Supe con certeza que aquellos días eran los últimos. No aguantaba la camisa de fuerza tan apretada como siempre la cual me quitaron por portarme bien, encerrada en aquella habitación acolchada en la que nada más podía llorar. Aquella habitación era la entrada al infierno. No podía estar allí más de dos horas sin desmayarme.
Empezaba a sentir como si un alma ocupará mi cuerpo. Supe que me empecé a volver loca. Decía palabras sin sentido que salían de mi boca sin querer.
Incluso oía voces que me hablaban sin cesar. A pesar de ello podía pensar con claridad. Aquella melodía me adormecía. Podía ver como mis recuerdos pasaban. Cuando mi gato murió lloré demasiado,cuando aquella taza cayó de mis manos derramando el café dentro de ella,cuando derramé las cenizas de mi madre al mar, la primera vez que tiré una moneda a la fuente, la ilusión de tu primera vez en algo... Aquellos recuerdos invadían mi mente... Pero uno en concreto rompió mi corazón en trocitos como si de papel se tratase...
Veía a mi madre... Con aquella caja de música que poco a poco hacía sonar esa melodía... La que me invadía los pensamientos... Mi madre feliz, tocaba esa caja de música. Me tranquilizaba...
Y a día de hoy... Sigo oyendo como mi padre discutía con mi madre y me hacía sentir mal... Lloré.
Aquella caja era la que, por tantas noches me durmió. Recuerdo que mi madre me dijo que nunca perdiese la llave, que sería nuestro secreto...
Unos meses más tarde puedo recordar que mi padre arrancó la bailarina que daba vueltas al son de la música, cerró la caja y golpeó a mi madre con ella...
Dejando a mi madre en el suelo.Ella por miedo no hizo nada. Se encerró conmigo en una habitación. Lo único que recuerdo fueron las palabras de mi madre:
-"Pase lo que pase, guarda la caja de música, y huye de papá".
Ella abrió la puerta y se enfrentó a mi padre, cogiéndole de los brazos, dejándolo inmóvil.
-"Corre" -me gritó-.
Papá la tiró al suelo y mamá comenzó a llorar y gritar que corriese. Desde ese entonces mamá fue arrastrada detrás de la puerta y no pude ver nada más... Yo llamé a la policía, pero para entonces vi a mamá en el jardín, y, no puedo asegurar que su corazón latiera... Y murió así, y no cuando mi padre me mintió, y me demostró que mamá murió de una enfermedad.
Si soy sincera quisiera volver al pasado, ver de nuevo a mi madre sonreír.Y prometí sonreírle a la vida por muy dura que fuese y aquí estoy, en mitad de la nada, sin saber quién soy, y ya ni siquiera sé que hacer...
Una voz interrumpió mis pensamientos más profundos...
-Yui, hoy volverás a casa.
Bien, pensé.
Pero necesitamos una última prueba... Deberás matar a tu madre.
Miré hacia la esquina, allí se presentaba un cuchillo afilado. Me dirigí hacia el cuchillo y lo cogí con especial cuidado. Mi madre estaba allí. Miré el cuchillo que había cogido entre mis manos y ella se tapó los ojos mientras que yo indecisa... Decidí acabar con aquella tortura. Tomé el cuchillo en posición de ataque y me apuñalé.
¡Hola! Aquí acaba mi novela siento que el final sea tan corto. Pero la vida es dura, así que espero que les haya gustado y que hayan disfrutado todos estos capítulos. Porque sin los que leen mis libros, no tendría sentido, gracias a todos aquellos que votan y me dan su opinión. Hago todo lo que me es posible y de nuevo agradecer día a día sus votos y/o comentarios dándome todo su apoyo. Un abrazo muy grande que les llegue a lo más hondo de sus corazones. ¡Chao! ♠♡∞
ESTÁS LEYENDO
¿Quién dijo que el amor no duele?
Teen FictionUna pequeña historia más entre un montón de novelas escritas de nuestra pequeña comunidad. Yui- San una adolescente como otras muchas de su instituto. Pero no como cualquiera. Ella es diferente a las demás, ella no cree que la única belleza que exi...