Capítulo 32

403 50 6
                                    

Esa desprotección se siente en mi interior; el miedo, la desesperación, el terror va surgiendo en forma cefalocaudal. Busco con la desesperación a punto de desvanecerme del mismo miedo que está en el interior de mi ser. Chrystalle está peor que yo, ella parece caer en cualquier momento y no me siento preparada para encargarme de otro ser que no sea el mío propio.

Tengo que hacerlo. Tengo que hacerlo porque es mi mejor amiga, no nos podemos caer las dos, una siempre tiene que ser fuerte y esa voy a ser yo. Ya que Chrystalle está al borde de su propio abismo.

—¿Dónde demonios está, Jade? —vocifera Chrystalle con su respirando agitada y mirando a todos los lados con la rapidez posible.

Parece estar perdiendo su cordura.

Me acerco a ella y la abrazo con todas mis fuerzas. Tal vez la dos nos necesitamos, necesitamos sentirnos apoyadas y acompañadas. Siento que en cualquier momento se va a desvanecer al suelo. No me explico esa actitud que ella ha adoptado, ella siempre ha sido fuerte, o simplemente es lo que ha demostrado. En este momento, no parece ser la Chrystalle que conozco.

Es como si la debilidad se hubiera apoderado de ella.

—Tranquila Chrys. Todo va a estar bien, bajemos al punto de encuentro y se lo anunciamos a Kyle, él sabrá que mejor hacer.

—Me da pavor, que ellos estén aquí dentro y nos puedan hacer algo —dice con voz temblorosa.

Tomo su rostro entre en mis manos, para que me mire fijamente a los ojos, miro sus ojos con algunas lágrimas a punto de descender hacia su pómulo.

—Mírame muy bien Chrystalle Lawrence. No te puedes debilitar ahora, en estos momentos. Tienes que ser la morena fuerte que has demostrado ser todo este tiempo, ahora tienes que ser el doble de concha de lo que eres normalmente. No puedes dejarte llevar por el maldito miedo.

—Pero en esta situación es difícil Jade —murmura negando con su cabeza.

—¿Acaso crees que no tengo miedo? Estoy cagada Chrystalle pero si me pongo como tú lo haces, nos vamos a morir por ese miedo, entiéndelo amiga.

Siento como un nudo se empieza a formar en mi garganta, odio hablarle de esa manera pero si no lo hago, ella se va a continuar comportándose por un sentimiento que la está manejando a su antojo.

—No quiero ser dura contigo, te quiero y lo sabes pero tenemos que ser fuertes y estar unidas para lo que venga.

Ella asiente.

—Tienes razón Jade, lo siento.

—Ahora, vámonos de aquí. —murmuro.

Narra Calvin

He acompañado a los amigos de Nick, todo este tiempo, han encontrado pruebas atrás de uno de los tantos armarios rancios y sucios en los que hemos buscado. Después de haber terminado con la planta baja, ellos deciden ir al punto de encuentro, como les dicen ellos.

Caminan por el pasillo oscuro y lúgubre cuyo lugar es caracterizado por los casilleros que están instalados alrededor de todas las paredes del corto pasillo mencionado.

—Solo nos falta un lugar y podemos salir de esta mierda, de una vez por todas. Odio tener que estar aquí —comenta la castaña que por lo que he notado es la novia del mejor amigo de Nick.

—No canten victoria tan apresurado, amigos —dice una voz.

Ellos se quedan estáticos en la zona, tragan saliva. El primero que se gira es el chico. Luego las chicas, que al mirar a esa dirección, abren sus ojos más grande que un plato. Kyle se hace para adelante como respaldándolas de ellos. El miedo se empieza a oler por cualquier lugar y no se puede quedar atrás la maldad, porque esa también se está empezando a oler de una manera fuerte, tediosa.

Mi salvación en la oscuridad. (2º MAVDD)| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora