Hola, es un placer...

Parte 2

Llega muy rápidamente la mañana del miércoles y con ello madrugar de nuevo. Tengo que admitir que a pesar que los martes son tan buenos para dormir y hacer locha, es bastante aburridor quedarme en casa, completamente sola mirando el techo. A veces ni la televisión esta buena, y el único remedio que me queda es ir a la universidad, y llegar faltando como dos horas para la clase, esos son mis martes, jueves y viernes. Pero lo único bueno de mis miércoles, es que no me siento tan sola por las mañanas y bueno, ya por las tardes es un cuento distinto, puede que me quede sola o puede que me este un rato con Lorena mientras ella espera a su amado novio, Juan Camilo. 

En fin, la mañana trascurre con lentitud y cuando llega la hora del almuerzo, espero encontrarme con el chico que conocí el lunes, pero lastimosamente Jesús llega solo y se sienta junto a mi. Tal vez es una señal del destino para que no me involucre sentimentalmente con nadie, como lo hice el semestre pasado con ese chico medio emo. Menudo problema que hice en mi cabeza cuando me entere que aquel chico tenia una novia; fui tan dramática, que fui al psicólogo por accesoria, por que sentía que nada salia bien en mi vida, solo los estudios.  Creo que parte de la ansiedad depresiva que me diagnosticaron hace algunos años, no estaba tan alejada de la realidad, aunque me haya burlado del diagnostico, y es que ni siquiera había hablado con el chico en cuestión el semestre pasado, solo habíamos cruzado miradas y también pudo ser imaginario mio, al igual que la vez que saco una foto mía cuando me estaba riendo con Nathalia, tal vez eso fue imaginación mía. 

Llega por fin la tarde y con ella, la clase de historia. Estoy nerviosa o molesta, últimamente me he estado echando maquillaje, ¿Por qué? por el simple hecho de que un compañero se burlo de mi forma masculina de vestir, y estoy aquí, con un ridículo vestido, mi sombrero preferido y botas, algo maquillada. 

-Hola mujer- dice Ian. 

Ian, al principio me pareció un hombre muy amable, un gigantón bonachón, pero me llamo marimacho, él es la razón por la que ahora uso maquillaje, maldito, pero igual lo considero un buen compañero y a mi loco parecer, creo que yo le gusto, pero la verdad es que no me importa, por que no siento nada por él.

-Hola- digo, levantando la vista de mi celular. Estaba chateando con una antigua amiga del colegio y con Jhosep mi amigo de estados unidos. De inmediato, Ian trata de ver que estoy escribiendo y bloqueo el celular.

-¿Con quien hablas?

-Un amiga y un amigo ¿Por?

-Curiosidad.

-Bueno.

A los minutos llega la profesora y escribe todo un plan de trabajo y nos informa que mañana cambiaremos de salón al cuarto piso, ya que este salón es demasiado caluroso. 

Salgo de clases corriendo, para ver clases de ingles y luego salir mas temprano para encontrarme con Lorena y esperar a que ella salga de clases.

Estar en el sótano de la universidad sola es, a mi parecer, una experiencia traumatice, primero tu celular se comienza a quedar pegado debido a que el Internet no agarra de manera adecuada, no puedes entrar a los salones con computadores por que solo funcionan para hacer trabajos y para finalizar, el frió que hace gracias al aire acondicionado, es glasear. Solo resta quedarte sentada en suelo, chateando con algún amigo. Agradezco que Jhosep no entrara aun al colegio, por que o si no estaría perdida. También agradezco que Diego este conectado; mi amigo de la infancia es útil de vez en cuando.  

Jhosep: Como te fue en clase? 

Yo: Bien, pero ahora estoy sola.

Jhosep: Si estuviera allá te acompañaría, pero solo puedo este medio.

Yo: No te preocupes, estoy esperando una amiga.

Jhosep: Igual, que mal que estés sola.

Yo: Ne  

Jhosep: Ningún chico se te acerca?

Yo: A mi? no

Jhosep: yo me acercaría hablarte, aunque soy un bobo y mínimo ni diría nada.

Yo: siempre dices lo mismo, jajajaja 

Jhosep: Voy a correr al parque, luego hablamos, vale? te escribo apenas llegue.

Yo: Ok

Y con eso me despido de Jhosep, tal vez me escriba mas tarde. Sigo chateando con Diego sobre su ex novia y como ella no ha sido capaz de reunirse con él, para que formalmente terminen la relación. 

Después de lo que yo siento, han sido 3 horas, Lorena sale de clase y me quedo con ella charlado y diciéndonos bromas, hasta que llega su novio. Igual hablo con ellos un rato y se van cuando entro a clases, ya que fueron tan lindos como para esperar a que yo me fuera y no dejarme sola. 

Una relación como la de Lorena y Juan Camilo es envidiable, casi todas las noches de los lunes y miércoles, incluso algunos martes y viernes, Juan Camilo pasa por Lorena a la Universidad, a sabiendas que la universidad de él, queda al otro extremo de la de nosotras, igual hace el viaje hasta acá, para luego hacerle visita a Lorena en casa y como a las 11, marcharse a su casa, que queda al otro extremo de la ciudad y llegar faltando 15 minutos para las 12 de la noche, y todo ese recorrido lo hace en trasporte publico. A veces quisiera tener un chico que me quisiera lo suficiente, como para hacer todo eso por mi, pero siendo sincera, creo que primero me vuelvo monja, a que eso pasara.

Llego a casa como a las 10 de la noche, cambio mi foto de perfil de facebook, por una que me tome en la competencia de mi primo y me acuesto a dormir, pero sin antes estar una hora hablando con Diego y Jhosep.