VOZ DE GUADALUPE
Ya habían pasado unas 3 horas desde que escapamos de la cancha dejando a ese grupo de zombis atrás, Luis ayudaba a Pilar recargándola en su hombro mientras yo guiaba el camino entre la neblina. La noche ya había caído y el semblante de Pilar había cambiado bastante ya no era la chava bonita que había conocido durante clases, ahora su aspecto era fatal su rostro ahora era pálido y su mirada reflejaba tristeza y cansancio, la herida en su pierna continuaba sangrando y su respiración cada vez era más lenta.
–Debemos descansar un momento– me dijo Luis recargándose en un poste.
–Por haya está uno de los invernaderos, podríamos descansar ahí– le dije señalando con mi dedo hacia el este.
Luis asintió con la cabeza y entre los dos ayudamos a que Pilar continuara caminando.
– ¿Hacia dónde vamos? – Pregunto pilar con voz débil.
–Te llevaremos para que descanses– le conteste con un tono calmado.
– ¿Cómo te sientes amor? – pregunto Luis tratando de disimular su tristeza.
–Como si acabara de comerme un plato de esas enchiladas que preparaban en la cafetería – contesto Pilar haciendo que los tres soltáramos una leve risa.
Al llegar a la puerta del invernadero esta tenía un candado el cual Luis rompió con una piedra. Al entrar el lugar estaba lleno de diferentes tipos de plantas, todo era verde y con colores muy vistosos provenientes de las flores.
–Pongamos a Pilar ahí – Dijo Luis señalando un sofá que se encontraba al fondo del lugar.
–Necesitamos curarle esta herida, se le puede infectar sino es que ya lo está – Le dije a Luis mientras veía la pierna de Pilar.
Luis saco una botella de agua que estaba en su mochila y con ella lavamos la herida para quitar la tierra y la sangre que tenía, arranque una de las mangas de mi blusa y la utilice como vendaje para tapar la herida.
–Tenemos que salir de aquí y llevarla a un médico – Le dije a Luis con voz baja para no interrumpir el sueño de Pilar.
–Ya lose, pero en esta situación donde conseguiremos a un médico –
–Si no lo hacemos podría morir –Le dije a Luis para que me escuchara.
–Eso ya lose o es que acaso piensas que no me preocupa perder a la mujer que amo. Como crees que me siento al ver que ella sufre mientras yo no puedo hacer nada para salvarla – Me respondió levantando la voz mientras un par de lágrimas rodaban por su rostro.
–Lo siento – Fue lo único que se me ocurrió responder.
Un quejido de Pilar hizo que corriéramos a su lado de inmediato, ella continuaba dormida pero estaba sudando demasiado. Puse mi mano sobre su frente y me di cuenta de que estaba ardiendo en temperatura. En ese momento un fuerte golpe se escuchó en la puerta.
Corrí para asomarme mientras Luis se quedaba con Pilar y pude ver que los zombis habían comenzado a entrar corrí hacia donde estaban mis compañeros, tome una pala y comencé a pelear contra los zombis y mientras peleaba escuche una conversación entre Luis y Pilar.
– ¿Qué está pasando? –Le pregunto Pilar a Luis con un tono más débil que el de antes.
–Nada mi amor, es solo que hemos llegado al final –Respondió Luis acariciando su cabello.
–Un final junto, lástima que esto termine así – Dijo Pilar volteando a verme.
–Al menos lo intentamos pero este es nuestro destino, aquí termina todo y solo quiero que sepas que te amo demasiado –Le dijo Luis a Pilar.
–Yo también te a-m-o – Respondió Pilar mientras se quedaba dormida para ya no despertar.
Luis comenzó a llorar mientras abrazaba el cuerpo de Pilar con todas sus fuerzas, después le dio un beso en los labios y la recostó en el sofá. Tomo un pico y comenzó a romper la pared haciendo un agujero, empezó a abrir unos tanques de gas que estaban alado de unas plantas de tomate, después me tomo del brazo y me empujo por el agujero.
–pe-pero que estás haciendo –Le pregunte mientras él se quedaba dentro.
–Yo no puedo irme y dejar el cuerpo de Pilar aquí pero tampoco te puedo condenar a ti a tener el mismo destino que nosotros –me dijo mientras tomaba en sus brazos el cuerpo de Pilar.
–Sal de ahí, podemos encontrar una manera de salir de la escuela – Dije tratando de convencerlo.
–No puedo, este es mi destino ahora tu busca el tuyo – Fue lo último que dijo mientras encendía un serillo.
Una fuerte explosión me saco volando del lugar, rodé unos cuantos metros hasta que me detuve al levantarme pude ver el invernadero incendiado en llamas, ese lugar tan hermoso lleno de plantas ahora estaba volviéndose cenizas y con el Luis y Pilar habían desaparecido.
La explosión había traído la atención de más muertos, al verlos avanzar el dolor se me olvido por completo y comencé a correr aun con lágrimas en los ojos. Estaba totalmente agotada y sentía que en cualquier momento mis piernas me fallarían. Logre llegar hasta el edificio "H" pero en cuanto pase por enfrente de la puerta una silueta se estrelló contra mí lo que hizo que cayera al suelo y perdiera el conocimiento.
EL CAPITULO ES CORTO PERO PROMETO QUE EL SIGUENTE SERA MAS LARGO
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*Muertos*...
ParanormalEvan es un joven cuya vida da un giro de 360 grados, cuando un día normal en la escuela se convierte en un verdadero infierno para el y sus amigos. Ahora los jóvenes se encuentran en medio de un apocalipsis zombi y están atrapados en su escuela, sin...