Bieber is Back

38} Together

Ante último capítulo

Dedicado a Isa24gutierrez. Gracias por el apoyo que le brindas a la novela en cada capítulo. ¡Aprecio mucho que te tomes la molestia de votar y comentar siempre! ¡Saludos!

Quité mi anonadada mirada de la puerta solo cuando Justin se acercó a la mesada.

-Viendo que la hospitalidad no es tampoco lo tuyo, voy a tomar asiento por mi mismo.

Bromeó con nerviosismo, sentándose frente a mi.

Por fin dirigí mi atención a él y en cuanto mis ojos hicieron contacto con los suyos, dejé que me absorbieran con la intensidad que irradiaban. Han pasado años y cosas, pero seguía siendo imposible que me resistiera a ellos.

-Hola.

Una exhalación se coló por mis labios junto a mi saludo, y sonreí.

Su expresión, que antes delataba inquietud, se iluminó con una aliviada sonrisa en respuesta a la mía.

-Hola, Chelle.

-¿Cómo estás?

En cuanto dije eso, me di cuenta que todavía estaba sosteniendo la silla, así que la solté y puse mis manos cruzadas sobre la mesa.

-Mi respuesta depende de la tuya ¿cómo estás tú?

Repuso.

-Excelente, gracias a Dios.

Contesté con sinceridad.

De inmediato su mueca de felicidad se ensanchó y mostró todos sus dientes en una radiante sonrisa.

-¡Gracias a Dios!

Dijo alegre.

Asentí con la cabeza.

-Entonces ¿qué hay de ti?

Volví a preguntar.

-Estoy bastante sorprendido, para ser sincero.

Confesó y empezó a relatar:

-Estaba en la fila por emitir el voto en estas elecciones presidenciales y Dave se posicionó a mi lado para hablarme. Fue raro.

-Él es raro en sí.

Afirmé.

-Y todavía no te lo conté todo. Me dijo: "Amigo, aquí tienes mis apuntes. Golpea mi puerta mañana al mediodía y di que los he olvidado en la biblioteca" ni siquiera sé que pretendía pero supuse que tú estarías aquí y... bueno, quería verte.

Explicó.

Solté una vaga exclamación y nos quedamos callados. El silencio nos rodeaba mientras Justin me observaba y yo fingía estar concentrada en una taza vacía. Yo no sabía que decir, no estaba segura ni siquiera de cómo me sentía con respecto a tenerlo cerca mio después de todo.

-También me dijo...

Empezó a decir dubitativo.

Volví a mirarlo y al parecer eso lo animó a continuar hablando:

-También me dijo que... él no sabe con certeza si yo soy perjudicial o no, pero está seguro de que estoy enamorado, y que nada malo puede venir del amor real.

-Eso es cierto, pero no sé a que punto pretendía llegar.

Concordé con sus agradables palabras, pero me mantuve cautelosa.

-Yo tampoco entiendo su punto, pero puedo decirte el mio...

Ofreció.

-Quiero escucharlo.

Lo alenté.

Lo siguiente que dijo lo hizo con la ligereza que tomaba cada vez que me decía algo tierno. Él simplemente lo soltaba, dándome la única pista que necesitaba para estar segura de su sinceridad.

-Me has sonreído después de haber llorado por mi, y sé que recuerdas con mas intensidad cada beso que todas las peleas ¿sientes esto?

Tomó mis manos entre las suyas, provocando un estallido de electricidad que se extendió por todo mi brazo.

-Al final del día, esto es lo que cuenta para nosotros. Siempre.

Culminó.

Varias emociones enlazaron un nudo en mi garganta y tuve que tragar saliva para desatarlo.

-De verdad creo que tú y yo estamos destinados a estar juntos.

Me reí débilmente y proseguí:

-Pero no como pareja.

Él se llevó mi mano izquierda a sus labios y besó mis nudillos.

-Posiblemente tengas razón. Quizás nunca seamos novios porque no estamos hechos para eso, pero permanecer juntos es nuestra única opción.

Determinó.

Suspiré con fuerza, exhalando toda carga emocional, y sonreí con sinceridad.

-¿Amigos?

Indagué, dando un apretón a nuestras manos que aun estaban cerca de su boca.

-Amigos.

Confirmó, devolviéndome el gesto.

-Entonces... es genial que tenga tatuado el nombre de mi amiga cerca de mi ingle.

Bromeó.

Yo carcajeé con ganas y, solo cuando me calmé, logré articular:

-¿Sabes qué fue lo primero que pensé cuando vi ese tatuaje? O bueno, lo segundo. O lo tercero. No lo sé, solo lo pensé.

Él sonrió con diversión.

-¿Qué?

-William Shakespeare escribió: "Conservar algo que me ayude a recordarte sería admitir que te puedo olvidar".

Cité.

-No lo hice para recordarte a ti, lo hice para recordarme a mi.

Rió.

Lo miré confundida.

-¿Recordarte qué?

Interrogué.

-Que el amor es posible....

Últimos dos capítulos....

Bieber is Back - Tatiana Romina