CUANDO LO VI POR PRIMERA VEZ

10 0 0
                                    

Era un día como cualquier otro en la oficina, cuando de pronto me notificaron que tenia una llamada, pero no mencionaron quien llamaba.

-Buenas tardes, le atiende Sarah?-

-Sarah, soy Axel. Cómo has estado?, oye necesito que te subas a un avión y vengas a revisar el desastre que tenemos aquí, faltan algunos documentos para arrancar con el nuevo proyecto- escuche bien? quiere que vaya a su ciudad, a su oficina?.

-Déjame revisar mi agenda, estoy por comenzar otros proyectos y aquí es la locura-

-A ver Sarah, seré más claro, o vienes a arreglar todo este desorden o no habrá proyecto- dijo muy serio.

-Tan graves están las cosas?- suspire mientras veía mi agenda- Mira, por la hora ya no hay vuelos para allá, te parece que llego en dos días? es lo más pronto que puedo llegar-

-Ok, te esperamos en dos días, por fin voy a conocer a la chica de la linda voz, avísame tu intinerario para mandar por tí al aeropuerto, adios-

Aprovechando que ya saldría de la ciudad, visité a varios clientes camino a la ciudad de él. Al llegar sentía como cuando un niño quiere bajar a abrir su regalos en Navidad. Más allá de estar nerviosa por la negociación que teníamos que hacer, estaba nerviosa por verlo por primera vez.

Mandaron por mi a unbecario quien amablemente me llevó al hotel para refrescarme y de ahí me llevo al edificio de Master Transfer, era un edificio enorme de cristal, lleno de personas entrando y saliendo con mucha prisa.

A mi llegada, me anunció su secretaria; quizás ella creyó que sólo era una visitante más. 

-El Ing. Femat le atenderá en seguida, si gustas sentarte mientras termina la reunión en la que se encuentra- dijo amablemente su secretaria. 

-Gracias - dije sonriendo mientras me sentaba en aquel sillón color marrón.

Desconozco el tiempo que estuve ahí sentada esperando, pero fue suficiente como para sentir como me ponía cada vez más nerviosa. Mientras esperaba me puse a navegar en Facebook, hasta que escuche pasos y reconocí al instante su voz diciéndome:

-Sarah? - Diciendo mi nombre por primera vez en vivo, en persona.

-Eh, si soy yo. Mucho gusto - Dije un tanto tímida, nerviosa... Quizás hasta se me entrecorto la voz. 

-Pasa a mi oficina mientras esperamos a que los dos asociados se desocupen y podamos empezar con la reunión, mientras tanto tu y yo platicamos - como todo un caballero abrió la puerta y me dejo pasar primero.

No recuerdo exactamente de que hablamos mientras esperamos a sus colegas, lo único que recuerdo es esa sensación de verlo, escucharlo; su mirada, sus gestos; era como si algo dentro de mí me estuviera diciendo a gritos que a su lado estaba mi lugar. 

La reunión resultó un éxito, todo quedo claro, ambas partes resultaron satisfechas con los acuerdos; no es por nada pero siempre he sido muy buena en ese aspecto de negociar, no esperaba menos de esa reunión laboral. 

Al finalizar, de nuevo quedamos solos, sólo él y yo...

-No sabes cuanto he esperado este momento, tengo tanto que platicar contigo Sarah - hizo una pausa algo dramática para mi gusto- pero tengo mucho trabajo, estoy buscando la forma de que pueda invitarte a cenar o a tomar una copa esta noche y poder conocernos mejor. -

-Me encantaría, ojalá se pueda porque me voy mañana en la noche - suspire- yo también quiero que nos conozcamos mejor- 

Pero no estaba designado por el destino que él y yo nos viéramos de nuevo en ese viaje, los tiempos no se acomodaron, las agendas no pudieron sincronizarse y me fui, regrese a casa con la certeza de que esa sonrisa y esa mirada correspondían a esa dulce voz que llevaba escuchando por meses, que los latidos de mi corazón se aceleraron a tal grado que querá y necesitaba volver a experimentar esa sensación. 




Aún todo puede pasarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora