Shut up! I'm lesbian #Wattys2016

5.Fucking bet

¡¡¡Llegamos a más de mil leídas!!! GRACIAS!

Disfruten:

Al día siguiente hice la misma rutina, me levanté media hora antes que ellos. Claro que no me quedé atrás y se me ocurrió hacerles una broma.

Aproveché mientras dormían y coloqué polvo pica pica en sus calzones. No era una broma muy elaborada, pero era divertido.

-¡Arriba! -grité ya que les había sonado la alarma. Calum casi me arroja la lámpara de luz que estaba en la mesita de a su lado.-Que mañanas hey.

-Cállate Sky. -Luke dio la vuelta para seguir durmiendo.

-Tienen que levantarse -dije- O llegarán tarde.

-No importa, ahí tienes la puerta, puedes irte. -dijo perezosamente Mike.

Diablos, quería verlos en el momento en que se pusieran sus bóxeres.

O mejor, la reacción de después de que se los pusieran. No quisiera verles como Dios los trajo al mundo con sus cosos colgando, claro que no. Tendré que esperarlo para ver después.

Tomé mi bolso y salí. No sin antes haber azotado bien fuerte la puerta. Sí, soy una gran compañera.

Caminé hacia el ascensor, y lo empecé a esperar junto a otros chicos. La mayoría aún tenían aspectos de estar cansados, yo en cambio tenía una mirada que tienen los niños al hacer una travesura.

El ascensor llegó, abrió sus grandes puertas de metal y entramos. Me sentía un poco avergonzada al ser observada por tantos ojos masculinos. Hacía que me sintiera cada vez más chiquita. Vayan acostumbrándose muchachos.

No se si era imaginación mía, pero aquí dentro empezaba a hacer calor. ¿O acaso eran ellos los que estaban muy cerca de mí? Sentí una nalgada en mi trasero haciendo que salte de un respingo. Escuché como reían por lo bajo, los fulminé con la mirada. Volví a sentir otra nalgada.

-¿Qué demon...?-Esta vez uno de ellos tomó mi trasero y lo apretujó fuerte. Dolió demasiado.- ¡Hey!

Que llegue rápido por favor. ¿Es que éste ascensor no se podía apurar?

Lo siguiente pasó rápido: unas manos se posaron en mi cintura atrajendome hacia atrás y en ese instante sentí como un gran bulto se apretaba contra mi trasero. Inmediatamente me di la vuelta y le di una gran golpe en la cara con mis nudillos a aquél enfermo que segundos antes me miraba con picardía.

-Idiotas.

Susurré alto con la intención de que escucharan antes de salir de ahí.

En vez de estar con chicos decentes, pareciera que estoy con críos que tratan de experimentar su sexualidad.

Caminé hacia la cafetería ya que era la hora del desayuno. Al llegar tomé una charola y comencé a hacer fila. Una vez que la tuve me dirigí a buscar alguna mesa.

Los chicos aún seguían durmiendo, así que estaría bien buscar alguna mesa que esté sola, no quiero sentarme con aquel grupo de Amber, tenía mis razones para no hacerlo.

Me senté y comencé a comer mi desayuno. Faltaba poco para ir a clases.

Seguía sin poder creer que estuviera aquí, en esta gran universidad. Nunca había tenido alguna duda cuando de niña decía que iba a estudiar aquí. Que haría lo posible para convertirme no en la mejor, porque era algo imposible, pero sí en una gran doctora.

Desde siempre me gustó la medicina. Cuando era más chica me encantaba ver documentales de operaciones y todo eso. Hasta que mis padres me regañaron porque decían que era muy fuerte como para que lo vea una niña. Así que luego los empecé a ver a escondidas. Eso hasta que tuve suficiente edad de poder verlos sin esconderme.