El Fuego

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El príncipe bostezó en eso de las dos de la mañana, se habían quedado dormidos después de varias rondas de sexo, el frío del exterior lo despertó, acostados sobre el césped, era una noche clara.

-mmm Kakarotto sube – lo halaba hacia arriba para despertarlo

-no, no, no Vegeta, no me dejes –hablaba dormido

-¿qué? Lo sacudió hasta despertarlo

El algo somnoliento Gokú se aferró más a su abrazo, para cuando despertó estaba siendo besado por el mayor – shish, shish estoy aquí - le susurraba dándole castos besitos

-¿eh, que pasó?

-¿Qué estabas soñando Kakarotto?

-pesadillas, de cuanto el desgraciado de Yamcha te envenenó

-ya te lo dije, deja eso por un momento – frunció un tanto el ceño – vamos a la cama, tenemos una semana para estar juntos, así lo olvidarás

El menor le sonrió, de seguro se le pasaría, desde que fue envenenado no había tenido mucho tiempo a solas con él. Primero Bulma puso al príncipe a ayudarle con los planos; en eso duraron dos años, mientras el recolectaba todo tipo de metal. Hasta viajó al planeta supremo por el más fuerte del universo, ese mismo que partió en dos la espada Z. –sí, vamos

Recogieron sus ropas y fueron al cuarto para meterse debajo de las cobijas dándose calor.

Mientras tanto...

Al otro lado del mundo ya era de día, Bulma estaba apresurada con todo, las niñas terminaron la convención. Estaba angustiada, tenía un presentimiento de que pronto llegaría la hora para el planeta tierra, observaba a todas esas personas; le angustiaba el hecho de no poder hacer nada por ellos, Wiss se lo advirtió y si quería salvar a sus seres queridos debería abstenerse de decir algo.

En fin, ya resignada se fue a buscar a Goten y a su hijo, estarían en algún bar cercano

, y sí allá estaban tambaleándose al lado de una pared.

-Goten, te amo – le decía fuerte el peli lila

-y yo a ti – alzó su copa – un brindis por nuestro amor prohibido

En vez de eso, el mayor lo agarró contra la barra del bar y le plantó un desesperado beso – un brindis – dijo al separarse para tomar aire.

La peli azul estaba perpleja, no podía creerlo: su hijo y su ahijado "lo digo porque le ayudo en los estudios" estaban igual que su esposo y su amigo, los agarró de las orejas y los sacó donde pudiesen oírla - ¿Qué carajos hacen?

-¡mamá! –Respondió exaltado - ¿Qué te pasa?

-¿Qué me pasa, lo preguntas en serio?

Goten interrumpió para disculparse – Bulma lo siento en verdad, lamento que te enteraras así

-¿desde cuándo? – volteó a verlo acusatoriamente

-desde que papá y el señor Vegeta están juntos, más o menos, eso creo – cruzaba sus dedos esperando un fuerte grito que nunca llegó

-¿y Jade y April?

El peli lila se soltó del agarre de su madre para responderle - ellas lo saben desde cuando eso

Apenas y procesaba la información, deseaba darles una cachetada, pero bueno, no podía hacer nada - ¿y supongo que esas sinvergüenzas aceptaron estar con ustedes?

-pues si mamá, al menos hasta cuando Vegetto y Bardock crezcan.

Estaba nerviosa y lo primero que hizo fue soltar una risa – al menos le diste un nieto al príncipe, y lo pusiste como la fusión de Gokú y él

Si juegas con fuego; te quemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora