Help me || Vkook

Capítulo 3

//Taehyung//

Estoy preparándome para salir con aquel chico que me invitó a salir con sus amigos la semana pasada, Jungkook. Me he cambiado ya como cinco veces, no me decido por qué mierdas ponerme. ¿Por qué estoy tan nervioso? Ah, sí, porque no quedo con nadie desde el incidente. Perdí todos mis amigos, mis relaciones sociales. Corté todo demasiado rápido. No me sentía con fuerzas para nada y no hacía nada en todo el día. De todos modos sólo he aceptado salir para que el psicólogo me dejase en paz de una maldita vez.

Total, que entre unas cosas y otras se me hizo la hora de salir de camino al bar. No estaba muy lejos de mi casa así que cogí mis auriculares y me fui por la puerta después de avisar a mi madre. Se sorprendió mucho porque le dije que iba a irme con unos amigos, ya que hacía años que no había escuchado salir aquellas palabras de mi boca. Le expliqué que un chico se me acercó en la sala de espera del psicólogo y me propuso quedar.

Cuando salí por la puerta conecté mis auriculares a mi móvil y me puse mi lista de canciones. Mientras caminaba escuchaba algunos temas de rap, otros más lentos. Me gustaban casi todos los tipos de música, podía escuchar de todo en realidad. La música ha sido siempre en lo que he reflejado mis miedos y todo lo que me ha tranquilizado.

Mientras andaba hacia el bar me sonó el móvil, desbloqueé la pantalla y miré de quién era el mensaje. Jungkook.

<Yo ya estoy de camino hacia el bar, ¿y tú?>

Le mandó ese mensaje hace tres minutos. Decidió ir andando un poco más lento para poder llegar después de él, no quería llegar y sentirse incómodo porque no estaba Jungkook todavía allí.

<Yo también estoy de camino.>

Después de otros cinco minutos más andando estaba casi al lado del bar. Estaba viendo desde lejos a alguien viniendo desde lo lejos. Mientras más nos acercábamos me di cuenta de que era Jungkook, éste me miró con una sonrisa radiante y yo intenté darle mi mejor intento de sonrisa, pero seguro que no me salió como esperaba, porque me dio una palmadita en la cabeza saludándome.

-Hola, Taehyung.- Seguíamos mirándonos en la puerta del bar al que me había invitado.

-Hola.- Le dije con una media sonrisa y miré hacia dentro del bar, viendo a unos chicos armando jaleo al final de la barra. -¿Esos de allí son tus amigos?- Señalé hacia dentro mirándolos asustado.

-Sí, pero tranquilo. No te harán nada malo. Sólo son escándalo allá por donde van, venga, vamos dentro.- Me agarró de la mano y me metió dentro. Anduve escondido detrás suya, seguramente me verían como un niño pequeño que está asustado de ir al médico. Nos pusimos detrás de los chicos que estaban mirando a la barra y Jungkook les habló y me presentó.

-Chicos, este es Taehyung. Ya sabéis lo que hacer, tratadle bien o despediros de vuestras vidas.- Me sorprendió lo que les dijo, parecía que se preocupaba por mí. Aunque realmente no sé cómo se siente eso, sólo mi hermana se ha preocupado realmente por mí.

Yo estaba escondido detrás de Jungkook, todavía me tenía agarrado de la mano. Yo miraba sobre su hombro a aquellos chicos que me miraban curiosos con miradas tranquilas en los ojos. Salí un poco de detrás de Jungkook, pero seguía detrás suya encogido en mí mismo y mirando con la cabeza gacha.

-H-Hola...- Creo que casi ni se me escuchó.

-Mira Tae,- él me los señaló de uno a uno, diciéndome sus nombres. -Él es Namjoon, aunque le gusta que le llamen Rap Monster o Rapmon, porque seriamente, rapea como un monstruo, te lo juro.- Me miró serio y yo asentí. Volví mi mirada al llamado Namjoon y me dedicó una sonrisa, yo en respuesta me encogí más en mí mismo.

-Este es Yoongi, pero te aconsejo que le llames Suga porque no es que le guste mucho su nombre.- Este chico se levantó y le pegó levemente en el brazo a Jungkook. Me reí un poco y seguí escuchándole. -Pero que quede entre tú y yo, que le llamen Azúcar le molesta aún más.- Me añadió en un susurro tapando su boca para que no lo escuchen. Volví a asentir y le di una media sonrisa.

-Puede que no lo veas de lo enano que es, pero este es Jimin.- Jungkook sonreía mientras me presentaba a todos sus amigos. Miré al supuesto enano y la sonrisa que me dio me pareció muy tierna.

-Supongo que hablo por todos si digo que estamos encantados de conocerte.- Dijo tendiéndome su mano. Escondí involuntariamente la mano que tenía libre detrás de mi espalda y me quedé mirando la suya. Jungkook le bajó la mano negando con la cabeza, a veces odiaba ser tan antisocial, pero me salía solo.

-Bueno, queda el último. Él es Hoseok, pero le encanta que lo llamen Hope o J-Hope, porque dice que es nuestra esperanza o yo qué sé que mierda.- Jungkook hizo un gesto con la mano como que no le importaba mucho el porqué de aquel mote. Eso me hizo reír tontamente y miré a aquel chico. Tenía una sonrisa de oreja a oreja. Sinceramente, me estaba poniendo tal cara de violador, que me escondí detrás de Jungkook otra vez. -Allí donde lo ves, este es el peor de todos. No te recomiendo que te acerques demasiado a él.- Dijo de coña.

El tal Hoseok se levantó e hizo un movimiento ondeante con las manos hacia arriba. Me hizo reír otra vez, pero me dio un poco de miedito, era un chico muy raro.

-E-Encantado de conoceros chicos.- Dije un poco más alto que la última vez. Todos asintieron en respuesta amigables y Jungkook y yo nos sentamos con ellos en la barra.

Él todavía me agarraba de la mano, y eso que estábamos ya sentados en las banquetas que había en la barra. Me gustaba que estuviera así conmigo aunque no nos conociéramos de nada. Tenía la sensación de que me estaba protegiendo sólo con aquel tacto y que quería que me siguiera protegiendo igual.

-¿Qué quieres tomar, Tae?- Jungkook me preguntó, pero en realidad sólo tenía un poco de sed. Miré toda la barra, todos tenían cervezas y algún que otro mojito. No quería quedar mal.

-Un vaso de agua, por favor.- Le pedí a Jungkook inaudiblemente. Él sonrió en respuesta y me lo pidió, pidiéndose otro vaso para él. Sé que lo hace por mí, aunque intente excusarse. -Muchas gracias.- Le di una de mis mejores sonrisas.

-Muchas de nadas.- Intentaba hacerme reír, y lo consiguió un poco. Reí flojo y bebí un trago de agua. Estaba cómodo con ellos allí, parecían buenas personas, me daban buenas sensaciones.

Charlaban de cosas banales, me reí repetidas veces por los chistes que contaban o por las cosas graciosas que decías o hacían. Todos ellos estaban muy mal de la cabeza en el buen sentido. Esta tarde había sido la mejor de estos últimos tres años. Por una vez he salido y he topado con risas, nuevos amigos y nuevas experiencias. A pesar de que me pasé toda la tarde con un mísero vaso de agua no me bastó más para unirme a su grupo de locos e hice alguna que otra tontería.

Se me pasó la tarde volando. Pasé muy buen rato con Jungkook y sus amigos y se nos hizo bastante tarde allí. Jungkook me acariciaba casi todo el rato la mano, y no me la soltó en ningún momento. Parecía como si se hubiera pegado con pegamento a la palma de mi mano. Me gustaba cómo se comportaba conmigo, creo que seremos buenos amigos.

Nos tuvimos que despedir en la puerta del bar ya que vivíamos en direcciones diferentes. Sólo nos fuimos Jungkook y yo ya que los otros estaban ya medio borracho y seguro que se quedarían allí la mayor parte de la noche. No quería despedirme de él sinceramente, quería quedarme junto a él todo el tiempo. Obviamente no le iba a decir de quedarme con él a dormir, nunca había dormido con nadie que no sea mi hermana.

-Oye... La verdad es que no quiero despedirme de ti.- Me habló con una sonrisa en la cara y me cogió de la otra mano y comenzó a balancear las dos de lado a lado.

-Menos mal que lo has dicho tú...- Digo sonrojándome. No podía evitar ser franco con él, me había tratado demasiado bien.

-¿Querrías quedarte en mi casa a dormir?- ¿He escuchado bien? No puede ser que me haya dicho eso, sólo nos conocemos de dos días. No puede ser, ¿y yo ahora qué le digo?