríamos como si fuera nuestro propio hijo. Así que cuando Niall cumplió 30 años, le di una "pequeña" sorpresa.

-James-escuche gritar a mi novio-deja de moverte. No te puedo poner bien la corbata-le regañaba.

James, nuestro pequeño campeón. Llego a nuestro hogar cuando tenia 1 año. Niall y yo decidimos el nombre. Aunque no lo crean, el pequeño tenia mi color de ojos lo cual me parecía extraordinario y su cabello era de color rubio.

El niño era igual a nosotros, en diferentes aspectos. Dormía y comía como su padre Niall pero practicaba deportes como yo. Contaba chistes malos y paraba riendo todo el día. Era serio, cuando la ocasión lo ameritaba. En pocas palabras. . . Era un excelente y educado niño.

-James-nuevamente se escucharon los gritos de Niall-vuelve aquí-

Pude escuchar como unas pequeñas pisadas se acercaban al cuarto y como una cabellera rubia se asomaba por la puerta del cuarto.

-¿estas dormido, papi?-escuche a James susurrar.

-claro que no campeón. Ven aquí-sonreí.

El niño sonrió conmigo y se acerco corriendo. Se tumbo en la cama y se acurruco a mi costado. Coloco su pequeña cabeza en mi pecho y con sus finas manos, se puso a jugar con los botones de mi camisa. Como amaba a mi hijo. El era la alegría de nuestras vidas.

-¿que paso esta vez?-pregunte. James siempre venia hacia mi cuando Niall se molestaba con el.

-Papa se molesto-hizo un puchero el cual me hizo recordar a los que hacia Niall-papa me estaba ayudando a cambiarme para la fiesta de Harriet. Yo me movía mucho y. . .-

-James-entro Niall a la habitación interrumpiendo la conversación que estaba teniendo con mi hijo-así que te vienes a esconder en los brazos de tu padre. Y tu-me señalo con el dedo-haces muy mal en consentirlo-

El que ponía el orden en la casa, aunque no lo crean, era Niall. Yo me relajaba un poco mas, consentía más a James. Ese era uno de los motivos por el cual James era un poco engreído. Quería que mi hijo tuviera todo pero Niall siempre me decía que lo estaba malcriando.