Las semanas transcurren con calma y Aria no dejaba de rondar por mi mente, la he invitado varias veces a salir, pero Isabel y Oliver están vinculados y aunque me agradan quisiera algo de tiempo a solas con ella y cuando por fin lo logro aparece un... Idiota y lo arruina todo. Han pasado dos semanas desde que me di cuanta que me estaba usando para logar estar con esa tal Luke, ya hemos dejamos de hablar y he de decir que me afecta mas de lo me gustaría admitir.
La puerta de mi habitación se abre y mi buen amigo David entrar por ella.
-Hey. Creí que no vendrías- le digo con una sonrisa.
-¿No venir? Últimamente no te veo, aunque bueno te perdono solo porque se trata de una chica- ruedo los ojos y me acerco a él, David me tiende una caja envuelta en papel de regalo y se siente en mi cama.
-¿Qué es esto?-pregunto girando la caja en mis manos
-Ábrelo- me dice con una pequeña sonrisa, rasgo el papel por completo y abro los ojos ante lo que veo - No pongas esa cara hombre -
-¿Estas loco? ¿Por qué me das esto?- David se encoje de hombros
-Estoy cuidándote. A ti y a Aria. Deberías agradecerme- ruedo los ojos y dejo la caja de preservativos dentro de mi mesa de noche.
-Bueno que es eso tan importante que tenias que decirme- él respira hondo y me mira
-Ian, Diana termino conmigo- abro los ojos y me siento en la cama.
-Vaya, lo siento amigo- él me mira antes de comenzar a reír- ¿Es broma verdad?- asiente aun riendo- No deberías jugar con eso-
-Oh vamos no te molestes. Necesitábamos volver a pasar tiempo de calidad juntos. ¿Sabes cuanto ha pasado desde que te patee el trasero jugando?- sonrió ante sus quejas- Ya llame a Jade y Thomas llegaran en hora y pasaremos una tarde como antes -
- Como quieras ¿Saldremos?-
-Claro que si, temo que has pasado tanto tiempo aquí que seas un ermitaño, además tus padres están en casa y tenemos una reputación que cuidar- ruedo los ojos nuevamente mientras busco una playera que usar, una vez estoy listo salimos de mi casa.- Deberías dejarme conducir-
-Y tu deberías cortarte el cabello, pero ambos sabemos que eso no va a pasar- David, entre cierra sus ojos, le sonrió antes de subir al coche. Jade y Thomas están esperándonos unas calles mas abajo aparco junto a ellos para que suban.
- Vaya el niño perdido ha regresado- dice Jade en cuanto sube al auto, le sonrió y ella me giña un ojo- ¿Tu novia te dejo plantado hoy?-
-No es mi novia Jade- digo con un tono triste, ella mira a Thomas y David antes de comenzar a reír.
-Claro...- suspiro y pongo en marcha el auto.
-¿A donde vamos?- pregunto para cambiar de tema, todos me miran entonces entiendo a donde vamos–Vale- Thomas se estira hasta alcanzar el estero, busca en la lista de reproducción hasta encontrar la canción que quiere.
-Quieres subirle David- este obedece y pronto la música invade el coche.
-Ella durmió al calor de las masas
Y yo desperté
Queriendo soñarla
Algún tiempo atrás pensé en escribirle
Y nunca sorteé las trampas del amor - cantamos todo junto a Gustavo Cerati
-De aquel amor de música ligera Nada nos libra, nada más queda- volver a cantar con mis amigos es algo que no creí que extrañara tanto, así que igual que ellos canto tan fuerte como puedo. No tardamos mucho en llegar a nuestro destino y una vez ahí bajamos el auto.