En El Fondo De La Oscuridad

¿OTRA VEZ?

Si, si. Ya se había acabado un año más y otro empezaba, empezaba la mierda. O bueno, eso no creía yo, yo pensaba que todo cambiaría, que dejaría de pasar tantas mierdas. Que aunque para mucho pareciera una puta pendejada, para mi no lo era, para esto era serio. Muy serio. Así no me pasaran tantas cosas como que se muere mi familia en un accidente o quedo inválido. Algo así que realmente vale la pena para estar mal. Pero sinceramente no se ni que me pasaba a mi. Antes me decía a mi mismo que no tenía amigos, pero, si tenía y tengo. Sólo que no le brindaba mucha atención. Me daba igual.

Se iba terminado enero y seguía como vacío.

-Que mierda, el colegio. Otra vez no. -Me dijo un compañero del año pasado reiterandome que ya casi entrábamos de nuevo.
-Si, ¿listo para el reclusorio? -Le respondí.
-Obvio.
-Ah bueno chino.

Que mierda, en serio. Otra vez a ese puto colegio. Aunque en parte era bueno, porque así me salía de casa y no tenía tanto tiempo para pensar en mi, si no que pensaba más en las notas y eso. ¿amigos? Quizá, unos pocos, con los que iba a jugar fútbol en las tardes.

Preciso cuando entré al colegio, me dio una rabia, ¿de qué? De que tendría que verle la cara a toda esa mierda de gente en mi salón. Pero tenía la esperanza de que llegaran nuevos y nuevas. Pero no, los mismos de siempre, que fastidio, pero al menos estaba un compañero, básicamente el único que me caía bien. También escuchaba metal, rock. La musica que yo escucho. Entonces nos llevamos bien. Pero nada de amigos, para el no existían, y para mi aún el no lo era.

Un jodido día lleno de depre, decidí volverme a cortar, pero esta vez no eran las cortaditas de medio pasar, algo así iguales a las de la vez que murió mi amigo. Pero obviamente no tan profundas para no que no sospecharan nada de mi. Que pensaran que yo era normal. Como cualquier otro joven, bueno, no como todos, porque no todos son iguales. Mis gustos de música eran y son muy diferentes y mi actitud es rara, bueno, eso para mi. Porque en lo social casi siempre actuaba normal, no como realmente soy. Y si así me cogían rabia, imagínense como siempre quise ser.
Y más que se vive en una sociedad de bullying, mucho menos iba a ser así, diciendo las ganas que tengo de suicidarme, de cortarme a toda hora, así bien pinche suicida. Pero en fin, oculte todo eso, y sólo se lo decía a mis verdaderos amigos, pero en este caso, a las mujeres, que sólo eran como dos, si, dos amigas y el resto amigos hombres, de esas amistades de estar jodiendo de lado a lado, pero nunca se habla de uno mismo, sólo se vive el presente y ya. ¿qué quienes eran las dos mujeres? Si, ella, mi amiga de Chile, o no se que sería eso. ¿se puede tener una amistad desde una red social? Pues yo no se. Simplemente la quería mucho. Y otra, ah, si, ella no la había mencionado. Veamos, le gustaba la misma música mía, y creo que aún le gusta. No era muy tierna que digamos pero cuando lo era, me cautivava. Tenía un pelo hermoso, piel suave. ¿cómo lo se? Le pedía abrazos, muchos. Me encantaba como abrazaba. Era com tocar una nube, no se como será una nube, pero supongo que así era
También estaba la chica que me había acompañado al funeral de mi mejor amigo. Pero aún no la consideraba mi amiga, aún era una conocida de confianza, mucha confianza.

Al contarme, ella, quien me amenazaba, Kailee, conocida de mucha confianza, me decía que no lo hiciera y eso me hacía sentir que doy lastima, pero así es. Daba lastima. Y mucha. ¿un hombre así? Sentía más bien que yo era mujer, no se. Mi forma de ser tan flor, ganas de todo esto. Supongo que es por lo que las mujeres son las que más pasan por esto. Por eso me sentía así. Luego de un tiempo me daba igual.
Kailee era muy gentil conmigo. Muy tierna. Y decía que se sentía mal cada vez que me cortaba, y eso me ponía peor. Ahora viene una de las otras, la única amiga de por aquí, no de Chile ni de ningún otro país diferente al mío. Su nombre era y obviamente aún es Andy.

-¿cómo está? -Me preguntó.
-Mal -Le respondí sin pensar.
-¿por qué? ¿que le pasó?
-Nada, sólo que no me siento bien.
-Sabe que puede contar conmigo para lo que sea.
-Si, lo sé.
-Ah, mejore por favor.
-¿en serio le importo?
-Si, y mucho. -Me respondió rápidamente.
-¿por qué?