Raing Savage®

Prologo: El Acontecimiento

Hace 10.000 años, En los vastos dominios del cosmos, hay un mundo singular que destaca entre las constelaciones en la reluciente corona de Draco: el planeta X-60. En este rincón celestial, la naturaleza se despliega en su máximo esplendor, con paisajes que evocan la familiaridad de la Tierra en su mejor expresión. Sin embargo, más allá de su belleza natural, X60 alberga secretos ancestrales y una conexión profunda con el arte marcial más venerado del universo: el Beast Style.

En los confines de este mundo, se extienden campos de entrenamiento donde los habitantes, los Zerecianos, imbuidos con una dedicación inquebrantable, perfeccionan sus habilidades en el arte del combate. Pero la esencia de X60 reside no solo en sus habitantes, sino también en los humanos indígenas que comparten este reino. Estos seres, arraigados de otros mundos, han forjado una relación simbiótica con los Zerecianos, tejiendo un vínculo de armonía que trasciende las diferencias de especie.

Pero lo más asombroso de X60 no son sus paisajes o criaturas, sino el arte marcial más poderoso jamás conocido: el Beast Style. Este estilo de lucha une el usuario con una bestia sagrada que es la guardiana del planeta, otorgándole habilidades y poderes sobrenaturales. Sin embargo, acceder a este estilo no es tarea fácil, ya que solo aquellos que se someten a un entrenamiento estricto de mente y cuerpo pueden ganar el derecho de utilizarlo.

Esta es la historia de un joven victoriano que, de alguna manera, encontró el camino hacia X60. Su viaje está lleno de desafíos, peligros y descubrimientos sorprendentes, y su batalla por dominar el Beast Style será la más difícil que haya enfrentado jamás. ¿Podrá superar los obstáculos y convertirse en el guerrero más poderoso, o sucumbirá ante las misteriosas fuerzas oscuras que acechan en las sombras de X60?

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

En el planeta X60, un mundo envuelto en una fuerte tormenta de lluvia, una habitante llamada Lira observaba el horizonte desde lo alto de una colina. Su piel resplandecía bajo las luces de los relámpagos que iluminaban el cielo oscuro. Los árboles de la selva cercana se sacudían violentamente por el viento furioso, y el rugido del trueno retumbaba en el aire.

De repente, un destello cortó el cielo, y un meteoro descendió con una estela ardiente, estrellándose en la densa vegetación más allá de la selva. Lira se estremeció, su corazón latiendo con anticipación mientras se dirigía hacia el lugar del impacto.

Al llegar, entre los árboles arrasados por el meteoro, encontró a un ser extraño, un humanoide de tonos rojo plateado, tendido en el suelo entre los escombros. Su pecho estaba cubierto por un cristal que brillaba intensamente, latiendo en un ritmo frenético. La criatura gemía de dolor, incapaz de moverse.

Lira se acercó con cautela, observando al ser con curiosidad. Reconoció la insignia en su pecho como una marca de la raza Victoriana, de otra constatación. ¿Qué hacía uno de ellos en X60, y por qué estaba sufriendo de esa manera?

Entonces, mientras Lira contemplaba al ser herido, una luz intensa brotó del cristal en su pecho, envolviendo su forma rojo plateada en un resplandor cegador. Cuando la luz se desvaneció, un hombre yacía en el suelo en lugar de la extraña criatura. Era un hombre joven de aspecto humano, pero su rostro estaba retorcido por el dolor, sus ropas chamuscadas y sus manos temblorosas.

Lira se arrodilló a su lado, sintiendo la urgencia de ayudarle. Reconoció en él la apariencia de los Victorianos que había visto en los registros de su pueblo. Sabía que necesitaba actuar rápido para salvarlo.

Con manos expertas, Lira comenzó a curar las heridas del hombre, utilizando hierbas medicinales que había recolectado en la selva. Con cada cuidado, el hombre parecía recobrar un poco más de fuerza, y su respiración se volvía más regular.

Mientras Lira cuidaba al hombre, recordó las historias de los Victorianos, una raza avanzada con un gran poder y grandes hazañas. Se preguntó qué lo había llevado hasta su planeta, y qué peligros lo habían perseguido hasta allí.

La tormenta rugía a su alrededor, pero en ese momento, entre la lluvia y el viento, había nacido un lazo inesperado entre dos seres de mundos diferentes. Y en ese vínculo, encontraron la promesa de un nuevo comienzo, unidos por la necesidad de sobrevivir en una nueva aventura.

Próximo Capitulo: (CAPITULO 1: "Estilo Bestia")