Si juegas con fuego; te quemas

Nuestro amor consumado

Pasado el shock, los que no fueron avisados de la destrucción de la tierra se alzaron contra Bulma

-debiste decirnos, cuantos humanos murieron por tu culpa – Krilin se agarraba la cabeza jalándose su crecido cabello

A la peli azul le entró la culpa y decidió pedir unas sinceras disculpas – Lo primero que tengo que decirles que ellos y muchos más eran mis amigos, pero las reglas cambian y las cosas también, hoy comenzamos una nueva vida, aquí hay una nueva humanidad y nos quedaremos.

La puerta de la nave se abrió dejándolos ver el espléndido mundo verde, su atmosfera limpia y gigantesca °°° cuando mi padre me dijo que era grande no imaginé que era un súper planeta. °°° - Bien muchachos, aquí comienzan nuestras aventuras – Bulma dio el primer paso fuera de la maquina seguida por los demás.

-supongo que no tenemos nada – suspiró N° 18.

-si te refieres a dinero no, pero tenemos un vasto mundo sin conocer, creo que es hora de ocuparme de otras cosas que no sean tecnologías – Bulma le dedicó una sincera sonrisa –

Gracias a la ayuda de Dende y Piccolo con sus mágicos poderes, construyeron unas cuantas casas cerca de la ciudad más cercana, en un bello campo y cerca unas de otras. Unos días más y ya se pudieron establecer cómodamente:

Una casa enorme para Bulma, sus padres, Milk, Jade, April, los hijos de estas y por último Bra.

Una mediana para Krilin y su familia

El maestro Roshi y su tortuga, en una cerca del rio

Gohan y su familia, junto a la de Bulma.

Y otra para Vegeta y Gokú, cerca de todos, pero a diferencia de los demás esta tenía puertas herméticas "evitando el ruido... si como no"

Más bien parecía un pequeño caserío, alejado del molesto ruido de la ciudad.

Después de tanto trabajo no les quedaban tantas energías para tener sexo, así que el príncipe y su amante estaban muy abrazados descansando.

-oye amor – susurró el menor

-¿um? – entre bostezos le dio un beso

-¿Cuándo nos casaremos? Dijo inocentemente

-am, am, pues no sé Kakarotto, no creo que sea algo importante - lo besó de nuevo y vio la cara de decepción del menor – a menos que para ti sea muy importante.

-solamente decía, bueno es que como ya vivimos juntos

-descansa, hablaremos mañana - le dio otro beso al menor dejándolo con mucha intriga, pero por su cansancio ambos se quedaron dormidos.

Al día siguiente después de llevar a su hija a la nueva escuela, el príncipe se dirigió a donde estaba su exesposa.

-Bulma – la llamó cruzado de brazos recostado en la puerta de la cocina

-¿sí? Dime Vegeta – le guiñó y continuo en su labor

- Bueno, ya que no me llevo con los otros terrícolas y no tengo a quien preguntarle pues vine contigo – el príncipe temblaba, estaba nervioso y la charla que venía lo ponía aún más

Bulma arqueo la ceja y se volteó para escucharlo con atención

-Bien – respiró una buena bocanada de aire – es que Kakarotto quiere que nos casemos, pero yo no le veo la importancia a eso, anoche lo vi preocupado y no sé qué decirle- la observó por un rato pero la otra no se pronunciaba -¿Qué opinas?