Capítulo 6

1K 116 45
                                    

Los días transcurrieron con rapidez. Murdoc, 2D y Cyborg llegaban al estudio en la mañana, y salían hasta el anochecer. Había mucho trabajo que hacer, como el de perfeccionar los demos y grabar con los numerosos colaboradores.

Para 2D y Murdoc, lo único que compensaba el ajetreo diario era llegar a descansar en la misma cama, sintiendo su calor mutuo y respiración rítmica que resultaba terapéutica, pues al siguiente día amanecían con suficiente energía y voluntad para continuar con su agotador trabajo. Había veces que 2D no podía dormir, normalmente en las noches lluviosas, acompañadas con truenos estrepitosos. Murdoc abrazaba a 2D, que temblaba con miedo, y después de un rato, se tranquilizaba al sentir la piel de su compañero rozando sobre la suya al limpiar las lágrimas que corrían por sus mejillas. Otras veces, 2D se quedaba despierto, cantándole a Murdoc al oído, pues sabía lo mucho que le gustaba, debido a que se podía apreciar una ligera sonrisa en su rostro.

Los primeros días fueron confusos para 2D. Murdoc simplemente lo seguía hasta su habitación y se acostaba junto a él. No hizo preguntas, pues pensó que se trataba de algo pasajero y que pronto se hartaría de estar con él, o simplemente se aburriría. Pero no fue así. Y 2D empezó a disfrutar plenamente de cada momento que pasaban juntos.

Pero había noches que no eran así, noches en las que Murdoc no lo seguía hasta su habitación, ni dormía con él. Había periodos en los que se le veía muy serio, no comía y sólo hablaba para dar órdenes, con una voz apagada. 2D terminaba sintiéndose deprimido, pues siempre pensaba que aquellos días se encontraba molesto con él, a pesar de no encontrar una razón para su enojo.

Murdoc se encerraba en su habitación, y al día siguiente aparecía en el estudio con ojos rojos y letras de canciones nuevas. Letras que impresionaban a 2D por su delicadeza y simbolismo. Muchas de ellas trataban de amor.

2D recordaba muy bien cuando grabaron el video de Stylo, el cual fue totalmente improvisado de alguna forma, pues nadie se esperaba que Bruce Willis apareciera y los persiguiera con el fin de terminar con sus vidas. La experiencia fue ciertamente traumatizante para ambos. Ahora que se encontraban en el proceso de edición, Murdoc le había hecho justicia al video épico, con una lírica reveladora.

"Oh Stylo

Ve para hacer florecer dentro de tu alma

Cuando sabes que tu corazón es puro

El amor es eléctrico"

Otras de las canciones favoritas de 2D,-de las que habían grabado hasta ese momento-, eran rhinestone eyes (tu amor es como diamantes de fantasía cayendo desde el cielo), Empire Ants (y si el mundo entero se estuviera derrumbando sobre ti...), Broken (él es un corazón artificial y el espacio se ha roto) y To Binge (te encuentras a mi lado, ¿pero sigues conmigo?). Sin embargo, aún faltaban otras canciones por grabar, y entre ellas se encontraba aquella a la que le pertenecía el demo que había escuchado la noche que Murdoc había intentado aterrorizarlo con el sonido de las ballenas. 2D no había olvidado la música, que al instante que la escuchó, le fascinó. Y una curiosidad crecía sobre él al pensar en las posibles letras que acompañarían al amistoso ritmo.

2D le había suplicado a Murdoc por semanas ver una película de terror. Murdoc, finalmente, había aceptado. Así que un sábado por la tarde, se encontraban echados en el sillón, decidiendo que película ver.

-¿El amanecer de los muertos o El exorcista?- preguntó emocionado, sosteniendo las dos películas en sus manos.

-Ninguna - contestó Murdoc- He visto ambas una docena de veces por tu culpa, imbécil.

-Y sigues gritando como mujer cuando sale una escena fuerte, como la primera vez.

-Yo no le tengo miedo a nada-refunfuñó Murdoc.

2D reflexionó, y guardó silencio.

-Pero... ¿Qué hay del tipo que vimos cuando llegamos a Plastic Beach, hace algunas semanas, junto al manatí? A él le tienes miedo.

-Hablas del Boogieman. Cualquiera puede sentir miedo con su presencia, incluso yo.

-¿Y quién es el Boogieman?

Murdoc contempló la pantalla frente a ellos, donde se visualizaba su propio reflejo, observándolo con la mirada perdida y angustia en su rostro.

-El boogieman- dijo, sin voltear a ver a 2D- Es un demonio, creado de todo lo maligno del mundo. También es conocido como Sun Moon Stars. Y si te lo preguntas... sí... es a él a quien le vendí mi alma por el éxito de la banda. No cumplí con mi parte del trato y ahora él viene por mí.

-Entonces... ¿Él... está intentando... matarte?- 2D apenas podía pronunciar esas palabras sin romper en llanto o en un ataque de pánico.

Murdoc rio histéricamente.

-¡Sería fantástico si sólo fuera eso! También se llevara mi alma y sufriré terriblemente en el infierno. Bueno, al menos tengo muchos conocidos ahí... incluso tal vez Satán me dará pases gratis para el sauna, ya sabes, por ser cliente recurrente.

Al notar lo alterado que estaba, Murdoc colocó su brazo alrededor de la cintura de 2D, e hizo que se acostara sobre su regazo poco a poco; y después pasó sus largos dedos entre su peculiar pelo azulado.

-¿Entonces, cuál película?- preguntó Murdoc.

-El amanecer de los muertos- murmuró 2D con tristeza.

On Melancholy HillDonde viven las historias. Descúbrelo ahora