Cap 21-

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Estaba recostada en mi cama con tranquilidad mientras mi hermano se paseaba por mi habitación con nerviosismo. No me había parado de interrogar desde que me vio conversando con el chico en el pasillo.

-Estaba coqueteando con mi hermana - el tono sobre protector de mi hermano era un verdadero fastidio.

-Estaba conversando. Eso fue todo. Además ya paso un día Y deja de caminar de un lado a otro es estresante -termine de hablar relajando mis hombros cerrando los ojos .Escuche el suspiro cansado de mi hermano.

Entre abrí los ojos para observar a mi hermano pasando sus dedos por mis libros en el librero. Uno de los libros estaba mal colocado y callo al suelo con el contacto de los dedos de mi hermano. El libro termino en el suelo de mi habitación. Mi hermano se adelanto pero en vez de devolver el libro a su lugar lo sostuvo en sus manos y lo devolvió a su lugar.

-Tengo que irme. Promete que vas a tener mucho cuidado y protección. Eres mi hermana menor y no quiero que nada te pase. Jamas me perdonaría su murieras- al terminar su expresión estaba seria ,se cruzo de brazos esperando una respuesta de mi parte . Yo afirme con la cabeza ,mi hermano sonrió y se fue de mi habitación con rapidez.

Me quede sumida en mis pensamientos. Cerré los ojos de nuevo las palabras volvieron a mi mente. «Estoy contigo»
Sentía como esas palabras empezaban a cobrar sentido dentro de mi mente. El que escribió eso no buscaba asustarme lo que quería desde un principio era advertirme sobre el peligro.

Suspire hondo. Alguien nos quería muertos. Quieren ver nuestra sangre derramada en el suelo , quieren tener la satisfacción de matar ,de hacer una masacre. Imaginar a mi hermano muerto a Clare es muy difícil imaginarlo. Agite mi cabellera castaña oscura sacando esos pensamientos de mi mente.

Me fui quedando dormida conforme mis ojos se cerraban y mis párpados pesaban todo mi alrededor se volvió oscuridad.
Las paredes eran de un color caoba todo el entorno estaba sumido en oscuridad. Un eco de palabras empezó a estallar en mis oídos. Las palabras estaban mas claras se escuchaban mucho mas cerca.

-Desde que naciste e estado contigo. Nunca te deje sola pequeña siempre te tuve presente. -la voz seguía asiendo un eco por el lugar mientras yo trataba de procesar la información -Tienes un don muy especial pequeña.-la voz se callo de golpe. Sentí como me observan a través de la inquietante oscuridad.

- Estoy contigo. Nunca lo olvides -la voz sigui haciendo un eco hasta que se fue haciendo confuso. Abrí los ojos de golpe. Mi respiración era agitada. Mi pecho subía y baja a ritmo rápido. Todo había sido un simple sueño. Me senté recta en la cama inspeccionando mi habitación. La luz del sol se filtraba por la gruesa ventana. Todo el cuarto estaba iluminado por la luz natural. Me frote los ojos con pereza mientras m levantaba torpemente de la cama. Salí de la habitación tratando de no golpear muy fuerte al salir. Un bostezo perezoso se me escapo cuando caminaba en medio del pasillo tratando de llegar a la parte trasera del instituto.

-Has dormido la mayoría de la mañana y la tarde - el cabello negro de la mujer iba suelto. Tan ligero y hermoso. Sus ojos tan negros la miraron con cansancio y preocupación.

-No e dormido muy bien anoche - trate de sonreír pero no podía mis dudas y preocupaciones sobre aquel sueño estaban en mi mente.

-Necesito hablar contigo - mi madre me observo directo a los ojos mientras yo afirme con mi cabeza. - sigeme - Mi madre empezó a andar por el pasillo mientras yo la seguía. Llegamos a un lugar detrás del instituto. Uno de mis lugares preferidos.

El boscoso lugar con flores crecientes ,unas cuantas hojas en el suelo ,la gran figura del Ángel Raziel en medio de aquel precioso jardín verdoso. Mi mamá continuó su camino hasta una de las bancas solitarias donde se sentó esperándome. Me apresure a caminar hasta sentarme en la banca.

El Antes Del DespuésDonde viven las historias. Descúbrelo ahora