Lo que tu corazón dicte ¤ Terminada

Cap. 41

Volví a bajar a planta baja, donde se encontraban todos. Jona se fue a su habitación, me dijo que si preguntaban por él les dijera que se sentía un poco descompuesto, pero en realidad era que no estaba de ánimo para estar entre tanta gente.

Fui a la sala donde había chicos jugando a la play. Ahí estaba, entre otros, Ema Insúa.

Insúa: - ¡Nena! - Me gritó al verme entrar - Vení que te tengo que hablar de algo a vos

Me acerqué a él, que estaba sentado en el apoya brazos del sillón donde estaban jugando a la play.

Yo: - ¿Qué me tenes que contar nene?

Pocho se había convertido en uno de mis amigos más cercanos del plantel, o al menos lo consideraba así. Siempre me trató con la mejor onda y a veces me habla como yo a él por WhatsApp. Me habla de las situaciones con su pareja y le doy consejos, yo le hablo un poco de como van las cosas con Fer. Por alguna razón confío en él.

I: - Veni, vamos más apartados

Nos fuimos a sentar junto a una ventana abierta, donde el ruido de la música era casi nulo. Nos sentamos en un sillón que estaba pegado a la ventada, mirándonos de frente.

Y: - Decime, a ver

I: - Bueno eh... Cómo empiezo... - Lo mire curiosa

Y: - ¿Con qué vas a salir ahora Pocho querido? - Él rió y después soltó

I: - Eh... Me voy... - Dejé de sonreír y lo mire pensando

Y: - Pero ¿qué me ibas a decir?- En realidad había entendido pero no quería hacerlo

I: - Me voy tonta - Me apretó la mejilla - Me voy del club...

Esa noticia me entristeció de una manera. Luego de formar una amistad, al fin otra amistad, él se va.

Y: - Pe, pero... ¿Por?

I: - Y ¿por qué va a ser? Me vendieron negra

Y: - Pe, pero ¿te vas así nomas? ¿No podes quedarte?

I: - El contrato se venció, era hasta el comienzo de temporada 2015, y eso es ahora. El club necesita la plata y me quiere el Udinese... Así que mi representante se encargo de todo y ya el mes que viene me voy creo - Me explicó serio - Te lo quería decir ya, así no te toma por sorpresa y tampoco te enojas conmigo - Sonrió y me tomó la mano

Y: - Pero... ¿Donde te irías?

I: - A Italia... - Baje la mirada - Pero voy a volver, obviamente nena - Sonreí y lo miré - Y vamos a seguir hablando mientras este allá y va a ser todo igual que ahora

Y: - ¿Y esos abrazos que me rompen la espalda quién me los va a dar? - Él rió

I: - Ya nos vamos a arreglar con eso... - Volví a bajar la mirada - ¿Estás bien?