Capitulo 8.

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Liberty.
-¿Cuanto tiempo queda?- pregunta Wes y miro mi reloj de mano. 11:43 am.
-Vaya.- digo. -Sólo quedan 17 minutos.-
-Pero falta poco. Muy poco.- dice Joel.
-Aun asi, hay que apresurar el paso.- dice Wes y comenzamos a correr. Correr. Correr.
Después de varios minutos de correr por entre los pies de los árboles, vemos a un par de metros las enormes rejas de la siguiente sección. Las puertas a nuestra libertad.
Corremos.
Corremos.
Corremos.
Un engrane suena. Corremos y siento algo clavarse en mi pierna.
Volteo abajo, y encuentro un dardo encajado en mi pierna. Otro dardo sale volando justo al brazo de Wes, otro en la palma de Joel y otro mas se encaja en mi otra pierna.
-Demonios.- grita Wes. -Mi brazo... no lo puedo mover.-
-AGH.- grita mi hermano. -Mi mano.-
Siento como si le arrancaran todos los nervios a mis dos piernas, y ambas se entumecen. No puedo moverlas ni poco. Se me doblan. Caigo de rodillas al suelo.
En el cielo sale un "5:00".
-Parate Liv, solo tenemos 5 minutos.- dice Wes.
-No puedo moverme.- digo, llorando, mas que por el dolor por la frustración de estar tan cerca de la salida, pero a la vez tan lejos. 
-Carguemosla.- dice Wes.
-Vamos... 1... 2... 3...- cuenta Joel y entre los dos me cargan. Miro hacia el cielo
"4:00"
-Demonios.- dice Wes y cae con una piedra, haciendo que Joel y yo caigamos.
-Corre.- grita Joel. -Ya casi.-
-No vamos a llegar.- dice Wes, dándose por vencido. Y una idea pasa por mi mente.
Sin dudarlo, saco el cuchillo de mi cinturón y pongo la punta en mi pecho.
-Rapido, váyanse.- digo, entre lagrimas.
-¿Que? ¿Que demonios?- pregunta Wes, confundido.
-Váyanse o juro que me mato.- digo. Sin pensarlo dos veces empiezo a apretar el cuchillo contra mi pecho.
-NO.- grita Joel entre lagrimas.
-Váyanse ya.-
El cielo dice: "1:30"
-Maldita enana.- dice Joel y me da un verdadero abrazo. Se va corriendo.
-No lo hare.- dice Wes y yo solo aprieto más el cuchillo. Wes, entiende que estoy haciendo esto por ti y mi hermano y vete. Por amor de Dios.
-Vete ahora.- le grito. El sólo se acerca a mi y me da un beso.
Un verdadero beso. Un beso de amor. Un beso que hace que de mi salgan chispas de amor.
El mejor beso.
Me mira a los ojos, y se va. Se va entre las hojas de los árboles. Una voz suena.
-Las puertas se cerrarán en 10. 9. 8. 7. 6. 5. 4. 3. 2. 1.-
Escucho como las puertas se cierran. Estoy sola, con las piernas aun entumecidas. Estoy sola en esto.
Me quedo asi unos segundos, cuando Wes sale de entre los árboles.
Me hecho a llorar en su abrazo. 
-¿En verdad creías que te iba a dejar sola?- me pregunta entre lagrimas.
-Te amo.- digo, llorando.
-Joel pidio disculpas, el si entro- me dice y yo me relajo por saber que mi hermano esta a salvo.
-De acuerdo.-
-Liv, ahora que estamos solos en esto por mínimo un año... ¿Que vamos a hacer?- me pregunta y varias imagenes pasan por mi mente.
Casas de campaña, una casa de madera, un plan, mapas, Ronan, Galia....
Libertad.
Lo unico que digo es:
-¿Recuerdas ese plan para ser libres?-


Hola a todos mis lectores, aunque sean poquitos  ;-;
Solo quiero decir dos cosas:
1) Gracias por sus votos y comentarios, en verdad, me hacen tener ganas de seguir escribiendo.
2) La historia estara en una pausa temporal, pues dara un giro de 360°. Las cosas cambiarán. La historia dejará de centrarse en las trampas y comenzará a centrarse en el plan. La pausa será de un par de semanas para poder ir acomodando las ideas y que la historia este mas interesante, pero si veo que mucha gente la pide de vuelta tal vez me pueda apresurar.
En verdad, díganme que les parece la historia ¿que cambiarían, que quitarían, que aumentarían, que les gustaría leer? En verdad, quiero saber su opinion.
Si les gusta mi historia no duden en compartirla con sus amigos. Gracias por todo.
Nos leemos luego.
+David Reyes.

Liberty #OreoAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora