América no supo como llego nuevamente al convento, pero allí se encontraba parada justo delante de la puerta de la superiora, esperando a que abrieran la puerta.
—Hermana América, no pensé que tuviera las agallas para regresar
—bueno... aquí estoy
—si, de eso me doy cuenta —la superiora se acomodo sus gafas observando con desaprobación a América, esa muchacha ya le había proporcionado demasiados problemas, ya no podía seguir en la comunidad— ya me he comunicado con sus padres, usted ya no podrá seguir con nosotras, no es la primera vez que nos ha causado problemas.
—pero...
—pero nada, ya es una decisión, recoja sus cosas hoy es u ultimo día
—pero yo no tengo a donde ir
—eso debió pensarlo antes de traer a semejante clase de personas a hacer una charla motivacional.
—Pero yo no sabía lo que pasaría, por favor no me eche —rogo América
—recoja sus cosas ahora mismo.
La chica desanimada se dirigió a su cuarto a guardar sus cosas al abrir el armario se dio cuenta que toda su ropa eran hábitos, eso es obvio, pensó, América no tenia ni la mas mínima idea de adonde iría, si estaba en ese convento era simplemente por escapar de su familia, y ahora tendría que regresar a su "hogar".
Pensó en su hermana, pero ella vivía al otro extremo del continente, trato de pensar en alguien mas pero no tenia a nadie en el mundo, no tenia mas opciones, se sentó en el frio piso, dejando escapar unas cuantas lagrimas intrusas.
Tomo su maleta y salió rápidamente, empezó a caminar por las calles de la ciudad sin saber si quiera a donde ir, no tenia casa, no tenia dinero ni mucho menos comida.
Con una lata de cerveza en las manos Chase se reía a todo pulmón, hace mucho no la había pasado tan bien, esa niña le había alegrado el día, salió al balcón donde encendió su cigarro, escucho el timbre de su apartamento, no esperaba visitas, el chico con tan solo unas bermudas abrió la puerta, sonrió sorprendido al ver a aquella chica.
—sabia que regresarías pero no tan pronto
—Solo he venido porque necesito que me regrese mi dinero —Chase soltó una sonora carcajada.
—pensé que venias a que te diera posada con esa maleta
—por su culpa me han expulsado, y todo el dinero que tenia se lo he dado a usted
—bueno, ya sabes cual es la condición, tu me hablas sobre ti y yo te regreso el dinero
—no le diré nada
—uhh, parece que te quedaras hoy en la calle y sin comida
—por favor —dijo América apunto de los gritos
—bueno tengo un cómodo sofá
—no quiero dormir en su sofá o en su cama o en su piso, ni siquiera quiero entrar a su apartamento solo quiero mi dinero —grito la chica con las mejillas encendidas de rabia.
—mhh, con que ya estas pensando en mi cama —hablo Chase seductoramente.
— ¡No! Solo deme mi dinero
—bueno ya dije cual era mi condición y no soy fácil de convencer.
La chica estaba frustrada de esa conversación, como era posible que tuviera que rogarle a ese chico, cuando gracias a él la habían expulsado, América entro sintiéndose impotente, en serio necesitaba el dinero, pues aun si quisiera regresar donde sus padres necesitaba para pagar transporte, sin dinero no podía hacer absolutamente nada y eso Chase lo sabia.
_______________________________________________________________________
Hello its me!!!! jaja Hola a todos nuevo cap y parece que el destino quiere que los dos se conozcan mmhhhh..... de paso quiero agradecerles por todo su apoyo y desearles una linda navidad y un feliz año nuevo por adelantado, saben que pueden votar y comentar si les gusto Bye Ana.
![](https://img.wattpad.com/cover/55828292-288-k955866.jpg)
ESTÁS LEYENDO
El puto en escape y la monja suicida
Storie d'amore-¡Cállate estúpida!-Grito molesto -Si no fuera por mí no estaríamos aquí-Respondió ella cortante. -Yo sé que me deseas-Dijo Chase acercándose cada vez mas a America -¡Jamás desearía a un puto!-Grito alejándose bruscamente -No es puto, El termino cor...