Chicago (Michael Jackson)

Cap.- 12

A muy tempranas horas, ya había bastante movimiento en Neverland, el clima ayudaba a lo que estaba planeado.

Los empleados se movían de un lado para el otro, tratando de cumplir lo que los encargados de la fiesta decían. Sí, dos personas encargadas de una fiesta, bueno, eso no es malo. Lo malo es que ninguno de los dos se ponía de acuerdo. Michael y Mac tenían diferentes ideas.

-Que haces, María? Los globos son por allá –dijo apuntando con el dedo índice al otro lado del jardín-

-Pero el niño Mac me dijo que los trajera aquí

- No hagas caso a Mac, María, solo haz lo que te pido por favor.

- Pero usted me dij..

- Olvida lo que te dije respecto a Mac, solo lleva los globos allá! Al otro lado, ok?

- Como usted diga, Señor Jackson –dio media vuelta y empezó a caminar-

- Espera!! –La mujer de los ojos cafés se detuvo- Tú crees que le vaya a gustar? Pienso que todo esto es ridículo, parece un cumpleaños para un niño de 10, no para una persona madura. No debí dejar que Mac me ayude con esto, no lo digo porque este mal... al contario, pero esto es muy... infantil.

-Está tratando de decirme que la señorita (TN) hubiera preferido una fiesta con alcohol? Y gente... adulta? –rió- Creo que usted la conoce mejor que yo, y a lo poco que sé es que (TN) adora este tipo de cosas... "infantiles", al igual que usted, por algo se llevan tan bien, no? Tranquilo, Señor Jackson. Le va a encantar. –le ofreció una ultima sonrisa y se puso en marcha-

Se le hizo inevitable no sonreír, María tenía toda la razón. (TN) amaba este tipo de cosas, ni él mismo sabía porqué lo había dudado.

-Gracias! –gritó para que lo escuche. Sonrió y se mordió el labio inferior-

- Apúrese, se le hace tarde!!!!!

Michael volvió a la sala principal, dio unos cuantos pasos para acercarse al piano. No podemos negar que Michael estaba nervioso, muy nervioso. Sentía que esto era... ridículamente complicado.

Decir lo que sientes nunca es fácil, eso es una peculiaridad muy interesante en los humanos, pueden hablar hasta por los codos sobre diferentes temas, pueden abrir debates respecto a lo que piensan, sobre cosas que realmente no importan.

Pero si se trata de decir lo que sienten, Ja! Para eso si que no tienen boca. Los humanos no tienen boca, ni manos para hacer o decir lo que verdaderamente importa.

Tan difícil es decir "Te quiero"? Dos palabras, ocho letras, un sentimiento. Millones de emociones encerradas en dos palabras.

Se acercó al piano y de uno de sus bolsillos sacó una hoja de papel doblada en cuatro, antes de sentarse en el pequeño banco de madera, dio un suspiro y se puso a tocar suaves notas musicales mientras tarareaba lo que parecía ser una canción. Una nueva canción.

Perdido en una melodía, perdió la noción del tiempo. Las notas musicales lo atraparon, nuevas ideas rebalsaban su mente, su suave voz lo inspiraba; y como resultado una canción escrita desde el corazón. La más hermosa, jamás antes creada.

-Michael? -no hubo respuesta, estaba muy concentrado en lo que hacía- Michael! –Insistió – Hey! Cabeza de manzana, se te hace tarde. Genial! –dijo entre dientes al darse cuanta que MJ estaba completamente ido. Fue necesario que se acerque y lo interrumpa- Micahel!!

- 0.o! Me asustaste, Mac!! Que pasa?

- Has visto la hora que es?!

- No, porqué no la ves tú?