Desearia que pudieses ser honesta

Capítulo 10

N/A:Aún no termina mi semana difícil pero decidí tomarme un espacio para escribir... y aquí está el capítulo, aunque esté cortito, ya les recompensaré con uno más largo xd

Agradezco sus comentarios, de verdad me alegra que les guste la historia... aunque suene repetitivo que lo diga...

Saludos!

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-Lo hice porque te amo, Kate -Dijo antes de retirarse de la habitación y cerrar la puerta, haciendo que Kate se soltara a llorar con fuerza.

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Rick se asomó 40 minutos más tarde a la habitación, sabiendo que aún había cosas por decir y no se sorprendió al encontrarla dormida, abrazada a la almohada y con el cabello cubriéndole parte de la cara. Lo que acababan de comenzar no ponía terminar ahí. Estaba seguro de que Kate lo entendería, tarde que temprano.

Despacio se metió a la habitación y cerró la puerta tras de él. Todo se sumió en una profunda oscuridad y sin hacer ningún ruido se sentó al borde de la cama, acariciando tiernamente la cabeza de ella, retirándole el mechón de cabello que cubría su rostro y el vendaje. Se quitó los zapatos y subió los pies, recargando la cabeza en el respaldo de la cama.

Aún no llegaba a creerse que tenía a Kate Beckett ahí, con él, y que podía observarla dormir tanto como él quisiera. Días antes se hubiese reído de tan solo pensarlo, pero en ese momento se sentía feliz. A pesar del leve rechazo de ella, se sentía feliz.

Su mano dibujaba distraídas pasadas en el cabello de ella, alborotándoselo ligeramente. Seguía sorprendiéndose de la fragilidad que mostraba. La dura detective Katherine Beckett parecía tan frágil cuando dormía. Con el semblante relajado, los labios ligeramente entreabiertos, la respiración acompasada. Quién iba a decir que tal mujer podría derrochar tanta ternura.

Kate se removió cuando los rastros de sueño iban desapareciendo de su cuerpo y abrió los ojos tratando de acostumbrarse a la oscuridad. Se dio cuenta de la presencia de Castle junto a ella, de sus dedos masajeando su cabeza con suavidad y soltó un relajado suspiro que hizo que la mirada de Rick se posara sobre la de ella al darse cuenta de que se había despertado. Se miraron a los ojos durante unos minutos, transmitiéndose todo el amor que sentían. Era como si con cada segundo que pasara, los fantasmas fuesen desapareciendo, desvaneciéndose.

Sin decir palabra alguna, Kate se incorporó con sumo cuidado y se acomodó en la misma posición que Rick, recargando su cabeza en el hombro de él y sintiendo sus manos rodear su cuerpo en un abrazo protector.

Había tenido bastante tiempo para reflexionar acerca de todo lo que Rick le había dicho. Durante un año él había sabido más que ella en el caso de su madre, durante un año buscó una pista que estaba tan cerca, pero durante un año él se calló todo eso. ¿Y por qué? Para protegerla. Porque a pesar de todo él siempre quería protegerla, y no con la tonta excusa de "somos compañeros", sino porque la amaba. Se lo había revelado el día del tiroteo, después de haber intentado interponerse entre la bala y su cuerpo. Lo había hecho sin pensar en las consecuencias. Sin pensar en su propia vida.

Habían estado a punto de morir en una infinidad de veces y él siempre le había dado fuerza, aunque paradójicamente la policía era ella. Era ella quien debía dar fuerza y había sido él quien la había mantenido a flote desde siempre, incluso antes de conocerse. Y de alguna manera sabía que sería para siempre.

-Perdóname, Kate -Se disculpó Castle luego de unos minutos más en el reconfortante silencio. Necesitaba que ella lo perdonara para poder continuar con lo que habían empezado. Aquella hermosa relación que lo tenía en las nubes, soñando.

Kate sonrió, abrazándose al torso de él y hundiendo su rostro en su cuello. Luego de pasar minutos llorando y otros más pensando, había resuelto que no había nada que perdonar. No cuando él la había perdonado también por su mentira. Mentir dañaba, y en ese momento estaba seguro que intentaría ser lo más honesta posible. No quería volver a sufrir por frases no dichas, o malos entendidos. No cuando le hacía tanto bien la presencia de él. Su cuerpo cálido rodeándola.

-No creo que tenga nada que perdonarte. De alguna manera tengo más que agradecerte, Rick. Estoy viva gracias a ti -Dijo ella con una ligera emoción en su voz que para él no pasó desapercibida.

- ¿Lo dices por el trato? -Bendito Montgomery que se aseguró de que ella estuviera en paz, al menos por un tiempo. En todo caso era por él por lo que Beckett seguía con vida. Si no hubiese sido por dichoso archivo ella probablemente no estuviera ahí. No quería ni pensarlo.

Pero Kate no solo se refería al trato. Tenía tanto que agradecerle a Castle que no encontraba las palabras para hacerlo. Simplemente se sentía sobrepasada por tantas emociones juntas.

-No solo por eso, Rick. Por todo. Tú me has venido salvando desde hace mucho tiempo. Empezando por ayudarme a superar la muerte de mi madre -Kate se sentía valiente. En ese momento no existía la muralla, solo ella y él. Solo sus sentimientos. ¿Estaba mal querer confesarle uno de sus secretos que más guardados se tenía?

- ¿A qué te refieres, Kate? -Preguntó Castle algo sorprendido. ¿Él lo había ayudado a superar la muerte de su madre? ¿Cómo? Despacio la tomó de la barbilla y alzo su rostro para que lo mirara. Kate sonrió mordiéndose el labio ligeramente. Decírselo sería subir su ego hasta las nubes pero no le importaba. Quería que él lo supiera, y ver su expresión.

-Es que... tus libros me ayudaron a superarlo, Castle. Muchísimo antes de conocernos yo comencé a leerte y me diste fuerza. Gracias a ti me hice policía. Me salvaste la vida una vez más, Rick -Castle abrió la boca para decir algo pero no le salían las palabras. Estaba sorprendido.

N/A: Hasta aquí llegamos hoy

Espero poder actualizar pronto

*Grace*