Torpe. (l.s.)

32.

1 de septiembre de 2020

-No, mamá, no puedo hacerlo, me voy a caer, Gemma tiene razón, haré el ridículo y avergonzare a Louis, que van a decir su amigos, sus tíos. Oh dios, no me va a querer más.- Harry se dejo caer en la silla y se tapó el rostro con las manos. Gemma y Anne sentadas frente a él, lo miraron con cansancio. Era la sexta crisis a lo largo de la mañana y, sinceramente, ya se habían cansado de repetirle lo mismo.

-Él tiene razón, mamá- dijo Gemma de pronto-, no puede hacerlo, lo mejor es que nos vallamos antes de que haga el ridículo, porque si lo hace, Louis lo dejara y si no lo hace, es porque él huyo, de cualquier manera Louis deja de quererlo, así que mejor vámonos.

Harry lo miro con la boca abierta.

-¡Eres un monstruo! ¿como puedes decir todo eso? ¡te odio, Gemma!- y entonces Harry se hecho a llorar de verdad.

-¡Gemma!- esta miro a su hermano con sorpresa y después comenzó a reír.

-Oh dios, creí que funcionaria como psicología inversa, no me mires así, mamá, él siempre me da la contra, se supone que, bueno, no se, pero no eso.

Ahora Anne estaba junto a Harry, pasándole una mano de arriba a abajo.

-Lo mejor seria que traigas a Louis, no creo qu—–

-¡No! ¡el novio no puede ver a la novia antes de la boda! ¡Louis no puede verme!- grito Harry entre lágrimas.

-Joder joder joder, esto es graciosisimo.- dijo Gemma entre risas y, de no ser por el vestido, probablemente estaría hincada por la risa.

Dos toques interrumpieron su risa.

-¿Esta todo bien ahí?- pregunto Louis, su voz baja a través de la puerta.

Harry y Gemma se miraron, y después corrieron hacia esta, ella tratando de abrirla y él tratando de evitarlo, pero ella lo empujó, abrió la puerta y jalo a Louis dentro.

-Louis, mi hermano, la novia aquí presente, ya no se quiere casar.- y Louis, al ver los ojos llorosos de Harry, se lo creyó.

-¡¿Que?!

Harry empujo a Gemma y abrazo a Louis.

-No, si me quiero casar- enterró la cara en el hombro de Louis-, pero ella no deja de decir que no me quieres.

Louis abrazo a Harry protectoramente y miro mal a Gemma.

-¡No seas mentiroso, Harry! Tu eres el que se la ha pasado buscando excusas para no casarte- ahora miro a Louis-. Él cree que va a hacer el ridículo y que tu vas a dejar de quererlo, yo solo le seguí la corriente y se puso como loco.

-Harry, bebé, sabes que por mas ridículos que hagas jamas dejare de quererte.- le dijo Louis, tomándolo de las mejillas.

Harry volvió a llorar y se separo de su futuro esposo, que lo miro extrañado.

-Necesito a Alfred, él es el único que me quiere de verdad.

-¿Que pasa contigo, hermano? Estas todo drama queen.

-Niños, faltan diez minutos para que empiece la misa, deberían ir allá, y Harry, deja tu drama de una vez, esta bien que estés nervioso, todos lo estamos, pero estas comenzando a rayar en la histeria y en lo ridículo, así que para de una vez, limpiate esos ojos y ve a casarte.- Harry miro a su madre, respiro profundo, limpio sus lágrimas e hizo puños sus manos.

-De acuerdo, estoy listo.

-Perfecto- Anne le aliso una arruga en el traje branco-, ve a por ello, hijo.- Harry asintió y salio de la habitación. Gemma y Louis mirando de la puerta a Anne con asombro.

-¿Como ha hecho eso?- pregunto Louis.

-Soy su madre, tiene que obedecerme- dijo encogiéndose de hombro-. Ahora tú, vete, o si no mi hijo en serio hará el ridículo, se supone que tu tienes que estar ahí antes de que él llegue- miro a su hija-, tu también, Gemma.

Ambos asintieron y salieron, Anne siguiéndolos con un suspiro resignado.