Prólogo

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Atracción Dominante

Agradecimientos

Antes que nada esta fantasía no habría podido realizarse sin el apoyo de Mafer, gracias por todo. Espero la historia sea de su agrado y la disfruten tanto a cómo yo disfruté escribiéndola.

"Sólo la fantasía permanece siempre joven; lo que no ha ocurrido jamás no envejece nunca". (Johann Christoph Friedrich von Schiller)

Prólogo

-¿¡LISTA PARA VACACIONES DE VERANO LANA!?- gritó Alex con una emoción que asustaba.

-No tanto- dije por lo bajo.

-¡Wow! ¿Qué tienes? Mi madre me ha mandado suficiente dinero para pasarla bien y para que viajemos seguido a la ciudad y liguemos con chicos- suspiré.

La idea de Alex no sonaba muy comprometedora para mi, a veces odiaba regresar a Santa Mónica, porque odiaba pasar todo el tiempo en la playa rodeada de turistas con muy poca vergüenza, yo era demasiado tímida con lo que a vestirse se refiere, como para si quiera usar un swimwear de una sola pieza, en cambio Alex era todo lo contrario a mí. Durante mucho tiempo se había esforzado para hacer que yo cambiara mi forma de ser, aunque de vez en cuando le hacía caso para que me dejara en paz. Yo la quería como una hermana, así que me gustaba verla llena de orgullo cuándo me veía usando algún vestido de ella, de esos que les hace falta mucha tela por debajo.

-Okey eso sería todo, aquí tiene sus dos tickets para el bus directo a Santa Mónica- Alex tomó los boletos y le regaló una enorme sonrisa a la chica del aparador.

-Bien Lana, aquí está tú boleto, debemos darnos prisa antes de que el bus parta- tomé el boleto y asentí. Una vez arriba del bus saqué un poco de dinero para pagarle el boleto a Alex, pero esta se negó –No es necesario, esto corre por mi cuenta Lanita- sonrió.

-Alex... Alex yo...- tenía que hablar con ella un asunto respecto a la universidad y sobre el dinero que mi padre me mandaba. Él no vivía conmigo, vivía en Texas, mi madre murió cuando era pequeña así qué él me enviaba dinero para mis gastos y la universidad, sólo me quedaban tres semestres pero al parecer no los terminaría.

-... Mi padre me ha hecho una llamada el fin pasado y me ha dicho que no podrá seguir pagando la universidad, sólo me enviará dinero para cosas personales y para ayudarte con la renta del apartamento- aparté la mirada y entrelacé mis dedos.

-Lana, sabes qué a mí sólo me queda un semestre, en cuánto salga de la universidad no será necesario que pagues la otra mitad del apartamento, lo pagaré yo, dile a tu padre que espere un poco más-

Mis ojos se llenaron de lagrimas –Alex ¡No! Así no funcionan las cosas, me saldré y buscaré un trabajo para juntar suficiente dinero y volver en cuánto pueda-

-¿Y qué harás sola en Santa Mónica? , yo te cuido, sabes que no somos hermanas de sangre pero para mí lo eres, mi madre no tendrá problemas si yo pago toda la renta- tomó mis manos y me miró fijamente –Tranquila, tu seguirás estudiando y punto-

-Alex...- mis lagrimas salieron rápidamente de mis ojos, no era tan fácil a cómo parecía, mi padre ya no podía seguir pagando más cosas, la situación era difícil, no lo culpaba, jamás me había hecho falta nada, tendría que hacer el sacrificio de trabajar, además sólo me quedaban tres semestres, en cuánto volviera seguiría con mis estudios y me graduaría, sólo debía esperar y conseguir un trabajo cuánto antes.


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