Cartas De Muerte (TMR)

"Recuerdos"

Desperté de golpe, agitado, con lágrimas en los ojos, estaba llorando a más no poder, desde su partida que no lo hacía.

-¡Thomas! ¿Qué te pasa, estás bien? Dime.-Exclamó Brenda entrando a mi habitación. No le di caso, no podía hablar, el llanto no me lo permitía. Respiré profundo tratando de calmarme. «"Es solo un sueño"» dije para mis adentros.

Y lo era, pero pensar en él me hacía sentir culpable, triste, y un ser humano despreciable.

Sentí como la mano de Brenda recorría mi espalda, tratando de reconfortarme. Al fin me calmé y oí su voz.

-¿Una pesadilla? -Dijo con un tono tranquilizante.

-Algo así. - En realidad, había sido peor, mil veces peor, pues mi verdadera pesadilla comenzaba cuando despertaba, al notar que ya no estaban a mi lado; Newt, Chuck, Teresa... Ninguno de ellos.
Una voz interrumpió mis pensamientos.

-¿Perdón?- pregunté, ya que no había escuchado sus palabras.

-Ella, fue alguien muy buena.- Opino la castaña, mientras se levantaba de la cama.

-Sí, ¿Quién?- Imité su acto, me levanté de la cama y froté mi cara con mis manos.

-Teresa.

Tardé en contestar, nunca pensé que Brenda fuera a decir eso.

-Si, eso creo, digo, pasó por mucho. Ella recordó, su familia, el mundo antes del Laberinto. No debió ser fácil. Ella tomo sus decisiones y quizá lo hizo por amor, no lo sé. Pero si sé, que ella me salvó la vida, y siempre se lo agradeceré. -Dejé caer una lágrima. Pensar en ella siempre me entristecía, nadie jamás en su corta vida pudo entenderla. -Siempre

-Igual yo. -Empezó a caminar hacia la salida, pero se detuvo -¿Sabes? Era diferente a todos. Nadie pudo comprenderla.

Dicho esto Brenda salio de mi habitación a paso firme.

-Lo sé. - Dije en un susurro. - Lo sé.

Mi estómago estaba vacío, rugia como un animal hambriento. Un olor a huevos y tocino inundó mis fosas nasales. Fui a la cocina, y no pude evitar recordar aquellos días en el Área, cuando acompañado de Chuck robabamos bocadillos, pero algo era diferente; Chuck no estaba más.
Al llegar a la cocina vi a Sartén y unos chicos más, cocinando una gran cantidad de comida, después de todo tenían que alimentar a una multitud.

Esto funciona así, hay 6 sectores, en cada sector hay 3 encargados, que se ocupan de supervisar que todos hagan su trabajo, desde los Cocineros hasta los constructores. Por cada sector hay 20 cocineros, 20 Cazadores, 20 constructores,
25 doctores, etc. Cada quien tiene una función, Minho, Brenda y yo somos los encargados del sector #1, Gally, Jorge y Sonia son los del sector #2, Aris, Harriet y Jeff son los del sector #3 y así mismo, con los otros sectores.

Desayuné en silencio, no podía dejar de pensar en mi sueño ¿Que significará? Bueno, después de todo solo es un sueño. Minho se me acercó, con una bandeja de comida entre los brazos.

-Brenda me contó que tuviste un mal sueño - Dijo el asiático - ¿Puedes contarme de qué trataba?

Mi corazón dejo de palpitar. Si le contaba mi sueño, tendría que contarle lo sucedido en la ciudadela, aún no estaba listo para hacerlo. Tuve que pensar rápido una mentira.

-Soñé...Soñe que... Minho, yo asesiné a Newt -Dije secamente. No podía creer lo que acababa de decir, lo dije, le dije que maté a nuestro hermano. Vi como su cara de sincera alegría se tornaba confusa y melancólica. Pensé en lo mucho que me odiaría y en como se lo tomaría. ¿Minho comprenderá que no tenía opción?-.

-¿Soñaste que mataste a Newt? - Preguntó confundido.

-No es lo que quise decir. - Una gota de sudor cayó sobre mi frente, no sabía cómo enfrentar algo así. - ¡Sí, exactamente eso! - Mentí, de nuevo. Ya era una costumbre.

-Shank, no fue nuestra culpa. Quisimos rescatarlo ¿Recuerdas? Él eligió quedarse, una decisión claramente estúpida y dolorosa, pero suya. -Minho dio paso a un par de lágrimas, lo que me hizo sentir culpable-.

Ninguno dijo una sola palabra. Comimos en completo silencio.

Cuando Minho término de desayunar, se retiró a hacer sus deberes en el sector. Yo también tenía muchas cosas que hacer y dejarlas no era una opción. Al terminar mi desayuno, que consistía en un par de huevos, una fruta desconocida, y un vaso de leche, me dirigí a las siembras para verificar como iban los cultivos.

Elotes, lechuga, espinaca, tomates, bananas, fresas, peras, y todos recién cultivados, eran los vegetales y frutas que se podían observar en el sector #1. Cada sector tenia vegetales propios de su área. Cuando un sector necesitaba vegetales de un sector vecino, hacían un "trueque" para obtenerlos.

Inhale el aire fresco y olor campo. Un olor muy agradable. Vi la tierra pintada de los colores de los vegetales, una gran parte de pasto verde sin cultivar y una frondosidad de arboleda en el fondo. Divisé a Ensel, uno de los agricultores, en una parte del campo verde. Me dirigí hacía él.

-¿Qué hay, larcho?-Grité alzando la mano, en señal de saludo.

-¡Aún no entiendo esas palabra extrañas, Thomas!-Exclamó Ensel.
No pude evitar reír, eso me hacia recordar mis primeros días en el Área, cuando todas esas palabras eran extrañas para mi; Shuck, Larchos, Plopus, Shank, Garlopo, Mierteros, y ahora, ahora son parte de mi idioma, de mí, de lo que soy.

Me acerque a Ensel, para ya no tener que gritar, no quería que mañana me doliera la garganta.

- Ya te acostumbrarás - Dije dándole palmadas en la espalda.-¿Ahora dime, cómo van los cultivos?

-Todo bien- dijo orgulloso- El sector #2 nos pidió un trueque, lo realizaremos mañana por la mañana, por lo que necesitamos que un encargado este ahí.

-Veré quién esta libre y te avisaré, Ensel.

Ensel era un muchacho muy alegre, pero a veces misterioso, luego de hacer sus deberes siempre desaparecía. Un día Gally y yo tratamos de seguirlo, pero él fue más rápido y se nos hizo imposible. Tenía el pelo castaño y los ojos verdes, tez blanca y estatura promedio.

Voltee la vista y observé el bosque frondoso y no pude evitar adentrarme en él. Ese olor a tierra mojada inundaba mis fosas nasales. Me recosté en un árbol y cerré los ojos. Primero despacio y después de golpe, conseguí el sueño.

Estaba en el Área, durmiendo en el bosque.
Lo recuerdo, pensé, solía dormir aquí.

Un chico se me aproximó, rubio, alto, delgado pero fornido.
«Newt»

De alguna manera estaba dormido, pero podía ver lo que pasaba. Es como si mi cuerpo estuviera ahí y yo fuera un fantasma al que no pueden ver.

Newt se quedó parado observándome, balbuceo algo pero solo logre escuchar "Despierta, léelas... " no llegue a escuchar lo demás. Luego aquel chico, que asesiné, me tapó con una manta y se marchó.

Una voz empezó a resonar en mi cabeza
"¡Despierta! ¡Thomas! ¡En el suelo!"

Abrí los ojos, ya era de noche. Había dormido unas cuantas horas.

Estaba exaltado, con la respiración agitada. Me levanté y mi instinto me dijo que siguiera adentrándome en el bosque. Obedecí a mi instinto y seguí.
Cada vez se hacía más oscuro, pensé en irme, pero algo me hacia seguir. Llegue a un río y algo me dijo que me detuviera, lo hice. Mire a los lados y no pude evitar fijarme en el suelo, tal y como había dicho la voz en mi cabeza. Había una carta. Sentí como que todo esto era un déjàvu.

Alcance la carta y noté que en el frente estaba escrito "Tommy". La abrí y me asegure de que estaba solo, seguro de estarlo la leí en voz alta.

"Tommy. Gracias. Ahora estoy mejor. Las voces se han ido. Ya no hay dolor en mi pierna. Ya no hay voces en mi cabeza...

Pare de leer ¿¡Todo es igual!?. No. No lo es, aún hay más...