20 de Septiembre de 1984
<< Por suerte , Nick fue mejorando con el paso de los días. Al principio era una tortura para mi. Verlo sufrir , temblar descontroladamente , toser varias veces por minuto, oírlo gritar por las noches... Estaba tan pendiente de él que no me había dado cuenta de que llevaba cinco días sin ducharme. Realmente debía de apestar a horrores.
El 20 de Septiembre se había recuperado totalmente >>- ¿ Abby ? - lo escuché llamarmd y me desperecé en el sofá mientras me levantaba para ver que quería. Apenas había conseguido dormir unas horas .
- ¿ Sí, cielo ? - me sonrojé al darme cuenta de cómo lo había llamado pero a él pareció alegrarle , porque me mostró una sonrisa radiante.
- Estoy bien - confirmó decidido.
- Que seguro pareces - reí pero estuve de acuerdo con él. Las ojeras habían desaparecido de sus ojos, su piel comenzaba a adquirir un tono más rosado y parecía no sentir ningún dolor.
- Es la verdad. Me encuentro muy bien .
- ¿ No te duele nada ? - quise asegurarme.
- No - negó con la cabeza con una sonrisa . Yo me sentí también curada al verlo en tan buen estado. La mala racha había pasado. Él estaba aquí , junto a mi.
- No sabes lo mal que lo he pasado - me derrumbé lanzándome a sus brazos.
- Shh , tranquila. Ya ha pasado todo. Estoy bien, estoy aquí - me susurró mientras me acariciaba el pelo y yo enterré mi cara en su cuello - seguro que ha sido muy duro.
- Estás bien - me separé y recorrí su rostro con mis dedos . Es increíble. ¡ Se ha recuperado ! - ¡ Estás bien !
Enterré mis dedos en su pelo y lo acerqué a mi para besarlo. Lo necesitaba. Pero él me detuvo.
- L-lo siento - me eché hacia atrás confundida. ¿ Por qué me rechazaba ? ¿ No le gustaba ?
- Amor , nada me gustaría más que devorar tus labios pero no quiero contagiarte y que pases por lo mismo que yo - rió al verme apenada por su rechazo y me acarició la mejilla. Sonreí feliz al comprender su razón.
- Sigo sin creerme que no te haya pasado nada y estés perfecto.
- Pues sí . Pero tú... no te ves tan bien. ¿ Hace cuanto que no te preocupas por ti misma ? - estalló en carcajadas .
- ¡Oye! - le golpeé molesta con una sonrisa.
- Lo sieento , era una broma. Sé que estás así porque has estado todo el tiempo cuidándome , y no sabes cuánto te lo agradezco. ¿ Que te parece si te das una ducha y nos vamos a comer por ahí ?