Fairy Oak: Real Life

8.

LUna vez llegamos a la escuela, habían muchos chicos, todos diferentes. Pero no había nadie vestido con esos largos y gruesos vestidos, solo llevaban ropa como la que estaban usando las gemelas.

No habían lindos sombreros ni divertidos peinados. Y tampoco había hadas...

Entramos y una chica rubia nos paró.

-Vaya, miren, chicas. Nerds nuevas -dijo riendose y mostrando sus blancos dientes.

-¡¿Y tú con quién crees que estás hablando?! -saltó Pervinca.

-Cuidado con esa boquita, renacuajo -dijo una de las chicas que acompañaba a la rubia.

-No, dejala. No sabe lo que hace y será un honor ponerla en su lugar -dijo esta para tirarse sobre Vi.

-¡VI! -gritamos todos.

Pero no era necesario preocuparnos, en un abrir y cerrar de ojos, Pervinca tenía a la chica rubia cara contra el suelo y un con un brazo doblado en la espalda.

Todos quedamos atónitos. Grisam la miraba con orgullo, Babú se reía de la rubia y Flox estaba atenta a una mariposa. 

-¡Sueltame! -ordenó la rubia.

-No te metas conmigo, rata, ¿quedó claro? -vociferó Vi, atrayendo la atención de todos los presentes en la entrada de la escuela.

Pervinca se levantó y la rubia igual. 

-Lo lamentaras, tonta. Esta es MI escuela.

-Eso ya lo veremos -dijo Vi, para luego simular que se le iba a tirar encima y ver como las tres tontas salían corriendo.

Todos estallamos en risas. 

-Esa estuvo buena, Vi -dijo Babú.

-No tenían oportunidad -dijo Grisam.

-Esa chica es Scarlet -dije yo, mirando por donde aquellas tres chicas se habían ido.

-Imposible, Felí -dijo Flox.

-En cada dimensión hay uno de nosotros, pero diferente. Y cuando nosotros llegamos, nuestros "nosotros" de aquí deben haber desaparecido.

-Tiene algo de sentido -dijo Grisam.

Luego de eso, fuimos a nuestras aulas.

Primer día, ¡acción!