Cap. 10

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-¿Entonces ya le has pedido?
-¿De qué hablas, Butters?- rodé los ojos- está más que claro que somos algo.
El antes mencionado puso su dedo índice y pulgar en el puente de su nariz. Lo conocía tan perfectamente para saber que estaba irritado cuando hacia eso.
-Eres un idiota, Stan, tienes que pedirle por más infantil que lo creas
-¿Pero que puedo hacer?
-Llévalo a un lugar significativo para los dos, la música no puede faltar y llévale flores.
-Yo no haría eso- reí un poco- es muy gay.
-Y como eres gay, lo harás.
Lo miré, fingí estar furioso para intimidarlo y afortunadamente lo logré. Él se encogió de hombros y desvió la mirada a otro sitio.
-Esta bien, lo haré, pero necesitaré tu ayuda.
-Cuenta conmigo- me dio unas palmaditas en la espalda y sonrió.
                           * * * 
Eran las 6 de la tarde; me dirigí a casa de Kyle para invitarlo a salir, esperaba que estuviera ahí si no mi plan se iría directo a la mierda.
Toqué que el timbre y segundos después Ike apareció por la puerta.
-¡Stan!- sus ojos se iluminaron mientras sonreía.
-Hace mucho tiempo que no te veo, has crecido un poco más desde la última vez.
-Lo se, me la pasé muy bien probando tus videojuegos.
-Genial- le dediqué una sonrisa- ¿esta tu hermano?
Ike cerró la puerta en mis narices, ¿qué coño le pasaba a este?.
Esperé algunos minutos y por fin alguien volvió a abrirla.
-Ah, sólo eres tú- rodó los ojos y acomodó su pijama- Ike dijo que una persona atractiva preguntaba por mi.
-Se suponía que yo invitaría a salir a una persona agradable y lo único que obtengo es a un judío en pijama a las 6 de la tarde.
Él sonrió y me dio un ligero empujón que me hizo descender un escalón, a lo que ahora Kyle era más alto que yo. Se agachó para quedar a mi altura y unió nuestros labios en un tierno y corto beso.
-Ahora veo lo que sufres, es horrible ser tan alto- sonreí ante su comentario y lo sujeté por la cintura para luego bajarlo.- ¿Entonces a donde me llevarás hoy?
-Es un lugar que puede que no sea muy bonito pero significa mucho para mi.
-¿A sí?- asentí en modo de respuesta.
-Pero primero iremos a cenar, así que ve a cambiarte.
Él obedeció y cerró la puerta, pude escuchar como subía las escaleras y pocos minutos después como las bajaba.
-Vámonos- exclamó al abrir la puerta.
-Espera.
Estaba vestido con su atuendo habitual; chamarra naranja y pantalones obscuros pero no tenía su ushanka verde. Algo característico de él.
Saqué la antes mencionada de mi suéter y se la puse.
-Stan...
-¿Qué pasa?- pregunté divertido.
-Esta cosa es estúpida- intentó quitársela pero lo tomé por las muñecas para impedírselo.
-A mi me gusta
-Deja de mentir
-Lo digo en serio- sonreí y besé su frente aún en la misma posición- vámonos ya.
                               * * *
Nada estaba siguiendo de el plan, mi reservación en el restaurante más importante de South Park se había perdido así que tuvimos que ir al KFC por algunas alitas.
Como el estúpido que soy, derramé el refresco de Kyle sobre su pantalón. Al momento de salir por la puerta , lo empujé hacia la calle y justamente chochó con un señor en bicicleta.
En verdad me sentía como un idiota, lo único que quería era que Butters terminará con nuestro plan.
-¿Estas seguro que no te lastimaste?- volví a insistir por milésima vez, en verdad estaba preocupado.
-Estoy bien, Stan- me tomó de la mano- ¿ya podemos ir a tu lugar "especial"?
Exactamente en ese momento mi celular vibró, abrí el mensaje: "Todo esta listo, puedes traer a Kyle" . Agradecí en mi mente y apreté la mano de mi compañero.
-De acuerdo, pero ten cuidado- le guiñé el ojo en modo de broma recordando el accidente con la bicicleta.
-Eres tan gracioso- hizo una mueca de desagrado para luego salir corriendo a nuestro destino.
Llegamos casi en 5 minutos, pero unos metros antes de llegar le cubrí los ojos para que no pudiera ver la sorpresa.
-¿Qué estas haciendo, Stan?
-Sólo espera
Me tomé un momento para mirar el lugar, no quería que nada arruinara esto. Para mi suerte, todo estaba bien.
Le quité las manos de los ojos, él se quedó admirando el lugar y luego sonrió.
-Hace años que no venía aquí- suspiró- tantas cosas que pasamos aquí.
-Lo se- reí un poco, a lo que Kyle me miró extraño. -¿recuerdas cuando Cartman y tu discutían y yo trataba de separarlos?- él asintió en modo de respuesta y sonrió más.
-Oh, viejo, por supuesto.
Al parecer habían instalado una pequeña banca de madera en la parada de autobús, así que me senté a lo que Kyle me imitó.
-Bueno , dejando atrás todos los recuerdos, tengo que decirte algo.
-Te escucho
-Mira, es difícil para mi decirte esto pero yo...-me quede en silencio, en verdad no sabía si decirlo.- espera, no puedo hacerlo.
-Vamos, sólo dilo.
-De acuerdo- suspiré- y-yo te amo, Kyle .
Esa era la señal para que Butters pusiera la música, saliera con el cartel y afortunadamente lo hizo.
La pista era la correcta, le indiqué a Kyle que mirar hacia atrás para que pudiera ver el cartel pero en eso, comenzó a llover. Corrimos hacia un edificio cercano para refugiamos, ya que llegamos nos sentamos en las escaleras.
Todo se había ido a la mierda, planeé todo para que el maldito clima lo arruinara. Comencé a llorar.
-¿Estas bien?- preguntó mi compañero tomándome de la mano.
-No, Kyle, quería que este día fuera especial y en vez de eso te tiré el refresco encima, te hice chocar con una biblioteca y ahora esto.
-Yo me la pasé muy bien.
-No mientas, estas molesto conmigo.
-Que no- apretó más mi mano.
-Mira lo único que quiera decirte era- tragué saliva- ¿Quieres ser mi novio?
Mi pelirrojo me tomó por la nuca, juntó nuestros labios por unos segundos y luego sonrió.
-Claro que si, Stan, seré tu novio.

¿Es posible mantenerlo? [Style]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora