Consecuencias

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Los párpados me pesan y siento que la cabeza retumba,
-Si, en el baño..-
Oigo fragmentos de una charla pero no puedo enfocarme bien en ella.. Me siento muy débil.
Me miro los brazos y la piel se me eriza, están vendados desde un poco sobre los codos hasta las muñecas, yo me hice esto?
Quiero verme las piernas, pero no puedo, estoy tan débil... Que ni consigo levantar la blanca sabana que me cubre.
Sin querer, caigo nuevamente en un largo sueño...

-Jamas te dejaremos, a nosotras siempre nos tendrás..- sollosa alguien.
Esto es tan horrible, no puedo abrir los ojos, no puedo moverme, mi cuerpo no responde a mi!
-Ella va a estar bien! No sufras... Solo te aras mala sangre, ella es fuerte no lo ves?! Ya paso por mucho esto es solo un tropiezo mas!- Alardea alguien... Por su manera de expresar, diría que Mel intenta tranquilizar a Ori, por que Ori es así... Es muy sensible!
Luego ya no puedo oír mas..
De hecho, pasa mucho tiempo y no oigo nada, de vez en cuando siento una que otra presencia. Pero nada claro...
No tengo noción del tiempo, no se que día es, que mes, o si solo han pasado unas horas... Y no hay nadie que me narre sobre el día... Sonrío, May me habría dicho "comprate un meteorólogo!"
Sera que alguien ve cuando sonrío? No lo se...
A veces logro abrir mis ojos, pero nunca hay nadie, no pasan ni dos minutos y vuelvo a caer, es algo que no puedo controlar.

Mientras duermo me pregunto... Quien me trajo al hospital?
Habrá sido mi madre? Tal vez ella encontró algo de humanidad en su ser?
A este paso.. Jamas lo sabré...

Cada día me deprimo mas..
Cuando despierte... Las cosas serán iguales? Aun tendré a mi amigas? Mi abuela seguirá ahí? Que fue de la vida de Ciro? Tal vez... Tomas siguió llevando a su Lucila a la escuela? El me habrá visitado?
Mi madre me habrá visitado?
Mi... Hermano habrá venido mientras dormía..? Al pensar en eso mi cuerpo se endurece, inconscientemente aprieto con mucha fuerza mis puños y el corazón me late a mil. La habitación se llena de enfermeros y alguien grita desesperadamente...
Me inyectan algo en el brazo izquierdo y todo se me nubla, las voces desvanecen y mi cuerpo deja de moverse. Nuevamente, todo es oscuro.
En unas horas (quizá) me despierto...
Intento mover mi brazo y este se cae nuevamente, pero lo moví. Entonces sonrío. Sonrió y sonrió aun mas por el hecho de poder sonreír.
Intento sentarme y me duele mucho el abdomen...
-Eyy nena! Despacio... Tomalo con calma, si?- Me acomoda una enfermera. Yo la miro, trae una bandeja con sopa de arroz. Yo odio la sopa. Me quiere dar de comer como a una bebé. Que le pasa?
Yo corro la cara, ella se asombra.
-Debes comer- Sonríe.
Yo niego con la cabeza, ella también niega, pero ella sonríe. Lo intenta nuevamente y vuelve a fallar, no comeré sopa, y tampoco dejare que alguien me la de en la boca como si fuera una bebé.
-Pequeña... Estuviste casi cuatro meses sin comer, solo te mantuvimos con suero, si no comes, te pondrás mas débil, y estarás mucho más tiempo aquí, es eso lo que quieres?- Mi boca se abre, cuatro meses? Quien alimento a Ciro?
-No tienen sandwiches por aquí?-
Consigo decir, ella arquea una ceja. -No, solo sopa-
Entonces vuelve a insistir, y esta vez sin refunfuñar, cómo como una bebé, es tan raro...
Sin darme cuenta, me termino la sopa. Estaba buena...
La enfermera sonríe y se retira.
Yo por mi parte, entrelazo mis dedos y observo el lugar en donde he estado todo este tiempo... Es una aburrida habitación blanca, muy vacía, sus cortinas son de un amarillo pálido, y los suelos blancos como la nieve y... No hay nada las que describir... Esto es deprimente. O Esto es un loquero? Pues yo no estoy loca! El único detalle, es una pequeña correa que hay en la mesita de noche. La miro... Esto es del hospital? Y hablando de eso... En que hospital estoy?
Como puedo me estiro y agarro la correa, es muy linda, y en su cascabel hay una nota. "Ciro esta muy bien, lo alimente en tu  ausencia *dibujo de gatito feliz*"

Parece la caligrafía de Jazz... Mis amigas estuvieron presentes en todo momento. Eso me alegra, pero a la vez... Me entristece que solo ellas lo hayan estado... Pero eso es lo de menos, ¡Ciro esta bien!
Un cosquilleo me invade y me recuesto. Voy a dormir un rato, pero esta vez, con la consciencia muy tranquila...

Sus tacticas de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora