Eterno dolor.

Capítulo 11

"lo mejor de esperar tanto para verte es encontrar de nuevo tú sonrísa"

Desperté en la cama de siempre mi cabeza me dolia mucho y tenia bastante frio apesar de estar con todas las cobijas encima, me senté rapido en mi cama, los recuerdos de la noche anterior invadieron mi mente:

[El salir en la noche, la concha, la pulsera, mi hermano, el abrazo]

Revisé mi brazo solo para darme cuenta de que ahi seguía la pulsera, me levanté de la cama, aún confunsa sin saber si en verdad todo eso había pasado o no.

Voltee a ver a la mesa que se encontraba al lado de mí cama y ahí estaba la caja sin la tapa, que guardaba aún la concha rosa, sin entender aún lo sucedido fui directo al ropero, elegí una falda escolar blanca con azul, que acompañe con una larga playera blanca, luego me diriji al baño, donde me quite la ropa y me di un baño bastante rápido con agua caliente, cada vez que caía una gota a mi cuerpo las marcas de lo que soy se dejaban ver mucho más que en cualquier momento, una maraca más estaba ahora en mi cuerpo, por primera vez había sido sin que yo la provocara, entonces todo comenzó a parecer real, ( la noche, la caminata, el chico, el empujon, el abrazo, mi hermano, queriendo no ver eso, decidi salir del baño, donde me puse la ropa junto con la chamarra azul que tenía puesta.

Continuaba totalmente confundida, aún con un poco de sed, decidí olvidar por un momento las cosaa y bajar a la cocina, todo parecia bastante normal, todo callado, justo en el lugar que le había asignado, llegué a la cocina tome un jugo de los que vienen en caja, le puse el soporte y comencé a bebermelo, de la nada un ruido provenía de la sala, no sabia que hacer, creí que algo se había caido por lo que me dirigi hacia haya.

Cuando llegué estaba alguien en el sillón por lo.visto aún durmiendo; mi hermano, no pude evitar expresar una enorme sonrisa de saber que todo habia sido real, el estaba aqui de nuevo, conmigo, después de tanto tiempo separado. Rodee el sillón hasta ponerme en frente de él, deje mi jugo en la mesita, donde me lancé a mi hermano

-Auch, pesas bastante!!, me lastimas!- a pesar de que su rostro siempre suele ser inexpresivo esta vez se notaba bastante alegre

-No me importa, no me quítaré- todo era perfecto, el estaba devuelta, estabamos juntós después de tanto tiempo, en el sillón donde miles de veces nos desvelamos viendo caricaturas al ser pequeños, ahora seguiamos allí, con mi rostro acostado en su calido pecho, mientras, mis brazos no hacian nada más que abrazar su cintura tan pequeña..

Todo iba bien, hasta que los pensamientos volvieron, arruinando la hermosa mañana:

"El no te quiere... Te abandono, se volverá a ir... Ya no le importas.. Para el no eres nadie... Nadie!!!"

Era doloroso pero era cierto, mi mente tenía razón, yo no le importaba, además no sabía si el se planeaba quedar ó si se iria y me dejaría aqui..

-Tonto, te iras de nuevo y eso me lastimará más de lo que ya ha hecho en todos estos años- las lágrimas inundaban mi rostro y un poco su pecho, pero esto no duró mucho, pues la tristeza desaparecio y solo quedo la furia hacia el.

Esos sentímientos me destrozaban la mente mientras uno por uno, se encaragaba de apuñalar mi corazón, el sentimiento de cortarme y acabar con todo invadía mi ser, entonces mi felicidad, mi sonrisa, todo se esfumó..
Mi cuerpo se volvio duro, hasta que reaccione y decidí rodarme para caer en el suelo de un modo no tan doloroso y encaminarme a mi cuarto.

- Oye, Angie, espera- las palabras de mi hermano, se quedaban en el aire, que importaba en este momento, que estuviera diciendo, al final se acabria llendo, me dejaría de nuevo.

La furia era el único, sentimiento que me ayuda a subir escalón tras escalón, aúnque la nostalgia hacia que el camino pareciera eterno y solo deseara volver a sus brazos y no separarme de el jamás, pero No!, debia ser fuerte, aunque no sabía como.

-ESPERA!-, sus gritos se oian en toda la casa, por primera vez sus gritos hacia mi no demostraban más que enojo.

Estaba a punto de llegar al último escalón pero algo, por no decir alguien me detuvo y me giró..
Para mi sorpresa, el estaba en el escalón atrás de mi, nuestros rostros estaban tan cerca, su mano tenía la mia con tanta fuerza y a la vez con tanto...amor?

El momento era bastante raro, mi mente estaba más que confundida, me encontraba furiosa porque me hiba abandonado por mucho tiempo, pero estaba feliz de que estuviera de nuevo a mi lado.
Su rostro se veía tan agotado, sus ojos mostraban tanto amor, que al verlos directamente, podía pensar que todo este tiempo el estuvo pendiente de mi aunque yo no lo supiera. MI furia había desaparecido por completo en pocos instante, los malos pensamientos igual, mi corazón no hacía nada más que latir como loco, (de segura estaba roja), en ese momento solo pensaba en besarlo, aunque tenía claro que era mi hermano, para evitar que el pensará lo mismo ó que yo hiciera una tonteria, diriji mi mirada al suelo todo el tiempo que el hablaba.

-Te debo muchas explicaciones, lo se, y te daré todas las que quieras...-, el hizo una pausa, me soltó el brazo para lograr mover mi cabeza para que yo viera a los ojos, pero no podía, el se empeño en que lo viera y una vez logrado continuo. -.... Lo siento...Angie, se que fué muy malo el alejarme pero ño hice por tu bien, se que debí volver pero... Creí qu me odiarias asi que quise evitarlo....- su mirada había perdido ese brillo, se notaba en realidad preocupado y arrepentido a la vez, había agachado su mirada al suelo, aunque su vod parecia un susurro logre entender a la perfección lo que estaba diciendo:

-Lo siento...pero, debo irme ahora, esta vez será para síempre, al menos me doy cuenta que eres fuerte y lograras salir adelante sola, te quiero... Nunca quise acerte daño, cuídate, quiero que a pesar de todo, sigas tu vida y logres ser felíz con quien tú desees...-

mi corazón se había destrozado con sus palabras; "esta vez sera para siempre",
No me dio tiempo de decir palabra alguna, dicho eso, él se dio la media vuelta y se fué de la casa.. De nuevo me encontraba sola, aunque ahora era distinto; sin poder contener las lágrimas cai al suelo donde en el penúltimo escalón me quedé por horas, esperando a que el regresara a sanar la herida en mi corazón....

****

La tristeza era el único sentímiento que siempre había estado a mi lado, y ahora más que nunca desearía que ella no estuviera conmigo...

Despues de todo, aúnque el se alejó de mi vida durante mucho tiempo, no estaba dispuesta a ya no verlo más;
El sentimiento de vacio que estaba en mi sólo lograba destruir mi corazón en cada segundo que pasaba mientras lamentaba su partida, derramando millones de lágrimas por él..

Tal vez habían pasado horas ó tal vez solo habían sido segundos, no estaba segura, mi vista estaba nublada a causa de tantas lágrimas, las seque con las mangas de la chamarra azul que antes era de mi hermano y ahora llevaba puesta, luego de eso, sin tener claro lo que deseaba me diriji a la puerta principal, aún pensando que si salía encontraria a mi hermano de nuevo y lo haria cambiar de opinión, pero al momento de abrir la puerta, algo chocó con cara, era obvio que era una persona, mi mente decía que no era más que mi hermano pero al retroceder un poco y papadear varias veces no era más que la vieja amiga de mi mamá...

"Misaki.."