Una palabra que describa mi vida?
Tristeza, una palabra de ocho letras que carcomían mi cuerpo a diario.
No había un solo día en el que esa palabra no se apodere de mi vida.
Y después estaban ellas.
El miedo recorría mi cuerpo cada día, junto con su...
-Todo va a estar bien, todo va a estar bien, tranquila Taylor. Hablaba una voz en mi cabeza que trataba de tranquilizarme mientras me miraba por ultima vez en el espejo.
Un hermoso vestido color rosa se reflejaba en el gran espejo frente a mi, mi cabello estaba aún mas corto de lo usual gracias a la gran equivocación del estilista de Anne, que confundió las ordenes en el salón, pero que gracias a aquello hoy no podría sentirme mas a gusto.
Aun faltaban como 10 minutos para la hora exacta en la que Niall vendría por mi. Quizá se preguntaran un montón de cosas y la verdad es que las cosas cambiaron tanto en estos últimos meses, tanto que no parece real. Niall se a convertido en mi más grande apoyo, nos hemos vuelto muy buenos amigos, luego de coincidir en que ambos estábamos hechos solo para ser amigos, pues así las cosas funcionaban magníficamente. Con mis amigas sólo he hablado un par de veces en este largo tiempo, poco a poco nos fuimos alejando, no se pregunten como, yo tampoco lo se, los días pasaron y a medida de que esta fecha se acercaba, las tres tomamos rumbos diferentes, cada quien ya tiene grupos nuevos de amigas, y se que estuvo mal de mi parte permitir que las cosas lleguen hasta este punto, porque soy consciente de que nuestra amistad se haya ido a la mierda. Supe que Isa termino con Liam, bueno si es que se le puede llamar terminar a algo que siquiera había comenzado, el muy bastardo tenia novia hacia al menos dos años y resultaba ser que eran muy amigos de Harry...
Y cuando ella lo supo y el rompió su bendito corazón, no estuve para juntar los pedazos y tratar de arreglarlo como se supone hacen las verdaderas amigas.
Carol, no se mas de lo que solo puedo observar en los pasillos de la escuela, en el almuerzo o en alguna de las clases que compartimos, el ultimo día que hablamos como amigas que eramos fue hace semanas, cuando ella insistía en que debía alejarme de ciertas personas que no eran de fiar ya que decía que yo era muy ingenua. Ese día todo se fue a la reverenda mierda, nos dijimos cosas que no venían al caso, trayendo inclusive a Harry a nuestra conversación, aquello fue suficiente para acabar con la escasa paciencia que yacía en mi cuerpo.
Mi madre por otro lado a decidido mudarse con mi abuela hace poco más de un mes, y hemos decidido vender la casa, para que los gastos se me reduzcan, porque decidí quedarme y rentar algún departamento chico y ella lo acepto.
Harry...
Sonreí sin siquiera percatarme de que lo estaba haciendo, recordando su hermosa sonrisa.
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A pasado tanto desde la ultima vez que me digne a pensar en el sin llorar, Anne su madre a tratado de mantener contacto conmigo aunque yo tratase de evadirlas siempre por considerar lo mejor para mi, hace un par de meses a nombrado lo bien que le esta yendo a Harry en Nueva York, que esta a punto de graduarse y que no desea volver, aquellas palabras me trajeron un sabor amargo de recuerdos.
(FLASHBACK)
-Harry tu me gustas
pude escuchar su risa ronca llena de tristeza
-te gusto?- hablo acercándose
Yo solo me limité a asentir.
-es un poco tarde para eso- habló
-¿sabes? te he extrañado como la mierda- susurré.
-y yo a ti
-entonces eso quiere dec...
-no quiere decir nada Taylor- interrumpió-debo irme de todas maneras.
No creí que después de haberle dicho un chorro de cosas esas palabras hubiesen salido de su boca.
-¿porque?
-tu me lo pediste ¿no lo recuerdas?
-¿que cosa?
-me pediste que te dejara ser feliz
(FIN DE FLASHBACK)
Y entonces se fue, dejando un gran vació en mi pecho.
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-ya callate-gritó nuevamente mi mejor amigo. -es que es enserio Niall te vez super adorable-agregue apretando mis menos en sus cachetitos rosas. -es enserio Taylor, mi madre a estado molestándome todo el jodido rato desde que me he puesto el maldito traje, juro que si no paras quedaras sin pareja de baile- contraataco apuntándome con su dedo índice -esta bien lo siento- conteste ahogando una pequeña carcajada. -y por cierto, tu no te vez nada mal- interrumpió dándome una mirada de pies a cabezas mientras sus cejas bailaban con alguna insinuación. -basta Horan, deja de coquetear conmigo- sentencié sonriendo ampliamente -yo solo decía que te veías bien no te ilusiones- respondió guiñándole un ojo. Luego de aquello un silencio se apodero del pequeño espacio del auto, solo podía escuchar nuestras respiraciones y el sonido de los autos pasar, el día había llegado. Un acto desprevenido me tomo por sorpresa, el rubio tomo una de mis manos y habló. -hemos llegado al baile de graduación querida Taylor.
