Shut up! I'm lesbian #Wattys2016

43. In love

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-Despierta, Sky...  -siento que murmuran en mi oído-.

Me desparramo en la cama y me estiro con una gran sonrisa en mi rostro aún sin abrir los ojos. Es realmente una sensación maravillosa cuando duermes con la persona que quieres.

Ashton comienza a darme besos por toda la cara y me retuerso, algunos me dan cosquillas y río.

-Abre esos lindos ojitos, mi amor -me vuelve a llamar y besa mis labios-.

Me despierto y lo veo y él está apenas a unos centímetros de mi cara, mirándome con una brillante sonrisa.

-Buen día -le sonrío perezosa y él besa mi mejilla-. ¿Estamos solos?

-Sí...  los chicos hacen rato que se fueron. Bueno...  prácticamente los corrí porque quería darte una sorpresa -me dice-.  Por cierto... me dijeron que para la próxima no grites tanto -me mira pícaro y yo lo miro asombrada, a la vez que me ruborizaba-. Tranquila, es broma -me sonríe-. ¡Debiste ver tu cara! -ríe y yo le golpeo-.

-¡Me asustaste! -le grito-. Creí que nos habían escuchado...

-Con el sueño que cargaban encima, lo dudo-me sacude el cabello-. Bien, siéntate. Te traje el desayuno.

Le hago caso y me siento. Ashton acomoda la bandeja en mis piernas y comienzo a comer mi desayuno al igual que él.

Es irónico porque una vez me había prometido a mí misma que el día en que tuviera un novio no sería tan cursi ni amorosa. Me empalagaban esas personas que se pasan todo el tiempo con amurracos y besos. Y quién lo diría, ahora soy una de ellas.

Ashton me volvía loca, en el buen sentido. Es increíble el cariño y amor que siento por él. Quisiera que nunca se termine.

-Un dólar por tus pensamientos -me dice él luego de un momento y le sonrío divertida-.

-Deja de robar frases de libros -río-.

-¿Funcionó?

Muerdo mi labio y le acaricio su mejilla- Estaba pensando en lo mucho que te quiero -murmuro y él me sonríe, para luego acercarse a mí y besar otra vez mis labios-.

-Y yo te quiero a ti -le sonrío embobada y seguimos comiendo-. Por cierto... -dice aún con un poco de comida en su boca- esta noche te tengo una sorpresa.

-¿Una sorpresa?

-Así es -sonríe-. Así que al finalizar las clases te espero en el gimansio. Allí te espera tu sorpresa -me guiña un ojo-.

No me gustan las sorpresas. Bueno, por un lado sí. El tema es que cuando sé que me van  hacer una sorpresa me agarra mucha ansiedad con saber qué es.

Terminamos de comer y luego me levanto para ir a cambiarme mientras él me espera. Cuando termino, tomo mi bolso y ambos salimos, tomados de la mano, hacia nuestras clases.

-¿Quieres dejar de moverte? Me pones nerviosa -me cuestiona Mackenzie, ya estábamos en la hora del almuerzo-.

Sí, pasé toda la mañana carcomiendome la cabeza con saber qué sorpresa sería. Y estaba nerviosa por lo que me pasé toda la mañana mordiéndome las uñas y sacudiendo mis piernas.