El Club de Libros.

Capitulo 5.

~Santiago Castillo en multimedia~

-Me gustan las frases inteligentes que él pone en el libro. La que más me gusta es: Una biblioteca es un ojo siempre abierto al universo. Leer es una de las infinitas formas de libertad.- correspondió Isabella.

Isabella Vargas tenia diecisiete años. Sus ojos eran verdes, su cabello rubio oscuro y sus labios carnosos. Era una chica fuerte, pues en ocasiones anteriores había tenido que tomar decisiones difíciles. Había viajado por casi todo el mundo, practicaba ski. Era longboarder.* En multimedia hay una muestra de lo qué es*

-Si, es genial. Yo soy como Samuel Sotomayor, de izquierda. Ya, si nos metemos en política.- opinó Sebastian.

Sebastián León era un chico de diecinueve años. Tenia el pelo rubio no muy abundante. Tenía un poco de vello en la mandíbula. Cejas alborotadas. Tenia la voz gruesa, y era muy inteligente y pensativo. Estudiaba ciencias políticas en la universidad Nacional, ya que era de izquierda. Le gustaban las ideas revolucionarias, pero no le gustaba que su país, Colombia, fuera comandado por una persona de la derecha y que el país estuviera estancado. No le agradaba eso, Colombia tenía tantos recursos naturales... Malgastados. Le daba rabia ver personas tiradas en los pisos del centro de Bogotá con hambre y pobres. " Aquí, en este lugar, -pensaba mientras pasaba por la Plaza de Bolivar- pueden haber tantos ministros, tantos abogados, tantos filósofos, tantos científicos. Y gracias a las drogas, la pobreza y la hambruna están así, pobres y miserables. Aquí pueden haber tantas personas tan inteligentes... Pero por malas decisiones están así, votados en el piso. Sin un hogar, sin un trabajo y vistos como "los intocables" por las personas de estratos mayores. Que tristeza."

-Si hablamos de política... La izquierda es la mejor solución para Colombia. Pero tal vez no le valla muy bien. Pues Venezuela ha estado regido por la izquierda, y miremos cómo está ahora el país.- contraatacó Sofía.

Sofía Cepeda también estudiaba ciencias políticas pero en la Universidad Jorge Tadeo Lozano, ya que no le gustaban las revueltas de La Nacional. También había pensado en estar en La Nacional ya que era una de las mejores universidades publicas de Colombia. Pero ella era de derecha. Sofía tenia la piel blanca, el cabello negro como sus cejas que eran abundantes. Tenía los ojos cafés, los labios carnosos y los pómulos muy marcados.

Alejandra pensó en qué habría pasado si ella hubiera sido Araceli Rodriguez, la chica quien muere en el atentado de Samuel y sus compañeros hacia el coronel Altamirano. Le dolía pensar en los atentados y las personas inocentes que habían muerto a causa de las revueltas de los estudiantes de la universidad Nacional.

***

-¡Las ideas de izquierda son revolucionarias! ¡Los conservadores eran personas que solo pensaban en quedarse como estaban! ¡En eso no consiste ser un país! ¡El presidente debe sacar a su país adelante, vencer la pobreza y lograr la paz! ¡¿Y que ha echo la derecha?! ¡Nada!- gritaba Sebastian León como si estuviera dando un discurso de guerra.

-¡Pablo Escobar era de izquierda y mira a cuanta gente inocente mató!- contraatacó Alejandra.

-¡Si puso tantas bombas era porque no estaba de acuerdo en cómo estaba comandado Colombia en ese momento!- la desafió Santiago. (La autora no es quien defiende a Pablo Escobar, es el personaje)

-¡¿Y es que no hay más soluciones que poner todas las malditas bombas que quiera en donde quiera?! ¡¿No se puede hablar en vez de matar a todo el que se le antoje?!- defendió Camila. Santiago se quedo sin palabras, Camila le había ganado... Desde que la vio supo que le atraía. Le gustaba la manera en la que se vestía, se veía relajada pero bien. Llevaba su rojo cabello recogido en un bollo/ cebolla. Una camisa blanca con letras al azar y un baggie de jean oscuro. Sus zapatos eran botines que en la parte delantera dejaba ver sus dedos de los pies.

-Ganaste.- dijo Santiago derrotado mientras que los otros gritaban defendiendo sus ideas. Camila sonrió con superioridad. -Me caes bien, Camila. Eres inteligente.- Camila levantó una ceja.

-Gracias, tu también me caes bien.- respondió sonriendo.

-¡Colombia está estancado gracias a las ideas de derecha! ¡Colombia necesita ser un país fuerte!
Y así pasaron la tarde. Defendiendo sus ideas y hablando sobre el gran trabajo que había hecho Mario Mendoza escribiendo ese libro.