Capítulo 7.

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- ¿Cómo llegaste tan rápido al rescate de la joven?.-dijo una voz a mis espaldas, al parecer no me encontraba sola.

- Corriendo, ¿No es obvio?- conteste sin despegar mi vista de la ventana.

- No pudiste llegar tan rápido. No es tan lejos. Pero no puedes llegar tan rápido.- demandó.

- Tal vez ustedes se dieron cuenta algo tarde.- sugerí con una sonrisa ladeada.

- Escuchamos el gritó. Todos salimos de las habitaciones, y al instante también notamos la falta de tu olor aquí.- sentí como su mirada se intensificaba en mi espalda.

- Me alegro que te dieras cuenta que puedes captar aromas, lobito. ¡Bravo! Aprendiste una de tus habilidades, tenemos que celebrar.- dije de manera sarcástica dando aplausos en el aire.

Derek soltó un gruñido - No estoy para juegos. Repito ¿Cómo llegaste tan rápido? - insistió por segunda vez, molesto.

- Ya que tu cerebro no funciona, te lo diré. Estaba en el bosque, sencillo.- respondí.

- ¿Haciendo qué?- atacó.

- No eres nadie para que te de explicaciones.- solté seria.

- Soy un alfa.- gruño más fuerte.

- Que novedad. Te recuerdo que yo también lo soy.- le recordé.

- ¡Simplemente di que hacías!- grito harto.

- Shhh, la gente en las habitaciones del segundo piso intenta descansa.- calle con un dedo sobre mis labios- Y ya que estas tan interesado en saber, estaba recostada en un árbol.

- Tienes una habitación. Puedes dormir en ella, te informó.- trato de imitar mi tono.

- Uy que mal, definitivamente a ti no te va ese tono.- solté con una risita - Estúpida no soy, sé que en las camas se duerme, pero prefería estar en el bosque.

- ¿Que escondes? Tu latino no me convence.- preguntó.

- No escondo nada, Gruñidos Hale.- ataqué.

- ¿Segura? Pues es mucha coincidencia tu rápida presencia en el suceso.- menciono.

- Ah, ya comprendí a que quieres llegar.- di media vuelta para encararlo - ¿Crees que el asesino ayudaría a la presa?, pon atención. Escucha mi latido. Yo estaba en el bosque para tranquilizarme. Llegue rápido por la cercanía.- dije viendo sus potentes ojos - ¿Estoy mintiendo, gruñidos Hale?

- No me llames así.- exigió haciendo brillar sus ojos en rojo.

- Tus ojos no me dan miedo. Y yo te llamo como quiero.- sonreí de manera sínica.

Éste gruño en mi cara, pero yo ni me inmute, le pase por un lado mientras él se quedó como piedra. Entonces con rapidez lancé una patada para atrás, haciendo que la rodilla derecha de Derek se doblará, voltee de manera rápida para soltar otra patada en su otra pierna, logrando que cayese de rodillas, tome sus brazos y los coloque en su espalda, comenzó a forcejear y gruñir, así que mi rodilla se incrustó en su espalda haciendo que su pecho golpeara el suelo. Me acerque a su oido h susurré.-Se me olvidaba. Buenas noches gruñiditos Hale, descansa.- con esto lo solté y emprendí mi viaje hasta la habitación que me correspondía.

Cerré la puerta cuando llegué, y volví a sentarme en la ventana a esperar a Scott y Stiles.

Eran la 1:25 a.m. cuando el humano y el lobo llegaron, decidí posponer la plática con ellos hasta mañana porque su cara de cansancio era muy notable.

(...)

A primera hora del día, ya me encontraba bañada y cambiada, mientras todos despertaron una hora después.

Me llamaron a desayunar, no tenía tanto apetito pero, no iba a ser grosera, ayer ya había rechazado la comida.

Baje a paso lento las escaleras mientras escuchaba las distintas pláticas de los demás, Stiles apareció frente a mí.

- Oh Lea aquí éstas, pensé que no vendrías a desayunar y ya iba a llamarte.- dijo rápido el castaño.

-Pues aquí estoy, te ahorraste unos pasos.

- ¿No dormiste bien anoche? ¿Te molestaron las almohadas? ¿Las sabanas? ¿Tenías hambre?- me bombardeo el castaño.

- Oh no tranquilo. Todo está perfecto, solo no dormí lo suficiente, es todo.- trate de sonar lo más convencible posible.

- Oh bueno, entonces vamos a desayunar.- tomó mi brazo y me jaló hasta llegar al comedor donde se encontraban los demás.

-¡Buenos días, Lea!- saludó la mayoría.

Me acerque más hasta aquella gran mesa, tome una manzana del frutero que se encontraba en el centro de está.

Me ofrecieron que tomara al de lo que habían cocinado ya para ellos mismos, pero me negué.

Cuando Scott y Stiles terminaron de ingerir su plato con una pila de panqueques bañados en miel, me llamaron, así que salimos a la parte trasera de la casa.

- ¿Cómo se encuentra ella?- directo al grano.

- Esta bien, solo fue un esguince.- contesto Stiles.

- ¿Y lo sobrenatural.- mire al verdadero alfa.

- En cuanto eso, creo que le mentí.- rió - L dije que somos seres de bien que ayudamos a los humanos, después dijo que no diría nada, y nos agradeció, pero dijo que mucho más a ti.

- Oh, eres genial creando historia, Scott - comenté - Me alegró que este bien.

- ¿ Y cómo te encuentras tú, Lea?- preguntó Stiles.

- Bien, con un peso menos al saber que Sophia se encuentra bien. Bueno gracias chicos, iré a hablar con Lydia.- informe antes de dar vuelta sobre mi eje, pero una mano sobre mi hombro me detuvo.- ¿Si?

- ¿Hablar con Lydia? Yo te conocí primero Lea, convive más conmigo.- se quejo el humano.

Di vuelta y hable.- Stiles, necesito hablar con Lydia sobre esta ropa, saber si me la puedo quedar, después le comprare otra.

- Oh, necesitas ropa claro.- dijo Scott - Vamos a comprarte ropa, entonces.

- No, Scott. Mañana por la mañana volveré a mis orígenes, necesitó investigar algunas cosas, así que si me encuentro en el camino con algo, pues quiero saber que a Lydia en verdad no le importa su ropa, ya que se nota que la ropa es importante para ella.- explique.

- Iremos contigo.- dijo el humano rascando detrás de su nuca.

- No Stiles. Aquí es su lugar, y ustedes tienen sus asuntos. Yo puedo ir sola, se cuidarme, son mis terrenos, conozco cada parte del pueblo.- comenté.

- Más vale cuidarnos, juntos seremos más fuertes.- insistió Scott.

- Repito, está omega puede cuidarse sola. Gracias por preocuparse enserio, pero ...

- Te acompañaremos, ya está decidido. Mañana, a primera hora estaremos fuera de casa, listos para partir.- declaró Scott, interrumpiéndome.

- Eh dicho que no, Scott. Es un viaje largo, ustedes tienen que cuidar Beacon Hills, tienen el nemeton aquí, es un faro de lo sobrenatural, nunca saben que puede llegar y cuando.- aclaré firme, quería ir sola, es mi asunto.

- A primera hora, mañana. En la puerta principal.- habló Derek a nuestras espaldas, mientras estaba recargado en la puerta trasera.

- Acaso, ¿no te han enseñado a no escuchar conversaciones de otros?- pregunté molesta- Ve y metete en tus asuntos.

- Deberías sentirte agradecida por tener la ayuda de estúpido 1 y estúpido 2.- dijo viendo hacia Scott y Stiles - Y más agradecida por dejarte que te quedes bajo mi techo, para no pasar frío en el bosque sola, y claro el acompañarte en tu viaje.

- ¡Hey!.- soltaron en defensa ambos.

- Si tanto te molesta mi presencia, nunca me hubieras aceptado dentro.- gruñí - No es necesario que me acompañes hasta mi hogar para asegurarte que no regresare más. Por qué no lo haré.- dije totalmente furiosa, en verdad me ponía de malas.

Le di mi última mirada, antes de emprender mi camino directo al bosque.



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