Capítulo 6

53 1 0
                                    

También está Wallace, es robusto y de piel tostada, mide entre 1,67 y 1,69. Es muy inquieto y está perdidamente enamorado de Coti, que ni siguiera sabe que existe.

Coti va en mi grado, es alta y de buen físico, piel blanca y de ojos negros como la maldad de este mundo, cabello color miel y liso con unas bellísimas ondas al final. Es la más madura de mi grupo pero bastante simpática a decir verdad.

Al final de clases, me encontré con Martin nuevamente, y cuando nadie prestaba atención me decidí a preguntarle acerca de su verdadero número.

 – Oye, ¿por qué nos diste un número falso?

 – Porque no nos conocemos.

 – ¿Cómo que no? Tu eres Martin – le sonreí y el trató de esconder una pequeña sonrísa que se le escapaba.

Pasó un minuto y llego el bus, cuando ibamos subiendo repentinamente escucho que me dice al oído:

 – Solo cambia los dos últimos números por el 26 

 – OK – le respondí casi sin aliento, estuvo muy cerca de mi e hizo que me ruborizara.

Al bajar del bus le dije:

 – ¡Te hablaré de inmediato!

Fuí corriendo a  casa para buscar mi celular, prenderlo y poder  arreglar los números, y pues sí, efectivamente era él.

 – ¿Martin?

 – Si, hola – me respondió.

 – Así que no me mentiste esta vez

 – No ya no jajaja. A propósito, ¿cuál es tu nombre?

 – Vee... – respondí sin más preambulos.

 – Te agregaré a mi lista de contactos – dijo.

Qué satisfactorio. Él sí me dió su número. Que maravilla, que colosal.



 


El niño del busWhere stories live. Discover now