Amor Prohibido [Mericcup]

Capítulo 2: Niñez

—Narración Normal—

En Berk

Quiero aclarar que en esta historia, los dragones desde siempre estuvieron unidos a los vikingos y la madre de Hiccup (Valka) nunca se perdió. 

Un niño de ojos verdes, cabello castaño que tenía unas pequeñas pecas en el rostro. El pequeño solo tenía ocho años al igual la primogénita de Escocia, tenía una mirada triste y sin esperanza ya que veía desde la ventana de su palacio como Vikingos, mataban a los escoceses, había sangre, mucha sangre derramada en el suelo, el pequeño solo acariciaba a su pequeño dragón Chimuelo, quien era un pequeño Furia Nocturna, una lágrima recorrió el rostro del pequeño al ver como su padre lastimaba gente, y la gente lo hería a él.

—Hicc, hijo ven —dijo Valka, su madre con una voz dulce mientras veía al niño quien lloraba al ver tanta matanza, el niño ignoraba a su madre y abrazaba con fuerza al dragón que era igual de pequeño que él, su madre se acercó al pequeño Hiccup y lo abrazó por lo cual el niño correspondió el abrazo y lloró más fuerte aún— No llores mi pequeño, no pasa nada...

—O-odio a los e-escoceses —dijo Hiccup llorando y acurrucándose con su madre, quien solo acariciaba el cabello del niño 

—Ni ardiente sol, ni tempestad, Jamás... —su madre cantó mientras mecía al niño

—Podrás dejar, prométeme tu corazón y amar — el niño le siguió el  canto a su madre

—Eso hijo tranquilo no pasa nada... papá está combatiendo con la gente mala, que hace daño ¿si amor? es para protegernos 

—Si lo se pero ¿Por qué los odiamos? —dijo Hiccup viendo a los ojos a su madre

—Porque... mm ellos nos han hecho mucho daño amor, nunca debes juntarte con un escocés te hará mucho daño cariño —dijo su madre viéndolo a los ojos

—Si mamá

—Nunca lo olvides Hicc

—Nunca lo haré...

Mientras en Escocia
Una niña pelirroja estaba viendo la puerta principal de su castillo, esperando a alguna señal de llegada de su padre, quien había ido a una "guerra" por así decirlo, ella tenía en sus manos un arco de flecha el cual le pesaba porque era más grande que ella, se había sentado en el suelo y solo veía fijamente a la puerta principal, su madre quien estaba recorriendo el castillo la vio así, se acercó a la pequeña Mérida y bajó a su nivel

—¿Qué haces aquí Mérida? y con armas

—Q-quiero a p-papá lo e-extraño —dijo abrazando a su mamá quien le correspondió el abrazo

—Papá está bien... no le pasa nada

—La otra vez vino herido el estómago, ¿Cómo quieres que no esté así? —la niña dijo eso, era pequeña pero sabía por lo que pasaba su padre

—Si lo sé... pero la seguridad aumentó y él estará mejor —dijo su madre acariciando el alborotado cabello de su hija y besó su frente

—¿Esto es culpa de los vikingos? —preguntó Mérida

—Si cariño, todo es su culpa, ellos son malos y quieren hacernos daño, solo piensan en ellos. Si ves a alguien con armadura y cascos toscos son vikingos y te debes alejar de ellos

—Si mami siempre lo haré, jamás me acercaré a ellos —dijo acomodando su arco

—Así me gusta amorcito, papá va a venir estando bien si mi linda princesa —dijo su madre con dulzura y le dedicó una sonrisa— Ahora vamos a comer pie de manzana que preparé

—¡Si! amo tu pie de manzana mamá 

—Si ya vamos pero deja el arco

—Esta bien mami —dijo y dejó el arco en la entrada de la puerta

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Hola! ando muuuuy inspirada por eso el capítulo así he estado publicando normalmente mi cerebro está seco sin ideas pero ahora nu es muy milagro bueno hasta que dure.

Espero que les haya gustado, no olvides regalarme una estrellita y comentario diciendo como te pareció que eso me anima a seguir escribiendo y bueno y saben que 

LOS AMOOOOOOOOOO!!!