Sakura: El experimento 66-6 (borrador)

Capítulo 4 parte 1: Los visitantes

Hola mis lectores, espero que hayan pasado una feliz Navidad y que les hayan traído lo que pidieron (por qué a mi no 7n7) y también que tuvieran un buen inicio de año
Sin más retrasos, aquí el nuevo capítulo que lo disfruten.
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Acaso era verdad, enserio es el, pasó bastante tiempo desde la última vez que lo vi

— ¡Sara! Mi pequeña hermana, acercarte — extendió sus brazos

Mis músculos no reaccionaban, sería un sueño lo que estaba viendo frente a mi. Me quede segundo que parecían horas, si este es un sueño, bueno es el más hermoso que he tenido. Fuese un sueño o no, lo mandé al demonio y corrí directamente a mi querido hermano. Pero el bello momento se vio interrumpido por un acto de torpeza por parte mía, provocó que tropezar haciendo que cayera al suelo golpeado Mi cabeza fuertemente contra el suelo

— ¡Sara! — grito Marcus

Me levanto del suelo a dolorida y con una sensación de cosquilleo en la frente y unas gotas carmesí caen de mi frente, sobre mis ojos, mejillas hasta llegar a mi barbilla. Con el dolor insoportable, me lancé sobre Marcus y la chica que lo acompañaba, manchando sus ropas con la sangre que salía de mi frente a casi a montones
— Te, extrañe Marcus — en ese momento todo mi cuerpo dejó de responder a mis órdenes y caí al suelo de en cansancio

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Dos chicas se miraban directamente a los ojos con un odio infinito

— Tranquila no tienes que enfadar — una chica de cabello negro, con un gorrito púrpura con parche en el ojo izquierdo trataba de tranquilizar a la otra

— Quieres que me tranquilice. Tú no eres como nosotras, no deberías existir

— ¡Oye! No digas cosas de las que te puedes arrepentir

— Yo no me arrepiento de nada, de lo único de lo que me arrepiento, es de haberte conocido...

— ¡Oye! ¡Por favor tranquilizante! — la chica de cabello negro la tomo de las manos

— ¡No me toques maldita! ¡No te me acerques!

— Oye ya vasta — la chica de cabello negro se puso algo tensa

— ¡Quien eres tu para meterte así como así en nuestras vidas! ¡No tienes derecho de estar aquí!

— ¡Ya querida! ¡No me digas esas cosas!

— Alegate de mi, no mejor dicho de todas nosotras

— No yo sólo quería... — la tomo del hombro

— ¡Te dije que mo me tocaras maldita! — la otra chica se ponía cada ves más furiosa — Tu sólo eres un, experimento no eres nada, sólo un error. No eres como nosotras

— Liz ya vasta — dijo una chica de cabello anaranjado

— No, todas sabemos que ella no es más que un error de laboratorio

— ¿Error? — la chica se quitó el parche — ¿Con que un error?

— No, tu no eres un error. Los errores mueren. Tú sólo eres un...

— Liz no se lo digas — la chica de cabello naranja se escondió tras una puerta

— Liz, calma, sólo calmate

— No, ti deberías estar muerta No eres más que un...

— Liz por favor tranquilizante — la chica la tomo del hombro