Parte 1 - Mi vida diaria

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Parte 1- MI VIDA

Y ahí estaba yo, siendo esclava de mi jefe, aquel hombre que siempre trata de humillarme y hacerme menos hacia sus otras trabajadoras, esas malditas tipas facilonas que simplemente reciben un sueldo más alto que yo nada más y nada menos por acostarse con él.

Muchas veces me sacan de mis casillas y otras solo ignoro mi alrededor.

-¡Fear! ¡Por el amor de Dios! ¿Puedes hacer algo bien por una vez en tu jodida vida? - Grito el estúpido de mi jefe

-Pero Arnold, ¿De qué está hablando? -Pregunte confundida

-Esos refrescos están mal acomodados, sabes a la perfección como me gusta que todo esté en orden.

-Pero a mí me toco acomodar el lugar de los panecillos

-¡Sh! -Me callo frente toda la gente que iba pasando en el mercado - Yo soy tu jefe y yo ordeno que es lo que tienes que hacer

-Lose, y por eso mismo estoy haciendo caso a lo que usted me ordeno, que es ir y acomodar los jodidos panecillos

-¡A mí no me hablas así! -Volvió a gritar enfrente de todos -Tu trabajas para mí y vas hacer todo lo que te ordene sin quejarte, ¿ok? -Me quede callada. Basta de quedar más en vergüenza frente a toda esta gente, ya es la tercera vez que lo hace en una semana.

Estaba harta y cansada, y no solo tenía que lidiar con Arnold, sino también con las estúpidas de mis compañeras, siempre hablando de maquillaje, ropa, joyas, etc. Como cuando solo compraban su ropa y objetos estéticos en tiendas simples y baratas como yo.

Siempre soy la ''chica rara del mercado'' pues soy muy diferente a ellas; me gusta la ropa; si, me gusta el maquillaje; si, me gustan las joyas; ¡También! Pero no estaré todos los días vistiéndome a la moda solo para lucirlo en mi trabajo... Yo siempre estoy vestida con unos vaqueros, tenis converse y una camiseta o blusón de mis bandas favoritas, así es, me gusta el Rock y también un poco el Pop, pero me voy más a lo primero mencionado. Así que ya sabrán por qué mi sobrenombre de ''chica rara''.

Por ahora no estoy estudiando, estoy trabajando pues recién decidí vivir sola en la ciudad de México, mis padres son de Estados Unidos.

Soy hija única así que he recibido el cien por ciento de la atención de mis padres, siempre han estado al tanto de mi hasta ahora, por eso mismo fue difícil que me dejaran vivir sola en este país, mi madre siempre se ha preocupado por mi alimentación, que este bien, que no me enferme y cosas así, y mi padre siempre se ha dedicado por saber qué es lo que me falta de manera económica.

Pero por fin logre convencerlos y ahora tengo cinco meses aquí, cinco meses trabajando en este mercado de mala muerte y no me va muy bien, no solo hablo de las amistades sino también económicamente, me pagan una miseria como cuando mis compañeras tienen un sueldo más alto que mi mismo jefe y sé que corro el peligro de que me corran cuando le respondo de mala gana a Arnold pero no lo soporto.

Lo único bueno es que él no sabe hablar el idioma ingles y puedo insultarlo de esa manera sin que él se entere, en cuanto logre ahorrar lo necesario para mi universidad me saldré de este lugar y buscare otro, por ahora no puedo y no tengo tiempo para buscar otro empleo pues trabajo los siete días a la semana casi catorce horas diarias, ¡es muy cansado!

Mi nombre como ya lo saben es Fear, si, si lose, como ''Miedo'' en inglés, el significado de mi nombre creo es original pues cuando Kendall, mi madre, estaba embarazada de mí, ella tenía muchos riesgos de perderme, incluso ella podría perder la vida al yo nacer.

Desde que supo que era muy riesgoso el embarazo y muy pocas las posibilidades de que yo naciera o ella se salvara, diario decía que tenía miedo y Jorsh, mi padre, la calmaba diciendo ''Miedo aun no nace''.

Nunca supimos por qué mi papa lo empezó a decir, y era casi diario que lo pronunciaban por eso decidieron nombrarme Fear.

-¡Fear! ¡Ven acá! -Arnold volvió a hablarme cuando yo estaba acomodando ahora los malditos refrescos así que camine hacia él

-¿Qué sucede?

-¿Ya viste como están saliendo los panecillos del horno?

-¿Ah? Obvio no, yo solo los estoy acomodando, dígale a Nora que es la encargada de hacer los panes

-¡Pero si tú los estas acomodando deberías de darte cuenta que están mal hechos! -Engroso la voz molesto. Jodeeeer, pero ¿Es que nunca puedo tenerlo contento?

-Haber, veamos: En primera, no tiene porqué alzarme la voz de esa manera ¡Y en segunda! Yo no pedí trabajo aquí como panadera, yo solo acomodo el producto y punto. Y si no le gusta cómo están haciendo los panes, como acomodo las cosas, pues entonces hágalo usted solo -El sonrió con malicia

-SI va a empezar a hablarme de esa manera, entonces es momento de hablar en mi despacho

-No

-¿no?

-No, no quiero, ¡Estoy harta de que siempre me trate como tonta frente a toda la gente! Diario es así y estoy cansada de que me hable de esa manera como cuando hago todo lo posible para tener todo en orden aquí, trabajo catorce horas diarias, casi el triple de lo que sus ''facilonas empleadas'' trabajan

-¡Hey! ¡Más respeto a tus compañeras! Y si no te gusta bien puedes irte, la puerta está muy ancha y sabes dónde queda, nadie te está deteniendo aquí, así que si no estás de acuerdo con mi trabajo te puedes ir -Me quede callada, si decía algo mas o si me movía de ahí podía perder mi trabajo -Anda, vete, no que muy altanera - Lo mire con odio pero no hice nada más que voltearme y regresar al lugar donde los refrescos. Tomaba aire, sino sabía que iba a explotar en cualquier momento






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