Contigo Siempre [Siempre Juntos #1]

Capitulo 4

Entré y busque La Oficina del director al llegar me dirigí hacia donde su secretaria la cual era vejestorio de más de 60 años. La señorita Stella Duncan.

-¿Emma Young Lee?- Preguntó Stella

Asentí desconcertada por que al parecer este vejestorio recuerda muchas cosas. Intenté dar mi mejor sonrisa cuando me miró sobre sus chafas las cuales tenían cordones para evitará que se cayeran.

-El director atiende a la señorita Evans, por favor tome asiento y espere su turno con paciencia.

Asentí y tome asiento a unos metros del escritorio de Stella.

Saqué mi celular revisé, habían varios mensajes. 2 de April, 4 de Travis, 1 de mamá, y 3 de papá.

Los revisé y respondí. Para cuando lo note ya Stella me estaba indicando que pasará a La Oficina del director.

Al entrar estaba el director viendo mi archivo. Era uno muy delgado. Me pasó una copia y me indicó que tomará asiento frente a su escritorio.

-Buenos días señorita Young. Bueno la verdad no hay mucho que decir. Usted tiene un expediente muy limpio en todos los sentidos de la palabra. Verá lo que esta institución busca es la perfección en todos los aspectos y para ello es necesario su total compromiso y disposición en cualquier momento y aspecto que lo amerite- Dijo el director -Ese expediente tendrá que dejarlo a sus padres o tutores, a la persona que sea responsable de usted se le harán llamadas semanales para dar breves resúmenes de cómo estuvo su semana en todos los sentidos.

Asentí fingiendo que me importaba.

-Stella le entregará su horario, informe académico de cada profesor, manual de convivencia, logros, número y clave de locker. Ya se puede retirar- Dijo el director

Guardé el informe en mi bolso y salí de La Oficina. Stella me entregó lo que el director dijo.

Mire el horario al parecer voy llegando tarde a la primera hora.

Me dirigí con tranquilidad al locker e inserté la clave y giré la llave. Era un locker muy grande, era más o menos del ancho de un televisor de 48 pulgadas. ¿Que quieren que meta allí? Hasta tenía una especie que tubo metálico y tres ganchos. Quizá eran para el uniforme de gimnasia y para abrigos y chaquetas.

Colgué mi bufanda negra en uno de los ganchos. En un estante puse mis libros y me quedé solo con el de historia universal. En otro estante deje todas las libretas anilladas nuevas que me Kate me había comprado ayer. Agarre la primera y junto a mi lapicera, libreta y libro; fui casi corriendo hasta el salón 792F.

Leí el cartel que tenía en la puerta. Era como una advertencia.

•Stefan Meyer Harries•
Antes de entrar debe tocar la puerta y solo entrará si el docente se lo permite. Esta advertencia aplica solo para personal de alumnado.

En estos momento desearía haber tomado clases de latín en la secundaria para poder entrar a la universidad de Seattle y no venir acá.

Toque la puerta. Oí un "Pase" desde adentro.

Gire la manigueta y entré tímidamente.

Un señor de más o menso 46 años estaba sentado detrás del escritorio de madera pulida.

-Nombre por favor- Dijo este señor mirándome fijamente

-Emma, Emma Young Lee- Dije nerviosa

-Pues señorita Emma tome asiento junto a la joven de piercings.

Asentí y entre todas las personas reconocí el rostro de Travis sonriéndome coquetamente.

Me senté junto a la chica que tenía un piercing en el la parte lateral izquierdo de su nariz, era como una piedrecita brillante. Tenía otro en su ceja izquierda. Y otro en su labios inferior.

En ese momento to tuve la necesidad de preguntarle si le dolió cuando se los pusieron.

Tenía el fleco de color rojo intenso, las puntas izquierdas azul rey y las derechas verde, más la raíces las tenía moradas.

-Soy Cassandra, pero dime Cass- Dijo ella mirando mis mechones rosados- Y querida no te vendría nada mal un piercing. Mi hermano trabaja en un almacén donde los ponen. Te haría un gran descuento.

-Soy..- Me interrumpió

-Ya oí eres Emma Y.

-¿Emma Y?- Pregunté sonriendo

-Aquí solo llamas a alguien por su primer nombre y la inicial de su primera apellido- Dijo ella

Noté que tenía una caja de cigarrillos en en bolsillo de su short negro con manchas de pintura para cabello rojas y azules.

-Ah, mi papá me echaría de la casa si llego con alguna perforación y tatuajes. Así que no, gracias.

Travis se volteo a ver a Cass.

-Tu y yo, helado después de clase. ¿Que dices?- Preguntó Travis sonriéndole a Cass

-Vete a la mierda, aprende a conquistar a una chica- Dijo Cass sacándole el dedo del medio

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Capítulo editado con dedicación. ✔️✔️