MI FINAL PARA ALLEGIANT

Capitulo 55

TOBIAS

Me despierto, tengo tantas esperanzas hoy, estoy lleno de fe. Y miro el reloj, son las siete.

No sé cómo lo he logrado pero he dormido bien. Voy a tomar una ducha, luego me visto y desayuno para estar enfrente de la habitación de tris a las 7:55 de la mañana. Ayer acordé con los demás que yo entraría primero, mientras Cristina pasa con Uríah y luego ella viene a relevarme, después vendrán los demás en el horario indicado.

La enfermera me sonríe y me permite entrar unos minutos antes de las 8:00 de la mañana, creo que le caigo bien.

Vuelvo a encontrarla, igual que como le dejé ayer.

Le beso en la frente y luego le tomo la mano.

- Hola Tris! - comienzo a hablar - te tengo buenas noticias: Uriah despertó ayer. No lo podíamos creer pero esta igual que siempre. Busca que enfermeras guapas lo atiendan y aprovecha toda la atención que tiene en este momento pero...

Me detengo, creo que Tris acaba de presionar mi mano, trago saliva y la vuelvo a ver.

- Tris? - pregunto - me estás escuchando??

Sus ojos azules se encuentran con los míos. Tris ha abierto los ojos, me está mirando.

Creo que quiere decir algo pero las mangueras que tiene se lo impiden. Trata de tomar la mano que tengo aprisionada con la mía para llevársela a la boca, veo sus ojos asustados.

- Espera - le digo- voy a llamar a la enfermera para que te lo quite, no te lo quites tu - no me lo puedo creer, de verdad es ella?!! - te amo - me permito decir y veo que su mirada se dulcifica.

Salgo corriendo de la habitación y llamo a la enfermera.
Ella llama al medico antes de entrar a la habitación y me dice que espere afuera, van a quitar las mangueras.

Esto en verdad está pasando, es ella, ha vuelto, yo sabía que regresaría, ella es muy valiente, pero no puedo contener la alegría que tengo.

La enfermera sale al cabo de unos minutos que me han parecido una eternidad y me indica que entre con sonrisa cómplice.
Entro y el médico está comprobando los ojos de Tris con una especia de foco. Cuando notan el movimiento ambos vuelven su mirada hacia mí y Tris me sonríe, esa sonrisa que tanto amo.

Me acerco a su lado, le tomo la mano y le doy un suave beso en su frente.

El médico empieza a hablar:
- Muy buen Tris. Todo parece estar en orden, sin embargo hoy tienes que pasar aquí con exámenes. En la noche tal vez te puedas ir a descansar a tu habitación.

Tris asiente con una sonrisa y después dirige su mirada hacia mí.

El médico ahora empieza a hablarme a mí:
- No puede salir de aquí bajo ningún motivo el día de hoy - yo asiento con la cabeza- vendrán a hacerle análisis y llevarla a hacerle exámenes en cualquier momento. Si no está y ellos vienen por ella, más tardaré en darle de alta.

Ambos asentimos con la cabeza:
- Ahora - dice el médico - se que tienes muchos amigos Tris - ella sonríe - así que todos podrán hacerte compañía pero en distintas horas y no juntos. Estamos claros?
- Si - responde Tris con la voz un poco áspera y cortada.
- Ahora voy a decirle a Maritsa que te traiga agua porque sé que debes de estar sedienta y los calmantes porque ese dolor que debes sentir ahora mismo está controlado, pero si sales de los mismos, te dolerá mucho, por el momento debes manejarte en sillas de ruedas para que tu herida de abdomen no se abra - luego el médico sonríe - nos estaremos viendo Tris. Los dejo solos.