Tus palabras

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Iokawa no sabía que había pasado era un estúpido, porque había dicho las palabras de esa manera, no debió, ahora estaba aquí con el pobre doncel a punto de dar a luz, vio a un alto hombre acercársele al pelinegro y rabio por una explicación, las palabras parecían estar entre cortadas en su boca, de repente su respiración se aceleró y parecía que le costaba llevar el oxígeno a sus pulmones, vio como rápidamente los médicos se apresuraban atender al chico embarazado, y en su mente se repetía "Estúpido, estúpido, mil veces estúpido"

Sin más que hacer, se cuerpo se dejó caer contra una de las paredes en aquel pasillo, mientras su cuerpo temblaba de desesperación y miedo.

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Yokozawa tenía mucho miedo, su bebe no estaba a tiempo de nacer todavía, los médicos le decían que respirara, además de confundido, todavía no sabía si creer las palabras de aquel hombre, es que era demasiado cruel; y a pesar que sabía que en efecto Kirishima lo había violado, pero ahora que conocía la hombre sabía que eso había sido de algún modo; totalmente fuera del carácter del hombre, claro todavía no se explicaba que lo había llevado a arrebatarle su virtud esa noche pero él jamás haría algo tan cruel como pasar por muerta a su hija y después quitársela. No podía creer, simplemente no podía

Pero si lo que ese doncel decía era verdad, no había perdido a su bebe, y su hijo era una niña y esa niña era Hiyori, pero eso no podía ser, ella había nacido de la esposa de Zen y el. No, no, no simplemente no. Estaba nervioso y las contracciones que estaba sufriendo era espantosas, definitivamente no volvería a tener otro hijo.

Ahhh! – grito Yokozawa, era inminente el nacimiento de Haruka

Kirishima estaba desesperado por lo que estaba pasando, había ayudado a los médicos, a llevar a su pelinegro a la sala de parto, pero él sabía que la situación era muy delicada, tanto para él bebe y para Yokozawa, el niño podía simplemente no sobrevivir y Yokozawa por haberse apresurado, podía morir desangrado, y claro sin agregarle que su hija esta grave en un cuarto de hospital, en momentos como este solo deseaba que poder tener el poder de darles salud y felicidad a las tres personas que más amaba en el mundo.

El a pesar del dolor en su corazón, él lo sabía si Yokozawa no sobrevivía, él no podría vivir más en este mundo.

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Yokozawa estaba desesperado, se debatía entre concentrarse en el dolor, o pedir explicaciones a Zen.

Doctor!- jadeando – quiero a mi esposo – mientras otra contracción lo hizo estremecerse – Ahhh, Tráigalo

El médico sabía que a estas alturas si el parto se complicaba, no sería bueno tener a un esposo preocupado, pero por la cara del doncel simplemente no podía- Trae al esposo- grito al enfermero

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Kirishima Zen – dijo un joven enfermos

Zen al escuchar su nombre se acercó estrepitosamente, "Acaso ya había nacido, era muy pronto, algo iba mal" y mil cosas más pasaron por su mente – Soy yo

Venga por favor, su esposo está preguntando por usted – Zen si decir más asintió y siguió al joven a la sala de partos

Dentro de la sala pudo ver a un muy adolorido Yokozawa

Takafumi aquí estoy – camino rápidamente a su lado mientras tomaba la mano del pelinegro

Zen – dijo bajo- Dime la verdad

La verdad de que cariño- confundido – hablaremos después cuando nuestro hijo haya nacido dijeron ambos bajitos

Yokozawa negó con la cabeza el no podía estar tranquilo lo iba a saber ahora, tenía que saberlo ahora – Yo – las palabras no encontraban forma en su boca

Zen pensaba decirle algo cuando el medico interrumpió – todavía tiene 4 cm, vendré a revisarlo en 10 minutos, por favor vea que no se altere, sé que ya rompió fuente pero le pondremos oxígeno, si no está listo para nacer, en ese tiempo le daremos medicamento para acelerar el parto

Zen tomo una silla cuando el doctor salió de la sala y se sentó al lado de su pelinegro.

Cariño que paso hay afuera que te dijo ese doncel como para ponerte en parto.

Yokozawa entendía la necesidad de Zen de preguntar, pero el que quería respuestas primero- una nueva contracción lo hizo estremecerse, apretando fuerte la mano de Kirishima, mientras aquel dolor que recorría todo su cuerpo disminuía – Ahhh

Zen estaba preocupado, podemos hablarlo después – dijo un poco preocupado

Takafumi respiro profundo- no tengo que saberlo ya- otro jadeo – hace 11 años yo fui violado, a causa de eso – otra contracción – yo quede embarazado, jamás olvide la cara de ese hombre Zen y el día que di a luz fue porque lo vi en la calle pensé que al ver mi vientre de 8 meses me reclamaría o algo por estilo, mas cual fue mi susto al verlo con su esposa embarazada aparentemente – jadeo

Kirishima no entendía porque de después de todos estos meses Yokozawa estaba confesándose, y menos en un momento como este- Amor por favor

¡Calla!- con un chillido – ese hombre Zen ese hombre eras tú

Kirishima estaba impactado, no era cierto

¡Que!

Eras tú, nunca podré olvidarlo – iba a seguir pero una fuerte contracción lo detuvo- Ahhh

Era tiempo él bebe no esperaría más, el medico entro alarmado, rápidamente reviso a Yokozawa – Esta listo, cada vez que sientas las contracciones venir puje – indico el medico

Kirishima no sabía exactamente todo lo que estaba pasando había demasiadas cosas que hablar como, él no había conocido a Yokozawa antes de Marukawa entonces, porque el pelinegro asegura semejante cosa

La sala comenzaba a llevarse de los gritos del menor – Yokozawa pujaba, pero los minutos iban pasando, él bebe no podía nacer, se estaba complicando, Kirishima tenía miedo, lagrimas se comenzaron a acumular en su ojos. No podía perderlo, no quería perder a su ángel –

Ángel

Y como si fuera un golpe, las indiscriminadas imágenes de esa noche hace 11 años regresaron a su vida, no podía ser verdad, acaso, pero porque.

Nunca soltó la mano de Yokozawa, y cierto alivio salió de su cuerpo, cuando escucho llorar aquella pequeña cosita que era su hijo, era tan pequeño solo un instante pudo verlo al final era prematuro, llevándolo a la incubadora, ahora solo quedaba él y Yokozawa, su amado lo miraba expectante, quería seguir la conversación y él también lo deseaba porque ni el mismo se explicaba que fuerza y raciocinio lo llevo a hacer, semejante brutalidad como tomar a alguien en contra de sus voluntad.

Pronto los enfermeros limpiaron a Yokozawa y lo trasladaron a una habitación privada- Kirishima estaba abatido, Yokozawa lo odiaba, el se odiaba a si mismo, y lo peor ahora entendía porque sintió aquel sentimiento de perdida cuando Yokozawa le conto la verdad. Respiro profundo y se encontró al lado del moreno momentos después

Descansa – le dijo a Yokozawa

No- aunque se sentía como si no pudiera mantener los ojos abiertos

Descansa cuándo este despierto hablaremos- beso la frente del menor- Yo velare tu sueño

Yokozawa no quería pero el cansancio era demasiado, sin más se dejó caer en los brazos de Morfeo

Kirishima quedo viendo lo plácidamente que dormía su amado y aunque odiaba romper su promesa, salió de la habitación en busca de aquel hombre que había provocado esta situación el momento mas inoportuno.



Te ame antes de saber que eras tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora